Cazador de narcos II. Derzu Kazak
una entrada, nada les impide abrir dos.
– ¡Nosotros estamos destinados a perder!
Los altos funcionarios que escuchaban al Comandante Parker, masticaban estas ideas. Era la pura verdad. Jugaban del lado de los perdedores, sencillamente porque no tenían una legislación adecuada… o porque dentro del verdadero poder mundial convenía que esto funcione así…
Weeb Sullivan, jefe máximo de la DEA, prometió a Parker estudiar esas sencillas normas de supervivencia. No estaba mal, –pensaba sin hablar– si alguien se enriquecía rápidamente, era justo que también lo perdiera rápidamente y a un nivel que no le permitiera continuar con sus influencias. Quizás una ley que deje en la ruina económica al delincuente de cualquier delito sea más efectiva que las cárceles. ¡Al fin y al cabo todos los delitos son realizados para ganar dinero!
Capítulo 8
Washington DC
Media hora de conversaciones informales con una taza de café de por medio, distendió las tensiones acumuladas durante el razonamiento del Comandante de la DEA.
La conferencia reanudó cuando Parker abrió su portafolios sobre el escritorio de caoba, y extrajo una carpeta con un sello cruzado en la tapa de color rojo, “Confidential – Top Secret”, y pasó a tratar el delicado tema de Frank.
– Lo que he propuesto anteriormente con referencia a las reformas de la legislación, necesitará su tiempo. En este momento debemos cumplir con nuestro deber en las condiciones existentes. Les propongo analizar un plan, que he desliado cuidadosamente, como si fuese una momia del antiguo Egipto, a raíz de conocer que Frank está escondido dentro de los Estados Unidos.
– La situación actual es muy confusa, pero no deja de ser interesante. Contra más compleja, se presta mejor para desarrollar planes más sofisticados y de efectos más destructores para el narcotráfico.
– Frank está vivo... y cree que nosotros no lo sabemos. Es una gran ventaja. Pidió ayuda al Cartel de Medellín para salir del País... es señal de que huele el peligro que representa aguantar escondido en los Estados Unidos y también, de que sus huestes no son ahora efectivas. Si escapa, difícilmente volverá, pues siempre tendrá un pedido de captura pendiente. Si lo encarcelamos, debemos esperar con toda seguridad que otro tome su puesto.
– Hemos arrestado a personas muy poderosas, que mantienen CEOS sin escrúpulos para aumentar sus ganancias aunque ellos estén presos.
– Otro tema candente: Está ingresando una cantidad indeterminada, pero muy importante, de heroína asiática, y la mafia china ocupa día a día los territorios de la mafia americana. Por las buenas… o por las malas.
– ¡Y entre las dos no sé con cual quedarme!
– Si empezamos a combatir a los chinos, será la lucha desigual de siempre. Su poderío económico se renueva día a día, y nuestro presupuesto y el número de agentes dispuestos a poner la cabeza en la boca del tigre es bastante reducido. En definitiva, será tiempo perdido.
– Kevin Beck entabló amistad con el jefe narco de Medellín, Pedro Bucci, no estoy seguro si realmente lo aprecia, o lo marea con atenciones para usarlo. Es un punto que me preocupa y debo clarificar para no exponerlo a que lo maten.
– Ahora, el escenario para diseñar las estrategias es el siguiente: el capo de Medellín encargó a Kevin Beck el rescate de Frank. Aquí hay tres posibilidades, pudiera ser para probarlo, o tal vez por considerarlo idóneo. Incluso, también existe una tercera posibilidad, de que nuestro agente haya cambiado de bando y ahora sea un infiltrado en la DEA.
– Esta dualidad de posibilidades siempre me preocupa, así que debo tener ambas presentes en todos los análisis. Ya demostró su capacidad para moverse en el bajo mundo y el Capo de Medellín sabe elegir a sus hombres. Ahora, Kevin nos pide decidamos si aceptamos o no la “fuga” de Frank de los Estados Unidos a Colombia.
El silencio y la atención de los presentes eran absolutos. El puesto de alguno de ellos dependía de la decisión adoptada y sobre todo, del desenlace de esa locura...
