Los films de Almodóvar. Liliana Shulman
esta investigación. Gracias, Mihal, por tu paciencia para aclarar cada punto en interminables conversaciones, por compartir conmigo tu vasta experiencia y por alimentar mi curiosidad académica con maravillosas ideas. Ha sido para mí un enorme privilegio poder contar con la guía de ambas. Agradezco a Marsha Kinder, por haber sembrado el interés académico internacional por Pedro Almodóvar ya en 1987, a tan solo siete años de su estreno como director, y a Paul Julian Smith, una constante fuente de inspiración para mí dado su análisis panorámico del cine almodovariano, amén de haber tenido la amabilidad de leer mi tesis. A mis excolegas en la enseñanza de español como lengua extranjera y queridas amigas por siempre Rosalie Sitman e Ivonne Lerner, gracias por el apoyo, el aliento y el buen criterio en sus observaciones. Gracias a Anat Zanger, Henry Unger y a Daniel Blaustein por la confianza que depositaron en mí. Gracias mil a Raanan Rein, por asesorarme y orientarme y a Karina Ramacciotti, por guiarme concretamente hacia la publicación de este libro; a Diejo Pajuelo Almodóvar, de El Deseo, y a Fran Zurián, de la Universidad Carlos III de Madrid, por el tiempo que me han dedicado. A mis hijos, Ariel, Daniela y Jonathan, y sus familias, por estar tan presentes. Y muy especialmente a Jaime, que desde aquella tarde que me dio la mano en Buenos Aires está siempre a mi lado para continuar el viaje en el que hace muchos años nos hemos embarcado juntos.
Prólogo
Paul Julian Smith
Distinguished Professor
Latin American, Iberian and Latino Cultures
CUNY Graduate Center
Mi primera lectura de la disertación de Liliana Shulman ha sido no solo enormemente placentera sino también muy provechosa. Es ahora una gran satisfacción saberla publicada. El motivo central de este libro es el carácter del cine de Pedro Almodóvar según la autora: una narrativa en la que el director entrelaza, cual encaje inteligentemente elaborado, hilos narrativos en los que se anudan reminiscencias personales, alusiones a otros films o al arte en general y, sumado a ellos, una profunda impronta emocional. El encaje, esa manualidad femenina típica del terruño de Almodóvar, irrumpe sorpresivamente en un plano de su undécima película, La flor de mi secreto (1995). Allí está Leo, desengañada del amor y de su trabajo, dejando el frenesí de Madrid para regresar a su aldea tras un fallido intento de suicidio. En su pueblo manchego, en el calor humano y la simpleza de la vida rural, Leo comenzará a paliar su dolor junto a su madre y un grupo de vecinas que hacen el encaje de bolillos regional cantando a coro. Almodóvar rinde homenaje a esa manualidad y a esas vecinas de su tierra justamente en una escena de este mismo film mediante una imagen tomada literalmente a través de una cortina de encaje.
Dicha imagen es más que apropiada para describir este libro, que con habilidad y delicadeza entreteje las diferentes hebras de su material investigativo creando un todo tanto académico como estético. El resultado de las extensas y meticulosas investigaciones de la autora es este volumen innovador en el contexto de los estudios sobre Almodóvar; un director que, después de casi cuarenta años y más de veinte largometrajes, es sin duda uno de los más conocidos en el mundo del cine. Los primeros tres capítulos profundizan en cada una de las tres complejas áreas que componen el encaje cinematográfico almodovariano de autobiografía, intertextualidad y emoción sugerido en el título. No obstante, cada uno de esos temas, por la misma naturaleza del trabajo del director, incursiona constantemente en cada uno de ellos. El último capítulo describe minuciosamente el entramado, la forma en que esos tres hilos interactúan y se entretejen, por medio de una profunda exploración y análisis de tres de sus películas.
