Antequera, su Semana Santa. Agrupación de Hermandades y Cofradías de Semana Santa de Antequera
[8.4] Miercoles Santo
[8.5.a] Jueves Santo
[8.5.b] Jueves Santo
[8.6.a] Viernes Santo
[8.6.b] Viernes Santo
[8.6.c] Viernes Santo
[8.7] Domingo de Resurrección
[9] La Agrupación de Cofradías de Semana Santa
[1] Presentación
Francisco Ruiz Jiménez [Presidente de la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Semana Santa]
Hay momentos especialmente gratos para el presidente de la Agrupación de Cofradías. Este es uno de ellos, la redacción de estas líneas de presentación de esta obra que hoy ve la luz, y que ocupará un lugar muy destacado en la historia cofrade antequerana.
Muchos años han pasado, numerosos cofrades han dejado su esfuerzo, su dedicación y su trabajo en torno a la celebración de nuestra Semana Santa. Sin embargo, a pesar de la larga y extensa tradición que Antequera tiene en la conmemoración de su peculiar Semana Mayor, nunca ha contado con una obra de la categoría y dimensión que hoy tengo el honor de hacer pública.
La Agrupación de Cofradías de Antequera edita esta obra gráfica, con el deseo de recoger la tradición popular, orgullo, riqueza y reflejo del esfuerzo de una sociedad cuyas raíces religiosas se pierden en el tiempo, dando cuenta de una forma muy particular de sensibilidad donde se aúna el sentimiento, el arte y la belleza que trasciende los misterios del alma antequerana, más allá de las palabras, los conceptos, los ritos y las plegarias.
De esta manera reconocemos, modestamente, los valores únicos de nuestra tierra en una composición de textos inéditos que recorren lentamente, calle a calle y piedra a piedra, nuestra patria chica, Antequera, durante su Semana Santa, explicando, con ayuda de unas extraordinarias fotografías, la vasta obra en la que han contribuido y contribuyen cientos de miles de nuestros conciudadanos, que dedican parte de las ilusiones del año al esplendor de esta singular fiesta inigualable, muestra absoluta de su capacidad de amor, de su capacidad de relación.
La Agrupación, que se honra con formar parte de nuestra ciudad, contribuye con este libro a propiciar una excelente oportunidad para la divulgación de un profundo sentimiento de devoción popular hacia unas sagradas y sublimes imágenes, así como a toda una cultura cofrade.
Espero que la publicación de este trabajo sirva, no solo para que se difunda la importancia de esta historia, sino para que se mantenga la relación de amor entre generaciones de cofrades y Antequera. Sirva este libro como homenaje y reconocimiento a aquellos hermanos que también son los protagonistas.
Mi agradecimiento a todos los que han contribuido al nacimiento de este proyecto, en especial a los escritores por su confianza, a la editorial Exlibric por su gran apoyo, al autor de la portada y mi ánimo y entusiasmo a todos los que lean estas páginas, para que lo hagan con la misma ilusión con que yo las presento.
Antequera, Cuaresma 2015.
El pintor José Mª Fernández Rodríguez, dedica una parte importante de su obra a la Semana Santa y a sus personajes. Una obra atemporal fue este encargo oficial de cartel, realizado hacia 1908. El cual ha sido reproducido en múltiples ocasiones.
[2] Prólogo
Antonio Garrido Moraga [Real Academia de Nobles Artes de Antequera]
Las glorias nazarenas de Antequera
Escribir de Antequera es hacerlo de una de las ciudades con mayor patrimonio artístico de España y me quedo corto. Es la gran ciudad del barroco en lo que se refiere a la relación entre el espacio y el número de monumentos que adornan el casco histórico. Es para mí un placer y un honor escribir unas palabras para un libro muy importante para el conocimiento de la Semana Santa de la ciudad de la Peña de los Enamorados, tan vinculada a mi familia y que forma parte de mi educación sentimental y de mis mejores recuerdos de infancia.
