La formación en investigación en la universidad. Gladys Rosa Calvo
que no sólo se hace cargo de una comisión de Trabajos Prácticos sino que, como investigadora en formación, se integra al equipo de nuestro Programa de Estudios sobre el aula universitaria para investigar con la misma rigurosidad y entusiasmo con que encara todas las tareas. Más adelante tuve el gusto de acompañarla en su primera investigación propia, sustentada en una Beca Orientada otorgada por la UBA; en ella buscó conocer cuál era situación curricular de la Facultad de Filosofía y Letras de esta universidad a principios del siglo XXI, desarrollando un trabajo minuciosamente sistemático acerca de ese precioso objeto privilegiado de la Didáctica Universitaria. No es exagerado afirmar que muchos de los hallazgos de esa joven investigadora contienen elementos de interés actual para la renovación de los planes de estudio de las carreras que se cursan en nuestra facultad.
Relato todo este recorrido para evidenciar que ser su Directora de Tesis Doctoral fue una tarea placentera y gratificante donde la inquietud investigativa iba encontrando su cauce, siempre conjugándose en el encuentro de sus dos focos de interés: los procesos que se viven en el aula universitaria y la investigación.
Tal como se podrá ver en los capítulos de este libro, ese entretejido de intereses le permite a la autora poner en cuestión algunos de los problemas más acuciosos de nuestra institución universitaria: cómo se articulan las diversas prácticas de la profesión de destino en la formación de un estudiante de grado. Y a la par, cómo se relacionan teoría y práctica en esa formación. La dinámica de las prácticas profesionales tal como se expresa en el contexto social, junto a esa relación, son, desde una perspectiva fundamentada crítica, principios fundantes para la construcción del campo de la Didáctica Universitaria. Es en este sentido que se reconocen a la institución, con las particularidades que se expresan en sus funciones, formas de gobierno, actores, dinámica y estructura de relaciones, al contenido disciplinar altamente especializado, y a la profesión, como estructurantes de la enseñanza y del currículum. De todo esto habla el libro de Gladys Calvo.
Una mención especial merece el delicado trabajo metodológico desarrollado en la producción de la investigación y expresado en este libro. En él, la autora evidencia su carácter de discípula, en lo metodológico, de María Teresa Sirvent y vuelca con lucidez lo aprendido en el contexto de esa innovadora perspectiva sobre cómo investigar en las ciencias sociales hoy. El capítulo dedicado a este aspecto puede ser claramente orientador para jóvenes investigadores en Ciencias Sociales que podrán ver cómo abordajes y conceptos teóricos se despliegan en la elaboración del resto de la obra.
Los autores que consulta para la construcción del marco teórico son amplios en cuanto a sus enfoques y temáticas; a la vez, es significativo observar que en él conviven aquellos que marcan momentos clave iniciales en la breve historia de la Pedagogía y Didáctica Universitarias con otros incorporados más recientemente al campo.
A lo largo de la obra el eje de estudio ha sido la relación teoría y práctica en los espacios curriculares de formación en investigación en las carreras de grado universitarias. Así comienza la investigadora las Conclusiones del estudio realizado. Los hallazgos que en ellas se presentan son elocuentes de la situación actual de la enseñanza en la universidad pública, a la vez que brindan aperturas para comprender el problema en estudio: cómo se manifiesta esa articulación en los espacios curriculares de formación en investigación en la institución donde la autora se formó e investiga actualmente. La tensión siempre presente entre prácticas alternativas de enseñanza y las más tradicionales, entre las culturas institucionales de universidades y carreras con planes de estudio que contienen espacios sistemáticos para la formación en investigación y aquellas que sostienen el modelo artesanal, son algunos de los puntos fuertes que conforman el contexto de las conclusiones de esta obra. Reconozco como uno de los hallazgos más significativos el que evidencia que los grandes enfoques identificados por Gladys en las asignaturas orientadas explícitamente hacia la investigación, expresan propuestas didácticas distintas, donde la relación entre teoría y práctica también asume formas diversas. Los acertados cuadros presentados en ese capítulo dan cuenta de estas relaciones complejas y le permiten al lector anudar los distintos hilos problemáticos que el libro contiene.
