Anatomía y cinesiología de la danza. Karen Clippinger
se pueden usar fácilmente con formato de laboratorio en un marco académico. Los elementos especiales comprenden los siguientes:
· En Demostración de conceptos se seleccionan conceptos clave, que a menudo son difíciles de entender, y experiencias de movimiento que el lector puede aplicar para ayudar a su aprendizaje.
· Las Pruebas y mediciones ofrecen ejemplos de pruebas que se emplean para la evaluación de lesiones ligamentarias, o de la fuerza muscular y la flexibilidad. Aunque muchas de estas pruebas requieran una preparación especializada para practicarlas y no se espera que el lector sin preparación las realice, se han incluido porque ejemplifican con claridad la función o restricción que aporta una estructura dada.
· Las Órdenes en la danza reflexionan sobre la base anatómica potencial de algunos aspectos que se suelen usar al enseñar una técnica de danza.
· Las Tablas de inserciones musculares enumeran las inserciones proximales y distales, así como las acciones clave, de los principales músculos tratados en este libro. Este apartado especial aparece en los capítulos 3 a 7, próximo a la figura y a la descripción escrita del músculo dado para ayudar al lector a deducir la línea de tracción y sus acciones potenciales.
· Con las Preguntas de repaso y aplicaciones se intenta ayudar a asentar los conocimientos aparecidos en el capítulo, y a comprobar si se han entendido dichos conceptos clave.
Términología en la danza
En el texto, los movimientos de baile a menudo se describen utilizando terminología de ballet . Esto se explica porque dicha terminología está más estandarizada. Pero también se usan versiones simplificadas de la terminología sin referencia a la orientación del cuerpo, para que dicha información sea más accesible a los profesionales de la medicina y a los bailarines de otras disciplinas, que suelen usar los términos de ballet menos formalmente. Este uso común de términos de ballet no significa que la aplicación de esta información se limite a la técnica de ballet; los bailarines pueden aplicarla de forma paralela a movimientos similares en la disciplina de baile de su elección.
Cómo usar este libro para distintos objetivos
Aunque el empeño original de este libro fue crear un manual para cursos universitarios, también está destinado a otros bailarines, profesores de baile y profesionales sanitarios que brindan sus servicios a bailarines. Las ventajas potenciales para el profesor son el disponer de una imagen clara de los factores anatómicos y cinesiológicos que le ayudarán a comunicar mejor los requerimientos técnicos; orientar mejor a los estudiantes en la identificación de problemas potenciales técnicos, y contar con ejercicios que permitan a los estudiantes alcanzar el éxito técnico. Son ventajas potenciales para los bailarines el mayor conocimiento de los desafíos de la técnica, como los en dehors y la correcta alineación, y un entendimiento más claro de los puntos fuertes y débiles individuales, así como de la manera de mejorar dichas áreas débiles. Las ventajas potenciales para los profesionales sanitarios son un mayor conocimiento sobre cómo la prevención de lesiones y los tratamientos se relacionan con la técnica de baile.
Con el fin de cubrir las distintas necesidades de estos lectores potenciales, este libro está concebido para satisfacer distintos niveles e intereses. Por ejemplo, el estudiante para quien la anatomía sea nueva se puede centrar en las ilustraciones y las tablas de resumen sobre los músculos principales y sus funciones, usando sólo como referencia las secciones sobre ejercicios de potenciación y flexibilidad, y lesiones. Por el contrario, los lectores con más conocimientos se pueden centrar en detalles como las acciones secundarias de los músculos, las implicaciones de la mecánica articular en la técnica y las lesiones, y en la bibliografía para un estudio más profundo.
Análogamente, al encuestar a colegas que dan cursos de anatomía y cinesiología aplicadas a la danza en un marco académico, descubrí que los cursos se daban de formas muy distintas. Por ejemplo, algunos profesores confieren poca importancia o ninguna a las extremidades superiores, mientras que otros incluyen un estudio básico de esta área. Algunos profesores enseñan sobre todo anatomía, mientras que otros se centran más en las lesiones y la mecánica, al tiempo que otros dan preferencia a las claves y ejercicios correctivos. Por tanto, este libro se ha concebido con distintos enunciados en cada capítulo para que los profesores seleccionen las secciones que quieren tocar en sus cursos, dejando las otras secciones como lectura opcional suplementaria.
