Crimen dormido. Vanessa Torres Ortiz

Crimen dormido - Vanessa Torres Ortiz


Скачать книгу
ion id="uf4bc8f2a-7b14-592a-b623-81ef1905bfcb">

      

      CRIMEN DORMIDO

      VANESSA TORRES ORTIZ

      CRIMEN DORMIDO

      EXLIBRIC

      ANTEQUERA 2019

      CRIMEN DORMIDO

      © Vanessa Torres Ortiz

      Diseño de portada: Dpto. de Diseño Gráfico Exlibric

      Iª edición

      © ExLibric, 2019.

      Editado por: ExLibric

      c/ Cueva de Viera, 2, Local 3

      Centro Negocios CADI

      29200 Antequera (Málaga)

      Teléfono: 952 70 60 04

      Fax: 952 84 55 03

      Correo electrónico: [email protected]

      Internet: www.exlibric.com

      Reservados todos los derechos de publicación en cualquier idioma.

      Según el Código Penal vigente ninguna parte de este o

      cualquier otro libro puede ser reproducida, grabada en alguno

      de los sistemas de almacenamiento existentes o transmitida

      por cualquier procedimiento, ya sea electrónico, mecánico,

      reprográfico, magnético o cualquier otro, sin autorización

      previa y por escrito de EXLIBRIC;

      su contenido está protegido por la Ley vigente que establece

      penas de prisión y/o multas a quienes intencionadamente

      reprodujeren o plagiaren, en todo o en parte, una obra literaria,

      artística o científica.

      ISBN: 978-84-17845-74-2

      Nota de la editorial: ExLibric pertenece a Innovación y Cualificación S. L.

      VANESSA TORRES ORTIZ

      CRIMEN DORMIDO

      Índice de contenido

       Portada

       Título

       Copyright

       Índice

       Capítulo 1 UN PAR DE SOBRESALTOS

       Capítulo 2 EMPIEZA EL JUEGO

       Capítulo 3 DESCUBRIENDO UN PASADO

       Capítulo 4 INVESTIGACIÓN PAUSADA

       Capítulo 5 LOCURA INMINENTE

       Capítulo 6 EN BUSCA DE LA VERDAD

       Capítulo 7 VIDA NUEVA, VIDA INTENSA

       Capítulo 8 REMOVIENDO LA TIERRA

       Capítulo 9 RECORDANDO LO OLVIDADO

       Capítulo 10 ¿FINAL INESPERADO?

      Hay personas que se van de nuestro día a día, pero jamás desaparecen de nuestra mente y nuestro corazón.

      Eso mismo me pasa a mí contigo: deseo que de alguna manera puedas conocer lo feliz que me encuentro con mi trabajo, feliz porque gracias a ti he podido realizar mi sueño. Tú fuiste quien me enseñó a ser constante y a luchar por lo que uno quiere.

      Siempre por ti, papá.

      VANESSA TORRES ORTIZ

      Capítulo 1

       UN PAR DE SOBRESALTOS

       Cintia no pudo dormir en casi toda la noche: sus vecinos continuaban, como de costumbre, poniéndose a discutir precisamente a la misma hora en que ella se disponía a descansar. Naturalmente, dichas discusiones iban acompañadas siempre de gritos y fuertes ruidos que aparentemente parecían golpes. No comprendía que ese matrimonio continuara unido cuando se llevaban tan mal; ella era testigo. Él era un hombre de buena familia, al igual que su esposa Mónica. Ambos ejercían su profesión en el hospital de la ciudad donde residían y eran queridos por todos sus pacientes.

      Llevaba ya unos años en los que su única compañía por las noches eran esas discusiones. Se sentía cansada no solo por no poder dormir bien, sino de dicha situación. Ella no les tenía un gran afecto: solo habían coincidido en alguna fiesta de vecinos que el matrimonio solía realizar en su jardín todos los veranos junto a su gran piscina; eso sí era algo que Cintia admiraba e incluso envidiaba de ellos. Siempre había deseado tener una propia, pero los antiguos propietarios de su casa, que habían sido sus propios padres, nunca quisieron hablar del tema y, la verdad, tampoco disponía de mucho terreno para ello.

      Se giró hacia el otro lado de la cama y, exhalando un profundo suspiro, agarró la almohada. En ese instante, escuchó un aterrador grito que la hizo estremecerse. «¿Qué es eso?», se preguntaba. En esta ocasión, la discusión parecía estar llegando a otro punto. Se quedó parada escuchando con los ojos abiertos de par en par; aunque pareciese extraño, sentía la necesidad de continuar escuchándolos, pero no volvió a oír nada más: solo silencio. Entonces, consiguió quedarse dormida al fin.

      ¡Riiing, riiing! Su teléfono móvil sonó con tal ímpetu que retumbó toda la habitación e hizo que despertara de un sobresalto.

      —¿Diga? —contestó con las manos aún temblando a causa del susto—. ¡Oh, Dios mío! ¿Qué hora es?

      —¿Dónde estás? —Se podía escuchar una voz masculina desde el otro lado de la línea telefónica—. Estamos esperándote: la reunión está a punto de comenzar. ¿Estás enferma?

      —No, no —dijo al mismo tiempo que se incorporaba de la cama y agarraba unos vaqueros que tenía descansando en una silla del día anterior—. ¡Me he quedado dormida! ¡Voy para allá!

      Colgó rápidamente y continuó vistiéndose. Además de los vaqueros, optó por ponerse una camiseta blanca de manga corta y unas zapatillas deportivas. Era evidente que ya no tenía tiempo para nada más, ni tan siquiera para desayunar ni ir al baño, así que se recogió su larga melena en una coleta de caballo y salió de casa como alma que lleva el diablo.

      Subiendo a su coche, que se encontraba aparcado justo en la puerta de su casa, rezaba para que en esta ocasión no le fallase y arrancara a la primera; introdujo la llave e… ¡increíble! Casi grita de alegría al comprobarlo. Cogió el camino hacia la redacción donde trabajaba; ese era uno de esos días que llevaba aguardando impacientemente. Rosa, una muchacha que, por motivos


Скачать книгу