Tendón. Antonio Jurado Bueno
La sustancia fundamental es la responsable de la contracción del tendón en reposo, por lo que su apariencia es ondulada10 12 54. Bajo la acción de fuerzas externas los tejidos conectivos cambian su configuración, deformándose. De este modo, el tendón es aplanado cuando está sometido a una fuerza, pero, cuando ésta cesa, aquél tiende a recuperar su aspecto ondulado, lo que se corresponde con la región basal de la curva carga/elongación (fig. 2-4). Los tejidos de colágeno, como la piel y el ligamento, presentan un comportamiento biomecánico similar al del tendón cuando se los somete a carga10 54.
PROPIEDADES ESTRUCTURALES DEL TENDÓN
Viscoelasticidad
El tendón sometido a tensión presenta un comportamiento elástico no lineal si se representa por medio de un diagrama (fig. 2-1). El comportamiento del tendón depende en gran parte de su capacidad viscoelástica, que podemos definir como la relación entre la deformación máxima y el tiempo necesario para conseguirla. La relación entre estrés y estiramiento no es constante, sino que se ve modificada por dos variables, que son el tiempo y la carga:
a) Bajo carga constante, el tendón aumenta su longitud. Es el concepto de creep, entendido como la propiedad que poseen determinados materiales biológicos de, ante un estiramiento de tensión moderada mantenido de forma prolongada en el tiempo, modificar gradualmente su estructura y permanecer en estado de elongación hasta que cede dicha tensión11 52.
FIGURA 2-1. Comportamiento biomecánico del tendón. (A) El tendón sometido a carga constante aumenta su longitud (concepto de creep). (B) El tendón sometido a deformación constante, conforme pasa el tiempo, requiere menos estrés para mantener la deformación; éste es el concepto de estrés-relajación. Tomado de: Best T, Garrett WE. Muscle and tendon. En: DeLee JC, Drez D. Orthopaedic Sports Medicine: Principles and Practice. Philadelphia:WB Saunders; 1994.
b) Bajo deformación constante, la carga necesaria para mantener la deformación es cada vez menor12 14 55.
Grosor y longitud
Las dimensiones del tendón influyen decisivamente en la curva carga-deformación. Generalmente, un tendón ancho debería soportar grandes fuerzas para lograr el mismo porcentaje de elongación que uno con menor área de sección sometido a menores fuerzas. Un tendón largo, por otro lado, debería experimentar un cambio importante en la longitud al aplicar la misma carga que un tendón ancho (fig. 2-2).
FIGURA 2-2. (A) Representación de dos tendones de sección diferente sometidos a la misma carga. A mayor número de fibras, mayor fuerza y mayor rigidez; la elongación necesaria para la rotura es la misma. (B) Efectos de la carga sobre dos tendones de longitudes diferentes. Para una mayor longitud, la rigidez disminuye, la fuerza es la misma y la elongación necesaria para la rotura es aún mayor. Tomado de: Butler DL, Grood ES, Noyes FR, Zernicke RF. Biomechanics of ligaments and tendons. Exerc Sport Sci Rev 1978; 6:125-81.
Otra característica de los cuerpos viscoelásticos es la disipación de energía. Si se elonga un espécimen de tendón hasta alcanzar el pico de estiramiento y posteriormente se le permite recuperar su tamaño inicial con desplazamiento constante, ambas curvas, de estiramiento y relajación, no coinciden, sino que entre ambas existe un área que representa la energía perdida durante el ciclo completo12 (fig. 2-3). En la figura se muestra el clásico ciclo carga/deformación sobre un tendón. La región basal (A), al serle aplicada una fuerza, sufre una deformación (B). Cuando la fuerza cesa la estructura recupera su característica inicial, pero en el ciclo carga/deformación/recuperación una parte de la energía se disipa –se convierte en calor–, lo que se conoce como histéresis12.
FIGURA 2-3. Representación de la disipación de energía. La curva superior representa la deformación del tendón sometido a una carga. La curva inferior representa la vuelta a la posición inicial cuando la carga cesa. Entre ambas curvas aparece un espacio que representa la disipación o pérdida de energía durante el ciclo.
Curva carga/deformación
Las propiedades anteriormente expuestas se representan gráficamente en la curva carga/deformación, en la que se puede objetivar la deformación debida a la carga. Estos datos provienen de estudios realizados in vitro sobre tendones aislados que han sido sometidos a elongación hasta la rotura. Los estudios referentes a la aplicación de cargas sobre el tendón fueron sintetizados por Butler et al. en 1978, en lo que se conoce como curva de estrés/tensión o carga/estiramiento12 (fig. 2-4).
Estrés es la cantidad de carga por unidad de sección, mientras que tensión se describe como la elongación temporal que ocurre cuando el estrés es aplicado dentro de los límites fisiológicos. Butler et al. describieron los acontecimientos que suceden en el tendón sometido a carga en la llamada curva carga/deformación, la cual fue dividida en cuatro zonas12:
FIGURA 2-4. Representación de la curva carga/deformación. Tomado de: Butler DL, Grood ES, Noyes FR, Zernicke RF. Biomechanics of ligaments and tendons. Exerc Sport Sci Rev 1978; 6: 125-81.
Zona 1:Representa la parte basal de la curva. Los tendones, en situación de reposo, presentan una configuración ondulada, la cual desaparece cuando el tendón es estirado un 2% de su longitud inicial por la reorientación de sus fibras. Esto se recoge en la primera fase de la curva estrés/tensión. Lo que sucede es una reorientación de las fibras debido a las propiedades elásticas del tendón ya descritas. En esta fase se necesita una carga muy pequeña para alargar el tejido.
Zona 2:En un segundo tramo, llamado lineal, el tendón responde de manera lineal a la aplicación de tensión merced a la elongación de su estructura helicoidal. Es, pues, la deformación elástica. Al final de esta segunda fase ya se aprecian microrroturas en la parte final de este segmento de curva19.
Zona 3:El tercer tramo comprende el 4-8% del estiramiento. Comienza el deslizamiento de las fibras de colágeno entre sí debido a la rotura de los entrecruzamientos. Es lo que se conoce como deformación plástica. En esta porción de la curva el tendón trabaja de forma muy eficaz, pues es capaz de transmitir gran tensión al hueso y sufrir sólo una pequeña deformación. En esta fase la curva alcanza la cresta y comienza a decrecer alrededor del 6% del estiramiento48 55.
Zona 4:En la cuarta fase de la curva, correspondiente a valores de estiramiento superiores al 8%, suceden las roturas macroscópicas y la curva cae espectacularmente. Pequeñas variaciones de la carga se corresponden con deformaciones importantes34 35.
De todo ello se deduce que la zona de seguridad se encuentra entre el 0 y el 4% del estiramiento.
El comportamiento mecánico del colágeno durante el estrés depende en última instancia del tipo, número y localización de los enlaces intramoleculares18. Los cambios que ocurren a nivel molecular afectan a los enlaces intramoleculares y de manera especial a la cohesión intermolecular. El alto ratio de rotura tendinosa se debe a desestructuración en origen, que desemboca en la rotura, es decir, en última instancia, la rotura tendinosa es la consecuencia del daño fibrilar de origen