– Mi análisis es el siguiente:
– ¿Qué les parece a ustedes, si la DEA, en lugar de combatir a los carteles Colombianos, a la mafia norteamericana, y a la mafia del Sudeste Asiático, se dedicara a planear y dirigir “una guerra” entre los tres?
– Tenemos básicamente dos bandos: Los americanos y los asiáticos. Yo los llamaría en código los Leones y los Tigres. Esos frentes del conflicto, por origen y por intereses superpuestos son enemigos naturales. Sería una lucha equilibrada, pues los dos grupos tienen suficiente dinero y mercenarios, buscan obtener los mismos mercados y los mismos clientes... Y tiene las mismas leyes: pueden liquidarse sin trámites burocráticos.
– Se podría decir, que la DEA se arrogaría un papel afín al que asumen los fabricantes de armas, cuando interfieren psicológicamente en las relaciones entre dos naciones hasta que se desconocen como perros y comienza la guerra. A río revuelto, ganancia de pescadores…
– Iniciar una guerra es más factible que detenerla, solo hace falta el primer disparo de un bando para que el otro responda con dos… El detonante de la dinamita.
– Tendríamos un costo mínimo, y quizás lo autofinanciemos como sucedió con la Operación Anaconda. No perderíamos nuestros agentes... ¡Y cazamos tres buitres sin un sólo tiro!
El Comandante general, Weeb Sullivan, contestó: – Parece utópico que la DEA digite las acciones de ambos bandos, ya que no podemos intervenir en sus decisiones. Posiblemente, si los dejamos actuar, se reúnan y formen la Supermafia.
Parker esbozaba una sonrisa detrás de su pipa llena de tabaco, sin encender...
– En una situación corriente eso sería lo que podría suceder, ¡pero Frank está vivo y pide ayuda! Y esa es la clave del momento que nos permite mover nuestras piezas al casillero adecuado.
– Tener presente el efecto mariposa de la teoría del caos: Las pequeñas variaciones afectan en gran magnitud sistemas complejos y mayúsculos, tal como un pequeño cambio de vía que casi no precisa energía, lleva un tren completo a otro destino.
– ¡Debemos hacer ese cambio de vía!
– Si ayudamos a Kevin Beck a desenterrarlo con tremendas dificultades y arriesgando su vida, ¡el siciliano le estará eternamente agradecido! Es la falla de los sicilianos, son gente de palabra, le deberá la vida… ¡y se la deberá en serio!
– Con eso ubicamos a Kevin Beck en Medellín, junto a Pedro Bucci y sus miles de millones de dólares y junto a Frank y sus miles de millones de dólares. Kevin sería un virus mutante inyectado en el cerebro de nuestros enemigos... y con leves sugerencias debería hacer el cambio de vía.
– Como Frank no podrá retornar, confiaría sus gestiones a Beck, que al mismo tiempo, debido a su amistad y algún tipo de magia que parece tener, es un Consejero ad honoren de Pedro Bucci, con lo que tenemos a un mercenario que cuenta con el apoyo de los narcos sudamericanos, la Mafia y la DEA. ¡Un súper agente! Más bien diría, el mejor simulador que conozco; todo lo arregla con una sonrisa, y jamás usa ningún tipo de armas.
– Si Kevin Beck llevase a los Leones un plan viable para destruir a la Mafia china y recuperar el negocio, y por otro lado, contando con nuestra secreta ayuda, hacemos algo para que se infiltre en la mafia amarilla, conocería el camino de la heroína, sus contactos y modus operandis… y allí también puede hacer otro cambio de vía.
– Entonces completaríamos la utopía total. ¡Un agente de la DEA que estaría bien relacionado y actuando en las más altas esferas entre los narcotraficantes colombianos, la mafia norteamericana y la mafia china! Sería una fuente de información vital, con la ventaja de poder influir en las decisiones que adoptará cada grupo según nuestros planes.
– La posibilidad es muy remota, y me parece utópico lograr semejante complot con solo un agente.
– No estaría