Sociología de las organizaciones - Una visión latinoamericana. Tirso Suárez Núñez

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largo tiempo continúan siendo elaboradas únicamente por la empresa que la patentó originalmente, debido a que renueva su vigencia con base en pequeños cambios, por ello otras empresas no pueden producir y comerciar versiones genéricas a precios menores. Las empresas farmacéuticas argumentan que el costo del desarrollo de nuevos fármacos y el riesgo de fracaso es grande, en mucho esto es cierto, pero también lo es que las empresas gastan mucho dinero en mercadotecnia y cabildeo. Es claro que sin las reglas gubernamentales no existirían las patentes y las empresas farmacéuticas no tendrían incentivos para innovar, la cuestión aquí es la forma en que el gobierno organiza el merado permitiéndole demasiadas libertades a los fabricantes de medicinas y concediendo poco margen de acción a los consumidores.

      Nuevamente es el dilema cuando tiempo extender los derechos de propiedad para incentivar la labor del creador, mientras se le niega a la sociedad un acceso libre o de bajo precio, a obras que cuesta poco o nada reproducir. Esto es complicado cuando se trata de software, creatividad artística y la bio-medicina, se complica mas cuando son las grandes empresas las que son dueñas de los derechos de propiedad y siempre quieren mas y casi siempre lo obtienen.

      •Monopolio:

      Los empresarios necesitan algún grado de poder de mercado que les de seguridad y confianza y los incentive a asumir el riesgo que implica iniciar, expandir e innovar en empresas. Si el poder concedido es muy grande la empresa le traslada al precio mas valor del necesario a costa consumidor. Las leyes antimonopolio y las agencias que regulan ciertas industrias son las que definen la cantidad de poder, mediante normas expresas y vigilan su aplicación. Las nuevas industrias que están surgiendo, demandan nueva reglamentación para evitar la concentración de poder. Esto es muy claro en México en el caso de las telecomunicaciones, la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) es la agencia la encargada de regular, promover y supervisar el desarrollo eficiente y la cobertura social amplia de las telecomunicaciones y la radiodifusión en México, enfrentándose a los gigantes de la industria como Telmex y Televisa que cuentan con poder económico y político. Otras agencias con acción similar son: la Comisión Reguladora de la Energía y la Comisión Federal de Competencia Económica, encargadas de poner en marcha la privatización del petróleo y las gasolinas, como resultado de las reformas constitucionales que le quitaron al organismo publico Pemex el monopolio de la exploración y explotación del petróleo y sus derivados.

      Otros casos con proyecciones a nivel mundial es el de la gran empresa farmacéutica alemana Bayer que compró a Monsanto, otro gigante líder en la producción de semillas genéticamente mejoradas y famoso por sus practicas poco éticas. Frente este poder económico los gobiernos tienen que revisar sus leyes e intentar controlar sus actividades y proteger los intereses de los consumidores. Similar desafío es el que representa la empresa virtual Amazon que inició vendiendo libros y ahora comercia todo tipo de enseres y productos para el hogar, gracias a la plataforma electrónica que ha desarrollado, con lo cual pone en aprietos a las tiendas de departamentos como JC Penney, Sears en los Estados Unidos y Liverpool en México, adicionalmente, por su condición de virtual, Amazon no paga impuestos en la mayor parte de los países donde tiene operaciones.

      Mientras que los antiguos monopolios controlaban la producción, los nuevos controlan redes electrónicas de comunicación; las leyes a menudo lograban contener a los antiguos monopolios, pero los nuevos saben mantenerse al margen, su estrategia es conjuntar poder económico y político, adquirir patentes, marcas y dictar los estándares de la industria e invertir en abogados y cabildeo para que las leyes que surjan les favorezca.

      De esta manera hemos culminado con un recorrido de mas de cinco Siglos de seguimiento al nacimiento y evolución de la economía de mercado, el sistema capitalista y a las empresas que sostienen en operación ambos esquemas y con sus consecuencias sociales. Se cierra este capítulo con un intento de conclusiones.

      Es Inglaterra en los siglos XV y XVIII, donde la sociedad de mercado surge y se instala por primera vez; la presencia de factores materiales e inmateriales se conjugan para su expansión en Europa y posteriormente en sus colonias. Existen condiciones objetivas y subjetivas que explican buena parte del fenómeno inglés en ese tiempo, entre ellas la presencia de individuos motivados por una conducta interesada y necesitada, trátese de inventores, hombres de negocios, emprendedores y obreros. La innovación, facilita la maquinización de los procesos de manufactura en los espacios confinados, lo que da como resultado un aumento de la escala de producción y de la productividad, que permite la creación de excedentes y la acumulación de capital.

      La sociedad de mercado, el capital y el capitalismo, explican el surgimiento de las organizaciones y el lugar que ocupan en nuestro tiempo y en nuestra vida. Una de ellas es la fábrica, parte esencial de la empresa industrial, brazo operador del capitalismo. La producción en gran escala que se logra en ella es posible por insumos baratos, la mecanización de las operaciones, la especialización como método de trabajo y el control de las operaciones simples, que trajo la denominada revolución industrial. Todo ello da lugar a importantes economías que permiten ofrecer bienes a precios atractivos a consumidores, quienes están dotados de un ingreso proveniente de sus propios empleos industriales. La dinámica capitalista resulta imparable, pero las fabricas dejan una huella importante donde se instalan, son fuentes de empleo, de consumo y de innovación y productividad, pero también de explotación y lucha política.

      Los obreros se organizan para conquistar cada vez mejores condiciones físicas y salariales en las fábricas, surgen los sindicatos, las centrales obreras y los partidos políticos, que les permiten avanzar. Los empresarios capitalistas, con apoyo del Estado enmarcan en las metrópolis la acción de los sindicatos y las centrales obreras. Pero luego los propietarios trasladan la fábrica a la periferia, donde las acostumbradas condiciones están presentes.

      La acumulación de capital lograda da lugar a un capitalismo especialmente agresivo y expansivo, capaz de manejar y controlar el mercado, incluso al Estado. A cargo de grandes capitalistas, las empresas inundan, para bien y para mal, buena parte de Europa y alcanzan América, África y Asia. Los capítulos 3 y 4 están dedicados a perfilar los rasgos típicos de las organizaciones de esta etapa.

      Es cierto que aumenta el bienestar material de las clases populares de los países centrales como los europeos y sus colonias en América del Norte como Estados Unidos y Canadá y África (Sud-África), pero también sub-desarrollan buena parte de la América Latina y África del Norte, cuando especializan a sus economías como proveedoras de materias primas que luego de ser transformadas en las metrópolis, regresan con un gran valor agregado. Las revoluciones de los países latinoamericanos buscan romper la dependencia, pero no lo logran del todo, las nuevas condiciones que enfrentan especialmente en materia de ciencia, tecnología y empresas de alcance global, les demandan mayores esfuerzos.

      El capitalismo en su etapa global fomenta el libre flujo de capitales, mercancías e información, que facilitan el comercio mundial, pero sin libre transito de personas. Sus consecuencias desatan fuertes presiones sociales que promueven: la defensa del medio ambiente, mayor justicia social y la protección de las culturas indígenas avasalladas por la globalización. La inversión especulativa adquiere


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