Arqueros, arcos y flechas. Leonardo Killian
los seres humanos han buscado explicar hechos que generan asombro y tratan de dar respuesta a grandes preguntas formuladas en todos los tiempos. Esas inquietudes de las comunidades primitivas se relacionan tanto con la salida del sol, el ciclo de la siembra y la cosecha, el nacimiento y la muerte; como con la necesidad de adorar a seres sobrenaturales o de rebelarse frente a ellos, la elección del bien colectivo o individual y el eternamente buscado deseo de inmortalidad.
Para nuestras sociedades industriales y alfabetizadas, las respuestas suelen buscarse en la ciencia y en la técnica y para el hombre contemporáneo se trata de relatos fantásticos. De hecho, mito significa mentira o engaño. Para las comunidades primitivas, las de la prehistoria y antigüedad el mito designaba, por el contrario, una «historia verdadera», y lo que es más, una historia de inapreciable valor, porque era sagrada, ejemplar y significativa.
Tipos de mitos
Para estudiar los mitos, los investigadores han agrupado, según los temas que tratan, en los siguientes tipos:
Mitos teogónicos: aquellos que relatan el origen y la historia de los dioses.
Mitos cosmogónicos: relatos que intentan explicar la creación del mundo.
Mitos etiológicos: tratan de revelar cómo se originaron los seres y las cosas. Muchos de estos mitos explican el origen a partir de la metamorfosis de un personaje.
Mitos escatológicos: arriesgan una explicación sobre el futuro del mundo y el destino de las almas.
Mitos morales: muestran la lucha entre el bien y el mal que se libra en el hombre, y las consecuencias de excederse en ciertas tendencias o actitudes
Leyendas
Las leyendas son narraciones tradicionales que explican hechos y fenómenos de la naturaleza y la vida de los pueblos. Pero, a diferencia de los mitos, suelen referirse a hechos y personajes históricos y a lugares concretos que existen o han existido en otro tiempo.
Leyendas | Mitos |
Los hechos suceden en un tiempo legendario y en una zona geográfica. | Los hechos suceden en un tiempo remoto e indeterminado, incluso antes de la aparición del hombre sobre la Tierra. |
Los personajes principales son seres humanos. | Los personajes principales son dioses, héroes, titanes y semidioses. |
Explican el origen de animales, plantas, accidentes geográficos, lugares, etc. | Explican el origen del mundo, de los seres y de las leyes que rigen la naturaleza. |
No tienen carácter sagrado. Es decir, no forman parte de la religión del pueblo en el que surgieron. | Tienen carácter sagrado (forman parte de la religión de algunos pueblos). |
Cuento tradicional
El origen del cuento popular es desconocido, ya que se remonta hasta las primeras manifestaciones culturales de los hombres. Por ser un relato de transmisión oral que pasa de generación en generación, su procedencia se pierde en el tiempo.
Cuándo y dónde se originó el cuento tradicional es en la actualidad un dato tan desconocido como el mismo objeto de estudio. Para tratar de responder estos interrogantes, se propusieron varias hipótesis acerca del nacimiento de los cuentos, sin embargo, el lugar y el momento de creación de la mayoría de ellos siguen siendo sólo conjeturas.
Teorías sobre el origen:
Entre las teorías acerca de la procedencia del cuento tradicional, se destacan tres:
1. la teoría monogenista (del griego mono: “uno”; gen: “especie”), propuesta por el escritor y filólogo alemán Wilhem Grimm (1786- 1859), postula que los relatos son herencia de un pasado común indoeuropeo y que provienen de mitos.
2. la teoría poligenista (del griego poli: “muchos”) plantea que los cuentos se originaron en una época primitiva, salvaje, en varias regiones, ya que distintos pueblos, en estado cultural semejante, crearon similares narraciones.
