Marketing cultural. SSCB0110. Estibaliz López Mariñelarena
su respuesta.
A continuación, se muestra la tipología elaborada por Manuel Cuadrado (2000) sobre bienes y servicios culturales.
ORGANIZACIÓN CULTURAL | ACTIVIDADES CULTURALES | NATURALEZA | GRADO DE REPRODUCCIÓN | SECTOR |
Museo | Pintura Escultura Fotografía Arquitectura | Artes plásticas | Servicios culturales | Sector de las artes |
Entidad escénica | Teatro Danza Ópera Música | Artes escénicas | ||
Industria cinematográfica | Cine Vídeos | Artes audiovisuales | Bienes culturales | Industria cultural |
Industria fonográfica | Discos | |||
Comunicación | Radio Televisión | |||
Industria del libro | Libros | Artes gráficas | ||
Otras | Diseño Artesanía | Artes aplicadas |
¿Qué motiva el consumo cultural?
Cada uno de estos productos es consumido de diferentes modos o por diferentes motivos por parte del usuario final. Entre los desencadenantes que inciden en las pautas de consumo de los productos culturales, Manuel Cuadrado y Gloria Berenguer (2002) señalan las siguientes variables:
1 Actitud favorable hacia la cultura.
2 Asistencia reciente a acontecimientos culturales.
3 Aspecto virtuoso de las actividades artísticas.
4 Atributos de la obra (calidad, categoría del artista).
5 Atributos del visitante (educación, edad, tiempo).
6 Descentralización de las oportunidades culturales.
7 Distancia entre residencia y entidad cultural.
8 Influencia de los líderes de opinión.
9 Interés pasado o presente por las actividades artísticas.
10 Movilidad geográfica.
11 Movilidad social.
12 Notoriedad de la entidad cultural.
13 Pertenencia a un club de socios.
Pero también pueden darse una serie de condiciones que retraigan el consumo: la falta de recursos económicos, el elitismo, la percepción de que el producto cultural va dirigido a un sector o grupo determinado, etc.
Por otra parte, cuando un usuario consume un producto cultural busca una serie de beneficios: enriquecimiento personal, formación, placer, prestigio o categoría social, apreciación y disfrute de la obra, nuevas experiencias, etc.
Tipología de usuarios culturales
Habitualmente, se usa una tipificación de usuarios o consumidores culturales basada en la frecuencia del consumo cultural, estableciéndose las siguientes categorías:
1 Esporádicos: menos de una vez al año.
2 Infrecuentes: una vez al año.
3 Frecuentes: 2 a 3 veces al año.
4 Habituales: 4 o 5 veces al año.
5 Intensos: más de 6 al año.
Saber cuántas veces acude un usuario a una organización cultural o a disfrutar de una actividad artística permite valorar el grado de vinculación y fidelización hacia la entidad o hacia la expresión artística.
Importante
Uno de los criterios de clasificación de los consumidores culturales es la frecuencia del consumo.
¿Cuáles son los productos culturales más demandados?
En cuanto a los productos culturales más demandados, la Encuesta de hábitos y prácticas culturales en España (2010-2011) señala que las actividades culturales más frecuentes son escuchar música, leer e ir al cine, con tasas del 84,4 %, el 58,7 %, y el 49,1 % respectivamente.
A estas actividades les siguen visitar museos o exposiciones (39,5 % de la población) e ir a conciertos de música actual (el 25,9 %).
En posiciones intermedias se encuentra la asistencia a bibliotecas (con un 20,5 %), al teatro (un 19 %), a yacimientos arqueológicos (el 13,9 %) a galerías de arte (el 13,6 %) y a conciertos de música clásica (el 7,7 %).
Entre las actividades realizadas con menor frecuencia se encuentran la asistencia a espectáculos de ballet o danza (6,1 %), opera (2,6 %) o zarzuela (1,6 %).
Por lo que se refiere a las prácticas culturales activas, las más frecuentes son la fotografía (29,1 %), la pintura o el dibujo (13,2%), la afición por escribir (7,1 %) y las vinculadas a las artes musicales (un 8 % toca algún instrumento y el 2,4 % canta en un coro). El 2,1 % hace teatro y el 3,9 % ballet o danza.
Variables que influyen en las pautas de consumo
Estos resultados varían significativamente en función del género, la edad y el nivel de estudios. Las mujeres muestran mayor afición por la lectura y la escritura, a excepción de la lectura profesional, la lectura en formato digital y la prensa, hábitos más extendidos entre los varones. Las mujeres frecuentan más las bibliotecas, mientras que los varones presentan mayores tasas de acceso por Internet a las mismas.
Con lo que respecta a la edad, los jóvenes presentan las tasas de participación cultural más altas prácticamente en todas las actividades culturales: visitas a museos, espectáculos escénicos, lectura, etc.
La participación va decreciendo al aumentar, la edad con la excepción de hábitos como la lectura no profesional y la prensa, escuchar la radio o la asistencia a conciertos de música clásica.
Sin duda, una variable determinante es el nivel de estudios: a mayor nivel de estudios, asciende el nivel de participación cultural.
Importante
Factores como la edad, el género, la clase social, el nivel educativo o el tamaño del municipio en el que se vive afectan a los patrones de consumo cultural.
Esta afirmación, que relaciona nivel de estudios con la participación cultural, se ve reforzada por los datos del INE (Instituto Nacional de Estadística) según los cuales las variables que más influyen en el consumo de cultura son: el nivel educativo, el nivel de renta y el tamaño del municipio. A mayor índice de estas variables, aumenta el consumo de actividades culturales.
Actividades
7. ¿Considera que el mayor consumo cultural en municipios de mayor tamaño puede estar más relacionado con la oferta y las oportunidades de consumo cultural que con el número poblacional? Justifique su respuesta.
3.3. Identificación de las preferencias de los consumidores culturales
¿Qué está pasando en el mercado del arte y la cultura? La investigación de mercados, a través de las diferentes técnicas cuantitativas y cualitativas expuestas en el apartado 2.2, posibilita