Del modo de investigación al modo de exposición: Metodología en tesis de ciencias sociales. Karina Ansolabehere
de la crisis provocada por el error de diciembre de 1994. El nivel se mantuvo elevado en 1996, año en que había empezado la recuperación que haría descender persistentemente la población en pobreza hasta el año 2000. A lo largo de las dos décadas que median entre 1992 y 2012, se desacoplaron los cambios en el pib y en la pobreza, sólo en los dos años posteriores a 2000. El análisis de la información muestra que a pesar de la reducción del pib, la pobreza, impulsada por una reducción significativa en los niveles de desigualdad, disminuyó (Cortés, 2005: 271-307) y siguió reduciéndose a partir de 1996 inducida por el crecimiento de la economía. Este ciclo finalizó en 2006; después de este año, la tendencia a la caída se revirtió y se inició una fase de crecimiento de la pobreza, sensiblemente visible en la medición de 2008. Así es como se ponen de manifiesto los efectos de la crisis originada en las hipotecas en Estados unidos y de los precios internacionales de los alimentos.
Una vez que se ha desarrollado la idea de que la incidencia y los cambios en los niveles de pobreza no sólo dependen del gasto social, sino también de la dinámica del ingreso y de la forma como se distribuye,[27] ya estamos en condiciones de incluir en el análisis el papel de las variaciones en los precios de los alimentos y de las transferencias provenientes del gobierno. Así se avanza un paso para hacer inteligibles los resultados de la investigación.
Los modos de la investigación y de la exposición
Las teorías y el conocimiento acumulado por las ciencias sociales han destacado el carácter multidimensional de las condicionantes de la pobreza. Sin embargo, las críticas sobre el papel del Estado en el combate del fenómeno se limitan únicamente al gasto y a los programas sociales. La reducción en la explicación originó el problema de investigación.
La identificación de los factores que impulsan los cambios en la desigualdad llevó a la conclusión de que los programas sociales sí han reducido la pobreza monetaria, particularmente a partir del siglo xxi. Ahora bien, lo anterior ¿cómo se explica?, ¿cómo se expone de manera convincente?
Con este fin y en primer lugar, fue necesario mostrar que la idea de la inefectividad del gasto realizado a través de los programas sociales tenía una justificación empírica: que el comportamiento en el tiempo del gasto social en general y del programa Oportunidades en particular, no se relacionan con la evolución de la pobreza monetaria. El gasto aumenta mientras que la pobreza ha tendido a seguir el ciclo económico. En segundo lugar, fue necesario explicar la relación entre el ingreso de los hogares y la pobreza manteniendo constante la desigualdad en su distribución y, de manera recíproca, entre la desigualdad en la distribución del ingreso y la pobreza manteniendo constante el ingreso de los hogares. Una vez que se explicaron dichas relaciones, se consideró el efecto conjunto del ingreso y de la desigualdad sobre la variación de la pobreza en el tiempo.
Con base en estas ideas, se introdujo la ecuación que descompone la variación en los componentes de ingreso y desigualdad entre dos años de la pobreza. La ecuación se enriquece por el efecto precio, ya que la medición de pobreza que se realiza en México así lo demanda, y por la separación de los efectos del ingreso neto de las transferencias sociales del que tienen los propios programas sociales, porque así lo requería la investigación.
Una vez completos los argumentos intermedios, fue posible hacer inteligibles los resultados obtenidos: i) por qué es común que se afirme que los programas sociales son inocuos para combatir la pobreza y que por lo tanto se clame por el rediseño de la política social, cuando el problema radica, tal como lo muestran los resultados de los análisis, en la política económica, y ii) visibilizar que, pese a las apariencias, el gasto social es efectivo: reduce la pobreza cada año y también su evolución a lo largo del tiempo.
