Manual de patología quirúrgica. Fernando Crovari Eulufi
de Medicina
Pontificia Universidad Católica de Chile
Felipe Quezada Díaz
Cirujano General
Residente de Coloproctología
Escuela de Medicina
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Felipe Riquelme Morales
Interno de Medicina
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Mauricio Rivas Contreras
Médico Cirujano
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Alejandro Rojas Cohen
Interno de Medicina
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Daniela Sandoval Montenegro
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Pedro Sfeir Vottero
Médico Cirujano
Residente de Cirugía General
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Sergio Vargas Salas
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Constanza Villalón Montenegro
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Residente de Investigación
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José Miguel Zúñiga Avendaño
Cirujano General
Residente de Coloproctología
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CAPÍTULO 1
ASEPSIA, ANTISEPSIA Y PABELLÓN QUIRÚRGICO
MANUEL MANZOR V. • LUZ MARÍA GALAZ L. • FERNANDO CROVARI E.
Introducción
Es conocido que los ambientes hospitalarios y en especial los ambientes quirúrgicos son portadores de riesgos tanto para los pacientes como para el personal de salud. Es por esto que durante la atención de nuestros pacientes debemos minimizar los riesgos conociendo los posibles agentes causales y su control, así como los principios de asepsia y antisepsia.
El pabellón quirúrgico es un recinto especialmente diseñado y equipado para garantizar la seguridad en la atención del paciente que va a ser sometido a una actividad anestésica y/o quirúrgica.
Constituye un subsistema dentro del hospital. Es una unidad funcional de alta complejidad, en donde interactúan personas, tecnologías, procedimientos y convergen muchos procesos que dependen de varios servicios del hospital (esterilización, anestesia, anatomía patológica, etc.).
Es considerado “área crítica”, ya que el paciente se encuentra en una situación de especial riesgo al estar expuesto durante un determinado tiempo a procedimientos invasivos que alteran las barreras naturales del organismo (se altera la indemnidad de la piel, se manipulan y exponen al ambiente cavidades y vísceras normalmente estériles, también se realizan otros procedimientos invasivos como intubación endotraqueal, cateterismo venoso, cateterismo arterial y cateterismo urinario, entre otros). De esta forma, estructuras normalmente protegidas son puestas en contacto con el medio ambiente, constituyendo potenciales puertas de entrada a microorganismos provenientes de la flora propia del paciente o de fuente exógena transferidos durante la intervención.
El personal que trabaja en el pabellón quirúrgico constituye un equipo que tiene funciones específicas y responsabilidades delimitadas, lo cual reviste especial importancia, puesto que ni el más completo reglamento interno ni la excelencia de una planta física por sí sola son suficientes en la prevención y control de infecciones. Además, durante la intervención quirúrgica el paciente literalmente depende del equipo, el cual debe conocer muy bien sus funciones, actuar en forma coordinada, cumplir con todas las normas existentes y estar capacitado para reducir al mínimo el riesgo de infección. Para esto, es importante que todos los integrantes del equipo participen y se comprometan de igual forma.
Áreas del recinto quirúrgico
Área no restringida: incluye oficinas, sala de informaciones y zona de entrada a la unidad quirúrgica, donde se permite el uso de uniformes de circulación general o ropa de calle.
Área semi-restringida: área intermedia entre el área restringida e irrestricta. Debe tener doble puerta de acceso, tanto para camillas como vestuarios, de forma de disminuir la contaminación con el aire no filtrado cada vez que se abren las puertas del área restringida.
Tabla 1-1
Efectos, ventajas y desventajas de antisépticos más frecuentes de uso hospitalario.
Área restringida: zona donde se encuentran los quirófanos, zonas de inducción anestésica y almacenamiento del material estéril. Se debe usar ropa exclusiva para pabellón, gorro que cubra completamente el cabello, mascarilla que cubra boca, nariz y vello facial, y calzado exclusivo, o en su defecto, botas o cubre-calzado.
Para poder controlar y disminuir los riesgos en el ambiente quirúrgico es importante comprender ciertas definiciones y/o procesos particulares.
Asepsia
Se define como la ausencia de microorganismos que causan enfermedad; libre de infección; exclusión de microorganismos.
La técnica aséptica se refiere al conjunto de medidas que evitan la contaminación microbiana del ambiente, y que se utilizan para proteger tanto al paciente como al personal.
Antisepsia
Prevención de la sepsis por exclusión, destrucción o inhibición del crecimiento o multiplicación de microorganismos de los tejidos, a través de la utilización de sustancias químicas. Se usan tanto para el lavado de manos como para limpiar la piel de la zona operatoria (Tabla 1-1).
Propiedades del antiséptico ideal:
• Reducir significativamente los microorganismos en piel intacta.
• Ser de amplio espectro de acción microbicida.
• Acción rápida.
• Poseer efecto residual y acumulativo.
• Baja toxicidad, no irritante.
• Baja inactivación por materia orgánica.
• Costo razonable.
Precauciones estándar
Corresponden al conjunto mínimo de medidas utilizadas para proteger a las personas del contacto con sangre y/o fluidos corporales. Se aplican en cada contacto con los pacientes, independiente de su diagnóstico, con el fin de minimizar el riesgo de transmisión de microorganismos. Contempla:
• Higiene de manos: medida básica más importante y costo-efectiva para evitar las infecciones cruzadas. Debe realizarse:
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