Camino hacia lo desconocido. Joana Serrano
tuviera que resumir este libro lo haría con la frase de Albert Camus «en las profundidades del invierno finalmente aprendí que en mi interior habitaba un verano invencible».
Dr. Daniel Mené López
Médico, acupuntor y filántropo
INTRODUCCIÓN
«Si soy lo que tengo y lo que tengo lo pierdo, entonces ¿quién soy?»
Erich Fromm, psicólogo social estadounidense (1900-1980)
Mis queridos lectores, este libro ya no esperaba más. Este libro lo escribo para mí y para todos los que se sientan identificados con alguna de las preguntas y respuestas que formulo en él. Llevo toda mi vida de mujer adulta buscando experiencias y apartando los velos que se interponían entre la verdad y la mentira. La verdad, llamada realidad de la vida cotidiana, demasiado prosaica para implicarse en ella a fondo y las mentiras dolorosas al descubierto, pero con la fuerza que da la claridad.
Me sorprenden, incluso admiro, las personas que tienen la capacidad de abstraerse en su trabajo, estudios, familia y relaciones de la manera más natural desoyendo la necesidad interior del autodescubrimiento. Seguramente, este libro no llegará a sus manos porque Caminar hacia lo desconocido es el último camino que se les ocurriría iniciar en la vida. Los entiendo perfectamente porque intuyen que las aventuras están bien para los héroes de las novelas de ficción. Sin embargo, deseo que este libro llegue a las miles de personas que se hacen preguntas existenciales como: ¿quién soy?, ¿qué sentido tiene mi vida?, ¿qué sentido tiene el sufrimiento?, ¿todo es fruto del azar?, ¿existe el amor incondicional, el espíritu, Dios? Son las eternas preguntas que los filósofos, pensadores, científicos y maestros nos han explicado con mil argumentos. Y, a pesar de sus esfuerzos, seguimos con esa sensación de vacío existencial porque toda la ciencia y filosofía no nos ha podido liberar de la ignorancia incrustada entre las ideas y la experiencia de plenitud existencial que solo unos pocos iluminados han conseguido dilucidar. Entiendo que sus mensajes no han calado en la masa crítica suficiente para dar un salto evolutivo como humanidad. Y también entiendo que es necesario crear mejores opciones para una nueva mayoría de buscadores en busca de sentido.
Me pregunto, ¿qué le pasa a esta humanidad que repite hasta el aburrimiento los mismos patrones de autodestrucción? Sinceramente, creo que nos queda alguna oportunidad para mejorarnos reconstruyéndonos uno por uno hasta coexistir en una sociedad mejor. Mientras haya seres humanos que se hagan preguntas como estas y que quieran encontrar respuestas y soluciones para ellos mismos y para los demás, hay esperanza en alcanzar ese salto cuántico evolutivo. Estas personas anónimas, en su mayoría, son idealistas que trabajan en solitario su propia conciencia hasta crear su individual masa crítica de experiencias transformadoras que les sirva de incontestable autorreferencia donde ganar confianza en la incansable búsqueda del ser.
Por eso, este libro habla de la búsqueda de lo desconocido, porque nunca hemos estado en ese lugar ni experimentado con plenitud el amor incondicional, la solidaridad y la paz de manera permanente. Si acaso, de vez en cuando en forma de gotas de agua que se escapan entre los dedos durante la larga travesía por el desierto hacia el oasis. Este es un camino de héroes y heroínas, como Ulises en busca de Ítaca. Os habréis fijado que empiezan a haber miles de Ulises queriendo emprender su camino, su aventura, preguntándose qué hay más allá de las fronteras de lo conocido y, sobre todo, si allí encontrarán la tan anhelada felicidad. Igual que Ulises, hay que zarpar rumbo a lo desconocido, él viajó por el mar Mediterráneo, nosotros tenemos que hacer un viaje muy interior desalojando y vaciándonos de montones de viejas creencias limitantes hasta quedarnos ligeros, libres y disponibles hasta el encuentro con el Ser. Este camino hacia lo desconocido se hace con mucho arrojo y voluntad. Hay que planear unos pasos e improvisar kilómetros. Desarrollar la intuición y estar dispuesto a caminar en solitario buena parte del recorrido. Mientras caminas vas descubriendo tu sentido existencial. Sobre esto, adelanto que el sentido es caminar hasta reconocerte, porque «tú eres el camino» transitando con una brújula interior que indica el rumbo siempre caminando hacia ti y hacia la vida plena que te mereces.
