Políticas públicas y regulación en las tecnologías disruptivas. Группа авторов

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presente escrito busca estudiar algunas de las causas de esa brecha en Colombia y la normativa actual en la materia, para analizar de qué manera se pueden disminuir esos factores y así llegar a un escenario de inclusión que permita a las poblaciones relegadas acceder a las TIC, siendo este un mecanismo para alcanzar los ODS.

      PALABRAS CLAVE

      Inclusión digital; Inclusión social; Brecha digital; Objetivos de Desarrollo Sostenible; Conectividad; Servicio universal; Caso colombiano.

      ABSTRACT

      In response to the digital divide that has been generated as a result of factors such as socioeconomic status, gender, educational level, ethnicity, age and geographical location, digital inclusion may be used as a tool seeking to facilitate access and appropriation of ICT, in order to improve the people’s quality of life through its implementation.

      The purpose of this paper is to study some of the causes of this gap and its regulation in Colombia, to analyze how a digital inclusion scenario can be reached, in order to allow relegated populations access to and to appropriate the ICT, being this a mechanism that lead to achieving the SDG.

      KEYWORDS

      Digital Inclusion; Social Inclusion; Digital Divide; Public Policies; Sustainable Development Goals; Connectivity; Universal Service; Colombian Case.

      INTRODUCCIÓN

      Las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (en adelante TIC) tienen como objetivo principal constituirse como una herramienta para que el ser humano mejore su calidad de vida y se relacione con el mundo con mayor facilidad. En ese sentido, gracias a los constantes y acelerados desarrollos en materia tecnológica, cada vez son más las personas que las incorporan en su contexto diario y se benefician de ellas.

      Una de las principales consecuencias de que las TIC hayan permeado la mayoría de los espacios de la vida cotidiana de las personas es el surgimiento de la necesidad de hacer parte de esta transformación social y digital; por ello, no disponer de los mecanismos que permitan introducirse a este mundo supone un factor que crea una nueva forma de desigualdad, la cual está basada en la imposibilidad de acceder a las comodidades, conocimiento y oportunidades que pueden brindar las TIC.

      Este desequilibrio, si bien puede estar relacionado con la ya existente brecha económica, ocasionada por la disparidad en los niveles de riqueza y pobreza, no tiene como única causa este factor. Ciertamente, como se analizará en este escrito, existen otras circunstancias que determinan la amplitud de la denominada brecha digital, como el género, el nivel educativo, la pertenencia a un grupo étnico y etario, y la ubicación geográfica. La problemática se incrementa cuando la brecha digital que se genera ocasiona, a su vez, una expansión de la brecha social, al impedir que las personas pertenecientes a los grupos relegados (como consecuencia de los factores mencionados) adquieran las habilidades y obtengan los recursos necesarios para mejorar su nivel de vida, creando así un ciclo que amplía cada vez más las brechas digital y social.

      Así, partiendo de la premisa de que la brecha digital es una problemática que conduce a la generación de problemáticas importantes en una sociedad, aparece el interrogante de cómo conseguir que todos los ciudadanos hagan parte de la Sociedad de la Información y se beneficien de las diferentes herramientas y facilidades que esta trae consigo. Para responder al mismo, en este escrito se estudiarán en un primer momento los factores mencionados como causantes de la brecha digital en Colombia, para entender su definición y dimensión en el país. Posteriormente, se analizará lo que significa la inclusión digital como solución a este problema evidenciando, además, cómo esta es una herramienta para lograr el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Por último, se contrastará el deber ser de la inclusión, resultante del anterior análisis, con el estado actual de la normativa colombiana (referida a la brecha en el país), para determinar esta última es suficiente para lograr el escenario de la inclusión digital y, con base en lo que se concluya, detectar qué retos se presentan en la materia, para brindar una serie de recomendaciones tendientes a su superación.