A quienes sostenemos el lugar relevante de la universidad pública para la formación de sujetos cuestionadores y reflexivos de los problemas del contexto social y educativo de su tiempo; a los interesados por el campo de la Pedagogía y Didáctica Universitarias; a los que comprenden que la enseñanza y la investigación se articulan en la construcción de habilidades del pensamiento ligadas al análisis, la reflexión, la duda, la búsqueda de relaciones, la producción de nuevos caminos; este libro les dará el placer de encontrar algunas respuestas y muchos nuevos interrogantes para seguir pensando…
Introducción
Esta obra se desarrolla en base a una investigación que dio como resultado mi tesis doctoral1. La misma problematiza la realidad universitaria y específicamente aborda la articulación teoría y práctica en los espacios curriculares de formación en investigación en las carreras de grado de la Facultad de Filosofía y Letras (UBA). Este objeto resulta de relevancia social y científica ya que la universidad, como institución dentro de la sociedad, tiene como uno de sus ejes constitutivos, junto a la enseñanza, la extensión y la transferencia a la sociedad, la producción de conocimiento. Pensar en la producción de conocimiento que realiza la universidad es pensar en la tarea que cumplen los investigadores en esta institución. Esta tarea adopta características particulares según el lugar en el que se desarrolle (universidades, institutos, agencias) y el campo disciplinar en el que se efectúe.
El interés por la temática deviene del trabajo que realizo desde hace dos décadas en dos cátedras de la carrera de Ciencias de la Educación de la UBA2, la participación en el Programa de Investigación “Estudios sobre el Aula Universitaria” que se desarrolla en el IICE3 y las conclusiones de una investigación previa que abarcó un Diagnóstico de la situación curricular de la Facultad de Filosofía y Letras (UBA)4.
Esta investigación busca aportar conocimiento original (desde una perspectiva didáctica-curricular) en torno a cómo se forman inicialmente en investigación los alumnos en sus carreras de grado, ya que esta formación primera será la base sobre la cual se seguirán desarrollando y formando los futuros investigadores. Lograr una mayor calidad en su formación inicial y continua es central para nuestro país, dado que a través de ella se posibilita fortalecer las actividades que apunten al avance científico en cada área de conocimiento. Asimismo, este tipo de trabajos coloca a la propia universidad como objeto de estudio, situación que le permite a la institución reflexionar sobre sí misma, renovándose permanentemente, en la búsqueda de mayor calidad académica.
Se sostiene en este libro que el lugar que ocupan en los planes de estudio los espacios curriculares que tienen como propósito la formación en investigación inhibe en alto grado la posibilidad de articulación teoría y práctica, dificultando una íntegra inserción del estudiante en el quehacer investigativo durante las carreras de grado. La misma, se presenta como una formación esporádica, aislada y desarticulada a lo largo de la carrera. Esta limitación dificulta el desarrollo de uno de los perfiles profesionales para los cuales se forma en la universidad: ser investigador. Asimismo, existen ciertas características didácticas presentes en los espacios curriculares, como la organización y secuenciación de los contenidos seleccionados y las estrategias de enseñanza utilizadas, que facilitan la articulación teoría y práctica propiciando mayor significatividad a los procesos de enseñanza y aprendizaje.
En la situación de enseñanza y aprendizaje que se produce en el aula universitaria se pueden reconocer diversos componentes didácticos que desarrollan sus actores principales (docentes y estudiantes): objetivos que orientan ambos procesos, contenidos, estrategias metodológicas, tanto de enseñanza como de evaluación, y los recursos para el aprendizaje (Contreras Domingo, 1994). En la categorización que hace Wachowitz (1995), este conjunto de componentes son contenidos, formas y objetivos, ocupando éstos un lugar preeminente en la direccionalidad del conjunto. Así, los componentes de la situación didáctica estructuran de diversas maneras o estilos los procesos de enseñanza, permitiendo reconocer dos tipos básicos: la situación tradicional, correspondiente a una didáctica