Más allá de su éxito comercial y crítico (con algunas de las películas más taquilleras en España y algunos de los más prestigiosos premios del mundo, entre ellos dos Oscar), Pedro Almodóvar es, obviamente, el director de cine español más estudiado y quizás el más académicamente investigado de entre los cineastas europeos contemporáneos. El primero de los temas que trata Liliana Shulman en este libro, la autobiografía, es quizás el más familiar para los interesados en el cine de Almodóvar, puesto que es el método establecido por los críticos españoles. No obstante, la autora trata el tema con cautela. Toma en consideración las múltiples declaraciones del director sobre los vínculos entre su vida y su trabajo, pero examina los datos de manera crítica a la luz de la teoría de auteur, evitando así una expresividad ingenua. Shulman considera aquí la autobiografía como una pose o una posture, término que adopta de la terminología francesa para diferenciarlo del español “postura”. La autora promueve, por lo tanto, una lectura crítica del cine autobiográfico, evitando considerarlo como la representación inmediata de una vida. Ni siquiera en el caso de Almodóvar, quien claramente emplea su nombre y su persona como recurso clave en la promoción de su obra.
La intertextualidad, el segundo tema tratado por este libro, es ya menos estudiada hasta la fecha. La autora denota una íntima familiaridad tanto con el total de la obra de Almodóvar como con la gran cantidad de textos, a la vez cinematográficos y literarios, a los que el director hace explícita referencia en sus películas. Shulman trata la intertextualidad no solo como una excusa para enumerar referencias (aunque Almodóvar lo ha hecho de forma evidente, tanto dentro como fuera de sus películas), sino como una técnica intrínseca al posmodernismo de Pedro Almodóvar y su diálogo artístico con las artes en general. Finalmente, el interesante análisis comparativo del diálogo entre la persona cinematográfica de Almodóvar y la reconocida persona literaria de Truman Capote aporta información y conclusiones detalladas y reveladoras a la vez.
El tercer capítulo sobre la emoción y la teoría de la emoción, un área de reciente importancia en el ámbito de los estudios cinematográficos, es, sin duda, el aporte más significativo de este libro. Si bien Almodóvar ha sido a menudo analizado en el contexto del melodrama como género (también aquí tratado), los estudiosos se han mostrado sorpresivamente irresolutos al abordar el tema de las emociones. A diferencia de ellos, Liliana Shulman argumenta de manera convincente la relevancia de este campo, vital para la adecuada comprensión del trabajo del director. Fundamentada en teorías de la emoción, contribuye a la rehabilitación de las emociones (consideradas previamente fenómenos ingobernables e incluso peligrosos), como procesos no menos importantes que los cognitivos. A través de la emocionalidad en el cine de Almodóvar (la emocionalidad de los personajes, la emoción que invade a los espectadores), la autora ilustra en este tercer capítulo hasta qué punto la emoción es una condición indispensable para relacionarse con el mundo.
Como ha sido ya mencionado, el cuarto capítulo reúne los tres temas anteriores. Para ello, aborda la relación entre la madre y la comarca natal; dos lemas fundamentales e íntimamente relacionados en el cine de Almodóvar, ofreciendo una nueva lectura de ideas como maternidad o terruño a partir de tropos retóricos como metáforas y metonimias.
Un punto notablemente original de este libro, más allá de su temática, es que la autora no se limita, como la mayoría de los investigadores, a las películas más conocidas del director. Shulman también examina en profundidad obras consideradas menores, como la comedia Los amantes pasajeros (2013) y muy en especial Kika (1993), un film poco estudiado aunque merecedor del énfasis que este libro pone en él por ser una sátira premonitora de los reality shows.
En sintonía con lo anterior, este libro es una investigación fluida y a la vez muy coherente. Como he señalado, los tres temas fundamentales son tratados en capítulos separados para ser luego englobados e integrados exitosamente en el capítulo final. Todos ellos, sumados a los datos explicativos de la introducción y a las conclusiones de la autora, servirán de guía a los lectores interesados en una visión innovadora de la obra de Pedro Almodóvar. En cuanto a sus fuentes teóricas, el libro responde a una metodología ecléctica en el mejor sentido, por inferir de una amplia gama de materiales en diferentes idiomas. En él se ponen de manifiesto fuentes teóricas de variado orden y de diferentes disciplinas (entre otras, las ya mencionadas teorías del auteur y de las emociones). A la vez, sus capítulos revelan una lectura detallada de todas y cada una de las películas tratadas y un hábil sondeo de sus respectivos guiones, a partir de los cuales la autora destaca matices de significado en los diálogos. Asimismo, el lector encontrará en este libro una amplia y detallada exposición de tópicos