Aksínia. Síndrome de piernas inquietas. Kseniia Shantceva
Síndrome de piernas inquietas
Kseniia Shantceva
© Kseniia Shantceva, 2018
ISBN 978-5-4493-6406-7
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QUIERO DORMIR
Me gusta el invierno. Me gusta la nieve… Me llamo Aksínia. Yo vivo en Rusia. Mi historia comenzó en el invierno. Enero de 2014. ¿Cuántas estrellas hay en el cielo? Quiero dormir…
– Madre, no sé dónde trabajar-dijo Aksínia.
– ¿Qué te gusta?
– Las matemáticas.
– Piensa, piensa…
– Quiero vivir en el mundo de los números.
– Aksi, hay que dormir-dijo la madre.
“¿Soy feliz¿”
La luna llena la habitación de luz. Aksínia comenzó a girar en la cama.
“¡Me duele, me duele, me duele!” Ahora yo no puedo dormir.
En el consultorio médico.
– Buenos días. Qué te duele? -dijo el médico.
– Yo no puedo dormir. Mis piernas no mienten. Se mueven.
El médico está en silencio.
– Me levanto de la cama y camino por la habitación.
– ¿Cuántos años tienes?
– Tengo 21 años.
– Tienes depresión-el médico respondió bruscamente.
– ¡No! Lo sufro.
Es un día precioso. Amo San Petersburgo. Camino por la ciudad y sueño. ¿Por qué no puedo dormir? En este momento no tengo respuesta. No puedo controlar mi cuerpo. Visitaba los médicos todo el año. Cada noche siento un ataque de piernas. Tengo miedo… Ahora la cama es mi enemigo. Lloro cada noche. ¿Qué es esto? Los médicos no pueden diagnosticar qué me pasa. Los médicos se ríen de mi. No sé que hacer. Me madre también llora todas las noches. Estoy cansada… Quiero dormir. Un médico dijo: “Síndrome de piernas inquietas”. (SPI) Esa frase cambió mi vida para siempre. Pero no tengo ningún tratamiento.
Estoy estudiando en la universidad. Estar en clases después de mis noches es difícil. El síndrome destruye la vida.
Por la tarde, Aksínia bebe té con su madre.
– ¿Por qué estoy enfermo? -pregunta Aksínia.
– No tengo respuesta. Nadie tiene la respuesta.
– Nadie sabe sobre el síndrome. Ahora estoy estudiando neurociencia.
– Seguramente encontrarás la respuesta.
Mamá me ayudaba. Sólo ella me creyó. La gente piensa que estoy mintiendo. El sueño es una necesidad humana importante. La deficiencia en neurología es la pérdida de un órgano o su función. Tengo una deficiencia en el órgano del sueño. El cerebro… ¿Dónde comienza el sueño? ¿El sueño comienza con…? La gente le gusta aconsejar. Pero si no tienes SPI es imposible entender este dolor.
Aksínia escribe su diario todas las noches. Aksínia: “No puedo dormir otra vez. Visité a un neurólogo. Un hombre alto y guapo. Me estoy enamorando de él. Me gusta este sentimiento. Estoy alegre. Él realizó una encuesta. El sistema nervioso periférico no está perturbado. Esta noticia no es ni buena ni mala para mí. Nadie cree que haya un problema. El nombre de mi neurólogo es Igor. ¿Qué piensará él de mí? Igor también piensa que estoy deprimida. Los médicos no quieren entender sobre el Síndrome de piernas inquietas”.
¿Por qué tenemos un sentimiento de amor? ¿El amor consiste en dopamina? La dopamina es un mediador cerebral que produce la anticipación del placer. También las neuronas de dopamine nos dan movimiento. La neuroplasticidad ayuda al cerebro a cambiar sus neuronas. Yo puedo y tú puedes. Me gusta la neurociencia. La ciencia me ayuda a entender mi sueño.
Igor piensa que estoy loca. ¿Cómo probar la existencia del SPI?
Desencadena SPI (triggers): neurolépticos, amitriptilina y otros. Igor me asignó un antidepresivo. Dicho medicamento aumenta el “dolor”. ¿Por qué Igor no sabe de esto? El síndrome es la tortura del siglo XXI. Thomas Willis describió el síndrome en el siglo XVII. En su opinión, el síndrome es un ataque de histeria. Estoy triste… K. A Ekbom en el siglo XX dijo sobre el Síndrome de piernas inquietas. Ahora nadie sabe la causa del síndrome. ¿Cómo dormir?
AKSÍNIA NEUROCIENTÍFICO
¿Qué tal? Te gusta el otoño? Me gusta octubre. Mundo amarillo. Siempre estoy feliz en el otoño. La lluvia calienta el alma. Té caliente y suéter.
Mis amigos piensan que el síndrome no es una enfermedad. La enfermedad está progresando. Me duele sentarme ahora. Dolor de manos y pies. Debido a la enfermedad, no sólo afecta la salud física, sino también otros aspectos. Nuestro estado mental comienza a colapsarse junto con las funciones físicas. Me miro en el espejo, pero veo otra persona. ¿Sabes esto? Renacimiento. Construyo un nuevo “yo”. Reemplacé la palabra soledad con armonía conmigo. El segundo año de mi enfermedad termina. Tengo miedo. No puedo trabajar. Constantemente quiero dormir. Igor no me creyó. Habló de la ausencia del síndrome. Él me mintio. Se aprovechó de mí. Ahora en su clínica dice lo contrario. El síndrome es un misterio. El cerebro no distingue la realidad de la fantasía. Poder del pensamiento. El síndrome es una prueba para toda la familia.
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