Asistimos a una continuada producción bibliográfica de alto nivel sobre el patrimonio histórico de la ciudad y especialmente sobre lo que ya podemos llamar con propiedad el círculo artístico antequerano. Autores y obras son analizadas con rigor y muestran la importancia de Antequera en el conjunto de la Semana Santa andaluza.
Un aspecto que quiero destacar es el magnífico maridaje entre textos y fotografías. Se trata de un planteamiento editorial muy meditado que se ha convertido en un libro de gran belleza, tanto por continente como por contenido. En un libro de estas características, las magníficas fotos no son acompañamiento, son un discurso autónomo unido a los textos de investigación.
Se ha escrito sobre los modelos malagueños y sevillanos de la celebración pasionista. Con todos los elementos impresionistas que se quiera encontrar en la afirmación que sigue, es indudable que Antequera ha conservado unas características formales que la diferencian y le dan una personalidad definida y original. Baste citar el correr la Vega, la manera de llevar los tronos, las peculiaridades de estos, especialmente los de las vírgenes, y un conjunto de detalles en los que hay que incluir desde los lugares por donde discurren las procesiones hasta la gastronomía. No hay que olvidar que la Semana Santa es un discurso, una narración compleja, una celebración total, una suma de todos los sentidos que se ha ido decantando a través de los siglos.
La Semana Santa es un discurso didáctico por medio de imágenes, de esculturas policromadas que humanizan hasta el extremo las escenas de la tragedia, los momentos del sufrimiento de Jesús y los dolores de María. Poco hay de racional y casi todo de emocional en lo que se ha llamado teatro en la calle. Mover y conmover el ánimo, según el espíritu de Trento, es el objetivo. Se trata de provocar la adhesión absoluta en un ambiente propicio, especialmente el de la noche y las sombras. El libro ofrece una pluralidad de perspectivas que dan como resultado una comprensión total de la Semana Santa. No yerro si afirmo que se trata de una obra de referencia y de primer orden. Nueve capítulos forman la obra, todos a cargo de reconocidos especialistas. Después de la presentación de Francisco Ruiz Jiménez, actual presidente de la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Semana Santa de Antequera, y de estas palabras, el primer trabajo es de mi querido José Escalante, que nos ofrece con su pericia habitual el marco histórico, el ámbito evolutivo en el que se desarrolla la celebración. Un bloque lo forma el universo artístico, empezando con el elemento clave, las imágenes, a cargo de mi colega Juan Antonio Sánchez López. Se destaca la extraordinaria calidad de las obras analizadas. Justa fama tiene la platería antequerana, que estudia mi estimado amigo Eduardo Nieto. Las artes suntuarias son elementos con valor en sí mismo y que también deben interpretarse en el conjunto, en su totalidad. Trata también Eduardo una aproximación al bordado como elemento esencial del aparato procesional.
El trono antequerano es una aportación de enorme belleza y originalidad. Todo en su estructura está al servicio de la imagen que lo preside, insisto que más en los de las vírgenes. La peana de carrete y el justo equilibrio de las proporciones le aportan un sello singular. Estudia su evolución Antonio Fernández Paradas. Un elemento muy característico son las capillas y capillas votivas, estudiadas por Sergio Ramírez. En paralelo con el universo artístico y derivado de él, se ofrece el universo simbólico, los otros códigos de comunicación, las otras formas de expresar el mensaje, que tienen una clara relación con manifestaciones muy arraigadas en el imaginario de la colectividad. Manuel J. Barón analiza las vegas, los personajes, los elementos diferenciadores y los cultos cuaresmales. De Carlos Ismael Álvarez y Rafael Gallardo es un capítulo sobre la heráldica, lenguaje que compendia historia y devoción.
De María Rosales y José Escalante son las perspectivas dedicadas al Pregón y a los carteles oficiales, las publicaciones. De María Eugenia Acedo es el apartado de la Semana Santa