La Noche Oscura Del Alma. Aldivan Teixeira Torres

La Noche Oscura Del Alma - Aldivan Teixeira Torres


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mitad de camino, las sombras de la triste historia comienzan a perturbarme y luego decido analizar fríamente el caso. Ryan fue el ejemplo más adecuado de que la gente rica corren serios riesgos en lo que se refiere a la salvación. Esto es debido a que la riqueza y el poder le traen comodidad y condición, pero también exige responsabilidad y desprendimiento de las causas sociales. Otro ejemplo de la biblia muestra la codicia de los ricos y las condiciones inhumanas del pobre Lázaro. Su final es el mismo al de la historia de Ryan y Ángel. Analizo los dos casos juntos y concluyo que la avaricia es una potente picazón del alma. Los personajes cambian, las situaciones son diferentes, pero para aquellos que se nutren de la codicia les sucede el mismo trágico final: La noche oscura condena otra víctima a perecer en la oscuridad externa. ¿Cómo cambiar esa gran realidad? La respuesta puede ser más fácil de lo que imaginamos. Es todo lo que hay que hacer con la siguiente ruta de evolución, un camino hacia el Padre. Requiere de negativas y decisiones difíciles que pocos están dispuestos a hacer.

      Creo que el mundo sería mucho mejor si se siguen los buenos ejemplos que la historia nos ha dado: Jesucristo, Francisco Assis, Martin Luther King, Teresa de Calcuta, La Hermana Dulce, y Francisco Xavier, entre otros. Ciertamente, la noche oscura no tendría más influencia sobre nosotros. Bueno, esto es sólo un sueño. La realidad es completamente diferente. En su mayoría, las personas muestran ser materialistas, egoístas y llenas de vanidades. Podría parecer pesimista, pero en mi opinión, el mundo continuará bajo el imperio de la noche oscura y para comprenderlo por completo voy a tener que llevar a cabo nuevos desafíos y llevar a cabo aventuras que desconfío. De las etapas, ya he logrado dos. Vamos a seguir adelante juntos, lector, en busca de conocimiento.

      Me acerco a la cabaña que he construido con tanto cuidado. Esperando por mí está la dama guardiana. Me acerco a su lado y ella empieza el diálogo:

       —Felicitaciones, veo que estás en una sola pieza. ¿Podría hablar de su experiencia de esta tarde? ¿Qué has aprendido?

       —Inicialmente decido empezar desde el sur, porque yo ya he pasado por el oeste y el norte. Caminé durante un largo tiempo, en esa dirección, hasta que fui capaz de encontrar alguna señal que me pudiera dirigir. Una vez dirigido, continué caminando intensamente y algún tiempo después me encontré cara a cara con la misma mujer del desafío anterior que me ayudó rápidamente a encontrar a mi destino, el abismo del arrepentimiento. Fui hacia adelante y llegué exactamente al punto que necesitaba, me puse en contacto con la revelación del segundo pecado capital: la avaricia. La historia a la que fui sometido me ayudó a entender la extensión de este pecado, el destino real de todas las que le siguen y finalmente tomé algunas conclusiones: La avaricia es la clave con la que la noche oscura del alma arrebata fieles. Se alberga en sí en el corazón humano y los sentidos, obstruyendo la evolución respectiva del individuo. Además, provoca males secundarios tales como la indiferencia, el egoísmo y la intolerancia. Esto expuesto, podemos concluir que los resultados son catastróficos y muchas veces conducen a la condena. Una alternativa para combatir este tipo de pecado sería el altruismo, que revitaliza el alma y abre los caminos de la evolución.

       —Muy bien. Después de lo que veo y he oído, llego a la conclusión de que estás más cerca de comprender el significado y la extensión de la noche oscura, puesto que son dos etapas que ya has superado.

       —¿Y ahora? ¿Cuál es el próximo paso?

       —La siguiente fase se llevará a cabo mañana y se ocupa de una de las mayores debilidades del ser humano: Lujuria. Éste será el último bajo mi supervisión, porque no soy capaz de ayudar más. En las siguientes etapas serás ayudado por un hindú, que ya ha vivido aquí en la montaña durante seis meses. Relax: Es un especialista en los últimos cuatro pecados cardinales.

      — ¿Eso significa que mi señora me va a abandonar? Por favor, no lo hagas. Acaso no recuerdas que hemos estado juntos en la búsqueda del conocimiento desde la última aventura.