Una vez que hemos presentado el ejemplo que ilustra la tensión entre los modos diferentes que son el de investigación y exposición, en los siguientes capítulos se exponen las formas particulares en que cada autor consideró para exponer sus resultados de la manera en la que lo hizo. Si hay o no relación entre el modo de investigación, el de exposición y la aproximación conceptual o la metodología empleada aún es pregunta abierta. Las soluciones que se presentan en este escrito sólo son ejemplos de vías posibles; ciertamente no son las únicas, lo que constituye una invitación a transformar este tema en un problema que debiera ser abordado sistemáticamente por la metodología de las ciencias sociales.
Referencias
Acemoglu, Daron y James Robinson (2012). Por qué fracasan los países: Los orígenes del poder, la prosperidad y la pobreza, España, Crítica.
Banco de México (2001). Informe Anual 2000, México.
Banco de México (2002). Informe Anual 2001, México.
Banco de México (2003). Informe Anual 2002, México.
Bourdieu, Pierre (2013a). “Al lector”, en La miseria del mundo, México, Fondo de Cultura Económica, pp. 7-8.
Bourdieu, Pierre (2013b). “Comprender”, en La miseria del mundo, México, Fondo de Cultura Económica, pp. 527-543.
Bourdieu, Pierre, Jean-Claude Passeron y Jean-Claude Chamboredon (1999). El oficio de sociólogo. Presupuestos epistemológicos, México, Siglo xxi Editores.
Campa, Ricardo (2014). “Noticia para el lector”, en El capital. Crítica de la economía política, México, Fondo de Cultura Económica, pp. vii-ix.
Comité Técnico para la Medición de la Pobreza (2005). “Recomendaciones metodológicas para la evaluación intertemporal de niveles de pobreza en México (2000-2002)”, en Miguel Székely (coord.), Números que mueven al mundo: la medición de la pobreza en México, México, Sedesol/cide/Anuies/Miguel Ángel Porrúa.
Coneval (2012). Informe de Evaluación de la Política de Desarrollo Social 2012, México.
Correa Merlassino, Victoria (2013). Analysis of Three Different Spanish Translations of Karl Marx’s Das Kapital (1867): Juan B. Justo (1898), Wenceslao Roces (1946), Pedro Scaron (1975), España, Universitat de Barcelona, 24 pp. Disponible en <http://eet.pixel-online.org/files/research_papers/SP/Analysis%20of%20Three%20Different%20Spanish%20Translations%20of%20Karl%20Marx_S%20Das%20Kapital.pdf>.
Cortés, Fernando (2005). “¿Disminuyó la pobreza? México 2000-2002”, en Miguel Székely (coord.), Números que mueven al mundo: la medición de la pobreza en México, México, Sedesol/cide/Anuies/Miguel Ángel Porrúa.
Cortés, Fernando (2013). “Medio siglo de desigualdad en el ingreso en México”, Economía, vol. 10, pp. 136.
Cortés, Fernando y Rosa María Rubalcava (1982). Técnicas estadísticas para el estudio de la desigualdad social, México, El Colegio de México.
Cortés, Fernando y Rosa María Rubalcava (2012). “El Progresa como respuesta a la crisis de 1994”, en Mercedes González de la Rocha y Agustín Escobar Latapí (coords.), Pobreza, transferencias condicionadas y sociedad, México, Publicaciones de la Casa Chata, ciesas.
Cortés, Fernando, Israel Banegas y Patricio Solís (2007). “Pobres con Oportunidades: México 2002-2005”, Estudios Sociológicos, vol. XXV, núm. 73, enero-abril, pp. 3-40.
Cortés, F., D. Hernández, E. Hernández-Laos, M. Székely y H. Vera (2002). Evolución y características de la pobreza en México en la última década del siglo xx, Serie Documentos de Investigación núm. 2 de sedesol.
Datt Gaurav y Martin Ravallion (1992). “Growth and Redistribution Components in Poverty Measures: A Decomposition with applications to Brasil and India in the 1980’s”, Journal of Developments Economics, núm. 38, pp. 275-295.
Editorial Cenit (1935a). “Nota sobre esta edición”, en El capital.