Animación social de personas dependientes en instituciones. SSCS0208. Virginia Moreno García
que sufren depresión suelen tener limitadas relaciones sociales, lo que puede disminuir el estado de ánimo, y esto repercute, a su vez, en la eventual disminución de las relaciones sociales, hasta llegar así a un momento en el que pueden no mantener ninguna. No es raro que las personas deprimidas presenten deficiencias en las conversaciones, ya que hablan menos y son menos amigables. Adicionalmente, no contar con habilidades para resolver sus problemas puede ser, a su vez, un factor de vulnerabilidad que incrementa el riesgo de depresión.
Sabía que...
En mayor o menor medida, muchos de los problemas de las personas están mediatizados por sus relaciones con los demás.
Los programas de entrenamiento en este área se enfocan hacia el aprendizaje de dos tipos de habilidades:
Habilidades de conversación.
Habilidades de comunicación.
El establecimiento de ambos tipos de recursos sociales en el repertorio con-ductual del sujeto le permitirá, en primer lugar, el establecimiento y mantenimiento de contactos y redes sociales estables, en segundo lugar, el interactuar y relacionarse adecuadamente, tanto con familiares como con residentes del centro.
De este modo, el anciano se capacita para buscar y obtener de forma más eficaz los beneficios que se derivan de una red de apoyos sociales competentes: compañía social, guía y consejo cognitivo, apoyo emocional, ayuda y servicios materiales y regulación social.
6. Técnicas para favorecer la relación social
Como se ha visto, las personas dependientes que están institucionalizadas pueden presentar dificultades para interactuar socialmente de forma habilidosa.
Para ayudarlas a establecer una comunicación efectiva, contamos con cuatro habilidades básicas fundamentales, que son:
Empatia
Asertividad
Escucha activa
Retroalimentación
Sabía que...
Las habilidades sociales no garantizan el éxito de las relaciones, pero si la maduración personal y el crecimiento personal.
6.1. Empatia
La empatía es la capacidad de recibir y comprender las vivencias de otras personas, especialmente los estados de ánimo. Es decir, una persona empática es aquella capaz de ponerse en el lugar del otro.
Formas de expresar la empatía
Prestar atención a lo que la otra persona nos está contando, mostrando así nuestro interés.
No interrumpir al emisor mientras habla.
Antes de dar nuestra opinión sobre el tema, debemos esperar a tener información suficiente y asegurarnos de que hemos escuchado e interpretado correctamente lo esencial de su mensaje.
En el momento de dar nuestra opinión, es muy importante hacerlo de forma constructiva, ser sinceros y procurar no herir con nuestros comentarios.
Hay que ser respetuoso con los sentimientos y pensamientos de la otra persona.
Es aconsejable tener una buena predisposición para aceptar las diferencias que tenemos con los demás, ser tolerantes y tener paciencia con los que nos rodean y con nosotros mismos.
Recuerde
La empatia es la capacidad de recibir y comprender las vivencias de otras personas, especialmente los estados de ánimo.
Consejos para practicar la empatía
Escuchar atentamente.
Mostrar interés por el mensaje.
Tratar de captar correctamente lo que nos quieren decir.
Ser tolerante y respetuoso.
No emitir juicios negativos.
Reconocer y recompensar los logros de los demás.
Obstáculos de la empatía
Escuchar con prejuicios, dejando que nuestras ideas y creencias influyan a la hora de interpretar el mensaje del interlocutor.
Quitarle importancia a lo que nos cuenta el otro, respondiendo con un simple: "Ánimo, no te preocupes".
Juzgar a la persona.
Sentir compasión.
Dar la razón, siguiéndole la corriente.
Sabía que...
Aunque es en la infancia donde aprendemos en mayor medida a relacionarnos con los demás, es un proceso continuo durante toda la vida.
6.2. Escucha activa
La escucha activa es la habilidad para captar adecuadamente y en su totalidad el mensaje de la otra persona. "No es lo mismo oír que escuchar".
Por medio de esta habilidad, nos hacemos conscientes de lo que la otra persona está diciendo y de lo que está intentando comunicarnos. A través de ella "damos información" a nuestro interlocutor de que estamos recibiendo lo que nos dice.
Recuerde
La escucha activa es la habilidad para captar adecuadamente y en su totalidad el mensaje de la otra persona.
¿Cómo mejorar la escucha activa?
Mostrar empatía: escuchar activamente las emociones de los demás y entender sus motivos, hacerles saber que somos capaces de ponernos en su lugar. Sin embargo, no significa aceptar ni estar de acuerdo con la posición del otro. Para demostrar esa actitud, usaremos frases como: "entiendo lo que sientes", "noto que...".
Parafrasear: consiste en decir con las propias palabras lo que parece que el emisor acaba de decir. Es muy importante en el proceso de escucha, ya que ayuda a comprender lo que el otro está diciendo y permite verificar si realmente se está entendiendo lo que se dice. Un ejemplo de parafrasear puede ser: "Entonces, según veo, lo que pasaba era que...", "¿Quieres decir que te sentiste...?".
Dar refuerzo: consiste en emitir palabras de refuerzo, tales como: "Bien", "Umm", "Ajá", etc.
Resumir: mediante esta habilidad informamos a la otra persona de nuestro grado de comprensión o de la necesidad de mayor aclaración.Expresiones de resumen serían: "Si no te he entendido mal...", "A ver si te he entendido bien...."Expresiones de aclaración serían: "¿Es correcto?", "¿Estoy en lo cierto?"