       —No es una decisión personal. Ese no es el caso. Usted debería saber que yo no poseo todo el conocimiento que usted piensa que tengo. Incluso para mí, la noche oscura se convirtió en un tema complejo e indescifrable. Para que usted pueda avanzar es necesario nuevos valores y enseñanzas, que no he recibido ni la gran mayoría tampoco. Por esto y mucho más tenemos que separarnos en este momento, y cuando evoluciones más, quién sabe si no nos vamos a ver otra vez.

       —De todos modos, gracias por todo. Si no fuera por su consejo no habría progresado. De ahora en adelante, prometo hacer aún un mayor esfuerzo para levantar el velo de la noche oscura del alma. Todo dentro de lo posible, por supuesto.

       —No me des las gracias todavía, nos seguiremos encontrando otras veces en esta aventura. En la próxima oportunidad, te daré mis últimas recomendaciones.

       —Entiendo. Una última pregunta. ¿Su señoría cree que soy digno para que los conocimientos necesarios me sean revelados?

      Por lo poco que te conozco, si lo eres. Cuando se haya logrado la meta más importante, el conocimiento tan ardiente, que tendrá el poder de abrir su mente a las verdades ocultas durante siglos. Allí tendrá las respectivas respuestas.

      Y ahí voy a ser feliz trabajando en lo que me gusta y derrochando felicidad. Qué maravilloso. Espero que este momento no tome demasiado tiempo. ¿Alguna otra recomendación?

      No. Más nada por el momento. Ahora, tengo que irme, porque se hace tarde. ¡Buena suerte en el próximo desafío!

      Dicho esto, la dama guardiana desapareció. El haber quedado solo, me llena de ansiedades y preocupaciones. ¿Eso hará que continúe progresando en dicho peligroso camino? ¿Quién era exactamente este nuevo maestro, el hindú? Estas preguntas sin respuesta inmediata mordían mi corazón y yo estaba a punto de lograr un desafío más.

      El tiempo pasa rápidamente y empieza a amanecer. Su llegada trae nuevas e inquietantes preocupaciones a un soñador sin preparación. Me pregunto: ¿Podrían los pecados de la carne ser tan peligroso hasta el punto de afectar mi pureza? Pensando un poco más, decido continuar arriesgando, incluso si eso podría tener consecuencias graves para mí. Con la fuerza de esa nueva decisión, me levanto y voy al improvisado baño de la cabaña para tomar un baño. En el camino, trato de poner mi mente en paz para disfrutar de esos momentos de ocio. Entro, cierro la puerta, me desvisto y agarro el cubo de agua fría que me había preparado la noche anterior. Comienzo a bañarme y después de haber lanzado la primera cantidad de agua fría comienzo a reflexionar sobre el lugar sagrado donde estoy. Pienso un poco en la montaña y sobre su importancia en mi vida. Llego a la conclusión de que era realmente sagrado para su clima, su historia de la que yo era parte, desafíos, misterios ocultos e incluso la propia cueva. Continúo las conclusiones y llego a un denominador común: Nadie lo sabrá por completo, a menos que evolucione hasta la perfección. En ella, pude encontrar mis fuerzas opuestas y al convertirme en el vidente, era capaz de controlar esas fuerzas. Ahora, yo estaba buscando el conocimiento y la comprensión acerca de la noche oscura a través del cual todos pasamos. En ese camino que pude lograr dos etapas. Pero todavía había siete más, imprevistos, que no he tenido tiempo para pensar.

      Trato de concentrarme en el baño y olvidar, por un momento, las preocupaciones. La estrategia es buena, sigo con el ritual, me pongo jabón, echo más agua sobre el cuerpo y hago un esfuerzo para quitar todas las impurezas. Cuando me siento totalmente limpio, agarro una toalla, me seco y me pongo ropa limpia. Salgo del baño y voy a la cocina a preparar mi desayuno. Cuando llegue allí, comienzo a freír los huevos de gallina apetitosos que me dieron en el bosque. Me paso algún tiempo haciendo mi comida y cuando está lista, me la como enseguida. Aprovecho la oportunidad para sentarme por un rato, y cuando lo hago, Anhelo mi hogar, mi madre y mi buena vida. Todo lo que me ocurría era yo estaba acostumbrado a tener un buen desayuno y calor familiar. Otro momento pasa y negué con la cabeza: Todo esto sería mucho más fácil si hubiesen apoyado en mi carrera y mis sueños. Sin duda hubiese tenido una razón más para seguir luchando y afirmándome a mí mismo cada vez más como el vidente que fue transformado por la cueva. Pero me aparto de esos pensamientos, porque ellos sólo me lastiman ahora. Luego planeo mi estrategia


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