En resumen, abrigo la esperanza de que este libro se convierta en una valiosa fuente de consulta, que se use y se emplee a distintos niveles según los conocimientos y circunstancias. En el pasado, en cierta medida se enseñaba a bailar mediante la imitación de profesores y bailarines consumados, y las claves se basaban a menudo en la intuición y derivaban de las experiencias y suposiciones personales. Este libro pretende aportar más conocimientos científicos sobre la danza para que las suposiciones se puedan evaluar de modo que reflejen una mezcla ideal de ciencia y arte. También se ha diseñado para mostrar el valor de la perspectiva científica, de forma que los nuevos estudios y conocimientos hagan evolucionar la danza, y para que los lectores tengan un marco en el que aplicar esta información. Esta combinación de ciencia y arte puede hacer que la enseñanza sea más eficaz y permita a los bailarines desarrollar su potencial individual de modo que la perfección técnica limite menos su visión artística.
Agradecimientos
Me gustaría dar las gracias a los numerosos colegas cuya valiosa aportación se ha incorporado a este libro, especialmente a Katherine Daniels (Cornish College of the Arts), Scott E. Brown (Sinai Hospital de Baltimore y Universidad de Johns Hopkins), Terese Freedman (Mount Holyoke College) y Ralph Rozenek (California State University, Long Beach), por su revisión de este libro. Mi más honda gratitud a Skip Clippinger y Mario Zemann por las incontables horas que pasaron creando las ilustraciones para este libro, elemento esencial para enriquecer y aclarar los conceptos teóricos presentados en este manual. Gracias sinceras de corazón a Francia Russell (directora de la Pacific Northwest Ballet School), por su apoyo a mi trabajo, sobre todo durante los primeros años, y por el papel primordial que ella y el Pacific Northwest Ballet desempeñaron en la evolución de mi trabajo con bailarines.
Mi reconocimiento también por el talento de los fotógrafos que aportaron sus imágenes tan inspiradoras de bailarines en movimiento, así como a otras personas que contribuyeron con fotografías o me ayudaron a adquirir las fotografías de este libro. Mi gratitud particular a Francia Russell y a Lia Chiarelli por su ayuda para adquirir fotografías de los bailarines del Pacific Northwest Ballet, y a Angela Sterling (fotógrafa del Pacific Northwest Ballet) por suministrarme las fotografías del Pacific Northwest Ballet que aparecen en la portada, en la primera hoja de cada capítulo y en el interior de algunos capítulos. Quiero también manifestar mi gratitud a los fotógrafos Keith Ian Polokoff y Patrick Van Osta por utilizar sus fotografías en el montaje al comienzo del libro y en cada capítulo, así como por su contribución con otras fotografías en el interior de los capítulos. Expreso también mi aprecio al Lines Ballet de Alonzo King y Robert Rosenwasser, por su ayuda en la adquisición de fotografías.
También quiero dar las gracias a los bailarines que aparecen en las fotografías, especialmente a (1) el personal del Pacific Northwest Ballet; (2) Maurya Kerr (en la actualidad en el Lines Ballet de Alonzo King) y Jennifer Owen (en la actualidad en el BalletMet Columbus), por las fotografías que muestran los ejercicios y la técnica correcta, tomadas cuando eran estudiantes de la Pacific Northwest Ballet School, y a (3) Jennifer Fitzgerald (bailarina de CSULB), Merett Miller (bailarina del Sacramento Ballet) y Dwayne Worthington (bailarín de CSULB MFA), por servir de modelos en los ejercicios de fuerza, flexibilidad y técnica. También doy las gracias a Shawn Robertson por su ayuda en la edición y catalogación de mis fotografías.
Para concluir, doy las gracias a la California State University, Long Beach, y en particular a Judy Allen (directora del Departamento de Danza) y a Donald Para (Dean, College of the Arts), por su apoyo a este trabajo, así como a todas las personas de Human Kinetics que me ayudaron a que el