¡Chau desorden!. Cintia Peralta Martin

¡Chau desorden! - Cintia Peralta Martin


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muy lento.

      • A esa mamá que llora porque no puede llevar adelante las actividades (como antes podía) y que se frustra por esta nueva etapa en la que no se siente productiva en algunas áreas de su vida.

      • A esa mamá que ama a sus hijos, pero que anhela tener un pequeño respiro en medio de tanto caos.

      • A esa mamá que lucha con el desorden de sus hijos adolescentes y una familia que no colabora en mantener el orden.

      • También a esa mujer que siempre luchó por ordenar su vida, y aún lo sigue intentando.

      Lo más importante es crecer en el orden, interno y externo, que puedas mirarte como una obra en construcción y no como un edificio estático.

      Te invito entonces a leer y trabajar sobre este libro sola, con una amiga o quizás en un grupo.

      El camino es largo pero la satisfacción es inmensa, porque cuando caminas junto a otras personas, todo parece más fácil, se potencian, y alientan para salir del desorden en que pueden estar inmersas.

      Es reencontrarse como mujeres, conectarse con las áreas difíciles y fluir hacia la mejor versión de una misma. ¡Es posible!

       PRIMERA PARTE. CINCO CLAVES PARA SALIR DEL DESORDEN

       Introducción

      El orden y el desorden, han sido grandes rivales desde el inicio de los tiempos. Tienen costumbres y hábitos distintos, formas diferentes de proceder y sobre todo, resultados en polos opuestos.

      Por lo general, las personas nos vemos influenciadas por uno de ellos en mayor medida, y dependiendo de las situaciones de vida que vivamos, estas pueden favorecer a uno u a otro.

      Las mejores amigas del desorden, son las excusas (que pueden ser innumerables, y distintas para cada persona del mundo), porque ellas avalan las acciones, hábitos, y formas de hacer que tiene el desorden, dejando de lado los beneficios que otorga el orden en todos los aspectos.

      Un ambiente desordenado, probablemente (y seguramente) sea el resultado de una vida desordenada, sin rutinas, sin horarios, sin rumbo fijo.

      Es así que en este punto, quiero hacer un alto para decirte que no existe una fórmula mágica para ordenar o ser una persona ordenada. Esta es una tarea rutinaria, (y no por tal, debe ser considerada aburrida), que requiere de sacrificio, constancia, perseverancia, en hacer un poco cada día, y determinar días para hacer una actividad específica.

      La planificación y la anticipación, por su parte, son las mejores amigas del orden. Son aliadas, y hacen que la vida de las personas sea mucho más simple y llevadera, con menos estrés.

      Te invito entonces a que me acompañes en este recorrido del desorden, hacia el orden, de una manera particular, a través de 5 claves, desde adentro hacia afuera, (porque esa es la verdadera revolución).

      ¡Abróchate el cinturón y que tengas un excelente viaje!

      ¡Nos vemos allá!

      Capítulo 1.

      Clave 1 - Darse cuenta

      Martina es licenciada en recursos humanos y trabaja en una oficina en el centro de su ciudad. Tiene 28 años, está casada y tiene un hijo de 7 años que va a la escuela cerca de su trabajo.

      Sus labores diarias en su empleo ya están planificadas: su jefe le deja una lista de lo que tiene que hacer en el día sí o sí, y también otras actividades, en caso de sobrarle tiempo (algo que generalmente no sucede, ya que a veces ni siquiera logra terminar las primeras tareas de la lista).

      Cada día, luego de recoger a su hijo de la escuela, llega a una casa abarrotada, que no es el refugio que ella siempre soñó tener.

      Se siente cansada, agotada, aun durmiendo lo recomendado cada noche. Se siente desenfocada, y sin propósitos.

      Martina tiene dificultades, que pueden ser parecidas a las tuyas, porque vivir en el desorden puede provocar que estés funcionando en piloto automático.

      ¿Alguna vez te preguntaste en qué momento tu hogar se transformó en el caos actual?

      El primer paso que deberías dar, es “darte cuenta” y reconocer que hay Desorden, tanto en tu hogar como quizás también en tu vida. Porque el desorden no solo afecta en lo externo, sino también a tu mundo interno.

      Según la definición del diccionario, Desorden es “confusión y alteración del orden”, pero también “exceso o abuso”. Lo cual me lleva a pensar que cuando hay Desorden, hay exceso de situaciones y aun de sentimientos que no hacen bien, que atan e impiden avanzar.

      Contrariamente a eso, el Orden despierta paz, tranquilidad y muchos sentimientos agradables, además de darte la oportunidad de utilizar mejor tu tiempo, tener mayor productividad y ahorrar (energía y dinero).

      Darte cuenta, entender lo que te pasa, y poner en palabras eso que estás sintiendo, es el primer paso que deberías dar, para salir de tu zona de confort, e ir mitigando una a una las excusas que quizás lleguen a tu mente cuando decides arrancar.

      De nada serviría que fuera a tu casa a ordenarlo todo, según mis criterios, si la persona que vive ahí (tú) no está bien internamente.

      No es un camino fácil, y mucho menos rápido, sino que es un proceso que lleva su tiempo y cuenta con innumerables beneficios. Es un recorrido que a lo mejor nunca hiciste o que quizás alguna vez empezaste y no pudiste sostenerlo.

      Y en este punto, la Consultoría Psicológica / Counselling (profesión que amo, y a la cual me dedico desde que me recibí en diciembre de 2015), obra como puente entre el conflicto de las personas y el orden que anhelan tener, facilitando los procesos de autoconocimiento, autoaceptación y desarrollo de las potencialidades propias de los seres humanos.

      Hoy es tu momento, date el permiso de empezar de nuevo, con un nuevo ímpetu, y una nueva esperanza, de que esta vez ¡SÍ PODRÁS!

       HOJA DE RUTA

       Preguntas para averiguar la temperatura de tu vida y hogar

      Antes de empezar a ordenar, es útil que te hagas algunas preguntas acerca de por qué es necesario ordenar, de dónde viene tu desorden, y cómo podría afectarte iniciar un proceso de orden en todos los aspectos de tu vida.

      El objetivo principal de estas preguntas es que te conozcas un poco más a fondo. Por lo tanto, trata de ser muy consciente de lo que respondes, porque de esa forma podrás poner en perspectiva tu vida y hogar.

      1) ¿Cómo te llevas con el orden en tu vida y en tu hogar? En una escala de 1 a 10, siendo 1 lo más bajo, y 10 lo más alto. Sé amplia en tu respuesta.

      2) ¿Consideras que tu hogar está desordenado? ¿Y tu vida? Amplía tu respuesta y complétala con las áreas en las que consideras que hay desorden.

      3) ¿Te falta la motivación necesaria para empezar a hacer cambios externos e internos? Justifica tu respuesta.

      4) ¿Te gustaría mejorar, aprendiendo cómo organizarte? ¿Hay algo que te frena? Expláyate en tu respuesta.

      5) ¿Qué sentimientos te genera el desorden? Describe los más fuertes.

      6) ¿Ves a tu hogar como tu refugio, al lugar donde siempre quieres volver o te encuentras escapando de allí?

       Los efectos del desorden

      Un hogar desordenado afecta directamente tu bienestar, ya sea tu salud física, emocional, hasta tu situación económica y todo lo demás.

      • Efectos físicos

      • Efectos emocionales


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