3. la teoría de Vladimir Propp (1895-1970) sostiene que las fuentes del relato maravilloso están en la realidad histórica. Para este investigador ruso, una determinada política económica condiciona los modelos culturales de una sociedad que crea, en consecuencia, cierto tipo de cuentos y no otros. En ellos pueden verse, precisamente, huellas de formas de la vida social y cultural. Entonces, los cuentos surgirían cuando los ritos y las costumbres de las sociedades se vuelven superfluas y dejan de tener su sentido original.
Sin embrago, el carácter del cuento no se agota en las representaciones ficcionales basadas en lo real, sino que también recrea imágenes y situaciones que no se remontan a ninguna realidad inmediata (por ejemplo, la aparición de un caballo alado). Es decir, que estos relatos también son producto de una mentalidad primitiva, que no conoce las abstracciones y confunde la fantasía con la realidad.
Características del cuento tradicional
El cuento tradicional es una creación literaria relativamente breve, de carácter narrativo y autor anónimo, que refiere acontecimientos ficticios. Por pertenecer a la tradición oral, el cuento tradicional perdura a través de variantes. Es decir, cada vez que se relata un cuento, en forma oral o escrita, se produce una versión de él, diferente de otra anterior. La estudiosa Susana Chertudi plantea que cada variante es “una secuencia de elementos comunes a una serie de versiones, las cuales se parecen más entre sí que a las de las otras series”. Una variante puede ser, entonces, el cambio de un elemento (un animal, un paisaje, etc) por otro sin que modifique el tema o el sentido del texto. La necesidad de conservación del tema –aunque quizá en algunos casos con ligeras variaciones– responde a la misma finalidad del cuento que, si bien es proporcionar diversión y placer, también tiene una función didáctica: enseñar las reglas de conducta al pueblo, es decir, adoctrinarlo.
El cuento tradicional y el cuento folklórico
El concepto de “literatura tradicional” es bastante amplio, ya que incluye:
1. toda narración heredada del pasado, ya sea en forma escrita u oral. Así, por ejemplo, esta definición incluiría las obras de tradición escrita como las fábulas del escritor griego Esopo (siglo IV a.C.) o Las mil y una noches, de autor anónimo.
2. toda clase de cuentos orales tradicionales de todo el mundo. Las formas narrativas tradicionales más conocidas son los cuentos, los mitos y las leyendas.
3. los cuentos maravillosos, como los recogidos por los hermanos Grimm llamados popularmente “cuentos de hadas”.
Entonces, el estudio del cuento folklórico de raíces tradicionales abarca, no sólo las narraciones escritas, sino también todas las formas de la narración transmitidas oralmente. Estas creaciones, al ser heredadas por el pueblo y por ser transmitidas de generación en generación se vuelven tradicionales. Asimismo, un relato no popular, es decir, un cuento que presenta situaciones que no se remontan a ninguna realidad inmediata, también puede ser adoptado por el pueblo como tradicional. En esos casos, algunos estudiosos del cuento tradicional, como Stith Thompson o Vladimir Propp, los llaman también “folklóricos”, e incluyen en esos cuentos maravillosos o mágicos, cuentos de animales, adivinanzas, chistes y aun cuentos de fórmula (como el “cuento de la buena pipa”).
Nuestro trabajo tiene como actores principales a los arqueros, arcos y flechas. Los arcos y las flechas acompañan al hombre desde hace miles de años tanto en la caza, en la guerra o en el deporte y no podían estar ausentes en sus mitos, cuentos y leyendas.
La fábula es una creación literaria generalmente breve protagonizada por animales, objetos animados o personas, que a efectos del relato poseen capacidades comunicativas similares.
Su cometido es fundamentalmente pedagógico: ilustrar mediante situaciones imaginarias las costumbres, vicios o virtudes de un pueblo, una nación o un grupo humano determinado
Dicha enseñanza se encuentra por lo general resumida, al final del relato, en una moraleja o enseñanza.
Arco y flecha: simbolismo
Al arco y la flecha se le adjudican significados simbólicos según la cultura a la que hagamos referencia.
En las cavernas habitadas por nuestros