En mi caso no he tenido otra opción que la de iniciar este largo viaje porque era mi instinto, como una llamada ineludible hacia el propio destino. Inevitablemente escuchaba las señales de la brújula abriendo mapas y explorando territorios, hasta que comprendí que iba hacia un destino desconocido. Pero tú, mi querido lector y mi querida lectora, seguramente puedes elegir cuándo quieres embarcar en un viaje fantástico para protagonizar la historia más importante de tu vida. Os adelanto, estimados, que ese es uno de los premios más sabrosos de esta gran aventura, protagonizar una gran producción de la historia más apasionante de la vida. Aquí no valen los juegos de rol, ni las películas 3D, o eres el genuino protagonista de carne y hueso o te quedas sin aventura.
Leo tu mente preguntándose, ¿para qué quiero vivir una aventura como esta? Puede ser que quieras dar tus pasos por un acto de generosidad hacia ti o hacia los demás. Lo que sí es seguro es que vas hacia un futuro mejor. O tal vez te motive una gran autoestima y quieras hacer tus sueños realidad. También encontrarás razones en tu rebeldía interior que ha decidido salir del sistema programado desde tu nacimiento. Puede ser también que no lo necesites, pero que lo quieras, como el que se compra un Lamborghini. Yo tomé las decisiones rumbo al camino del héroe desde la necesidad de encontrar respuestas, de darle valor a la propia vida y a la de mi entorno. Podríamos decir que la vida antes de zarpar rumbo a lo desconocido era una buena vida, desde el punto de vista cultural y humano, con formación, buena familia y buen trabajo. En una confortable clase media que en la cumbre de las expectativas cumplidas me acabé preguntando, ¿todo se acabó aquí?, ¿cómo me siento?, ¿qué quiero ahora?, ¿qué me falta? Amigos míos, el vacío existencial se hizo plenamente consciente, es como una mordida en el corazón, por lo que decidí embarcarme a por todas, rumbo hacia mi destino. Para convertir el futuro en presente y el miedo en valor.
También añado que albergo la esperanza de encontrar a través de estas letras algunas almas amigas que coincidan con lo expuesto. Sería un gran regalo reunirnos para que la suma de islas solitarias creen una nueva tierra donde crecer y desarrollar oportunidades significativas de cambio, renaciendo de nuevo a una existencia iluminada y sencilla. No es el momento de caminar más en solitario, tampoco de encajar donde no perteneces, ni tan solo de sobrevivir, es el momento de aunar voluntades para que los sueños se hagan realidad. Estos sueños forman parte del futuro, y si hemos tenido la fuerza individual de mantener vivo el sentido trascendental de la vida contra viento y marea, me puedo imaginar lo que podríamos hacer conjuntamente. Por mi parte pongo este primer pilar señalizando el territorio de mis comprensiones, ideales y ofreciendo ayuda a quien aún no ha llegado hasta aquí, pero quiere llegar. Igual para aquellos que están en el mismo lugar pero que necesitan sumarse para acceder al siguiente nivel. Os espero en el futuro, amigos míos, es como una cita a ciegas donde nunca sabes lo que puede pasar, pero si ocurre la magia del reencuentro de las almas que se reconocen, la vida puede dar un giro de ciento ochenta grados hacia la plenitud. ¿Quién se puede negar a eso?, solo los que han renunciado a sus sueños lúcidos. Pero incluso ellos pueden volver a abrir los ojos cuando les recordemos entre todos quiénes son, porque nunca se puede dejar de ser, solo te puedes haber olvidado.
El buscador de ahora encuentra instrucción entre líderes de los negocios, que practican el arte de la meditación, de la oratoria, de la ciencia, como Jobs sin ir más lejos. Se siente impulsado por la necesidad de ser reconocido, próspero y afamado, sin embargo, la andadura hacia el Ser necesita de humildad, generosidad y desapego porque «si te tienes a ti mismo, lo tienes todo». Por eso, decidí en algún momento que si me pierdo alguna vez que sea en el camino de vuelta a mi casa, a mi Ser, que él ya me encontrará.
CAPÍTULO 1
«Cuando dejo de ser lo que soy, me convierto en lo que podría ser»
Lao Tsé, filósofo chino (570 a. C.)
«Dentro de nosotros existe algo que no tiene nombre, y eso es lo que realmente somos»
José Saramago, escritor portugués (1922-2010)
«El poseer no existe, solo existe el ser: ese ser que aspira hasta el último aliento hasta la asfixia»
Franz