      I. LA BRECHA DIGITAL

      Las TIC se constituyen en la actualidad como una herramienta que, sin duda alguna, facilita el acceso al conocimiento, el empoderamiento de las comunidades, el establecimiento de nuevas formas de trabajo, la interconexión entre personas, la generación de nuevos modelos de negocio, industriales, educativos, culturales y de gobierno, entre otra enorme cantidad de ventajas, permeando de esta manera todos los ámbitos de la cotidianidad. Así, dependiendo del uso que se les dé, pueden convertirse en un instrumento que mejora la calidad de vida de los individuos y crea nuevas formas de contacto entre ellos.

      Asimismo, a una mayor escala, se ha evidenciado cómo las TIC tienen un impacto positivo en la economía de un país, pues, tal como lo afirma Katz (2009), se ha demostrado, por ejemplo, en el caso estadounidense, cómo estas tecnologías aumentan la productividad de los trabajadores en el desempeño de sus tareas. Es preciso indicar que para que se dé ese tipo de crecimiento económico no basta con la sola adquisición de la infraestructura TIC que se pretenda usar, sino que adicionalmente debe capacitarse el recurso humano en su utilización y debe determinarse cómo se van a cambiar los procesos de producción con su implementación, pues es esto lo que genera el verdadero impacto económico y social.

      Sin embargo, a pesar de todas las ventajas que representan las TIC para los individuos y para el crecimiento de un país, no toda la población se encuentra en igualdad de oportunidades para acceder y beneficiarse de ellas, y esto ocurre como consecuencia de la denominada brecha digital, que es considerada la nueva forma de desigualdad del siglo XXI, en la que quienes son excluidos de su uso no pueden participar en el desarrollo de la nueva sociedad que se construye, como lo indica Alva de la Selva (2015).

      Se entiende por brecha digital la diferenciación que existe en términos de acceso, uso y apropiación1 de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones entre diferentes grupos poblacionales, como resultado de factores principalmente económicos, de género, educativos, étnicos, geográficos y generacionales.

      Analizar cada uno de los aspectos mencionados permitirá crear un panorama que ayudará a entender cómo estos factores se configuran como causantes de la brecha, punto clave para determinar luego la forma en la que se puede llegar a la inclusión digital como solución a esta problemática. Por ello, a continuación, se procederá a estudiar brevemente la manifestación de los anteriores aspectos en Colombia:

      1. LA BRECHA DIGITAL Y EL NIVEL SOCIOECONÓMICO

      Algunos autores, como Rodríguez y Sandoval (2017), han hecho referencia al término estratificación digital para hablar de la diferencia en términos de acceso, uso y apropiación de las TIC que se produce como consecuencia de la pertenencia a determinado nivel socioeconómico. En ese sentido, se considera que los ingresos y el poder adquisitivo que tiene una persona se encuentran directamente ligados a la posibilidad que esta tiene de acceder a las TIC y de aprovechar el conocimiento y beneficios que significan, constituyéndose así este factor como una de las principales causas de la brecha digital. Lo anterior ocurre a tal grado que la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (2009) indicó que esta brecha se da, principalmente, como resultado de las brechas socioeconómicas preexistentes. De hecho, la Unión Internacional de Telecomunicaciones estimó que la desigualdad en el acceso a Internet es dos veces más grande que la que existe en cuanto a ingresos económicos (Chen y Wellman, 2003).

      Reddick y Boucher (2002), citados por Rodríguez (2006), indicaron que la relación entre los ingresos de una persona y el acceso a internet es la siguiente: a mayor ingreso, mayor probabilidad de que una persona sea usuaria de la red y mayor el promedio de ingresos de una sociedad. Es interesante analizar eso de la mano con la diferenciación que se ve en términos de uso de internet al comparar a quienes tienen altos ingresos con quienes no: el primer grupo utiliza esta herramienta particularmente en asuntos relacionados con sus negocios, en contraste con quienes tienen un bajo nivel de ingresos, que suelen emplear esta red con fines relacionados con el ocio y redes sociales, como lo evidencia Alfonso (2020), convirtiéndose así internet en un bien inferior para las personas que tienen ingresos inferiores, que son quienes emplean esta


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