Manual de patología quirúrgica. Fernando Crovari Eulufi
– Después del contacto con pacientes.
– Después del contacto con la unidad del paciente.
• Elementos de protección personal: cuando existe exposición (o riesgo de exposición) a sangre, fluidos corporales, riesgo de salpicadura o aerosoles. Se agregan al lavado de manos:
– Uso de guantes.
– Mascarillas.
– Antiparras.
– Pecheras.
• Manejo de material corto-punzante: Las agujas, bisturíes e instrumentos punzantes representan un riesgo para el que los manipula y utiliza. Se recomienda:
– No manipular hojas de bisturíes con la mano.
– Utilizar una bandeja para entregar agujas o bisturíes en el campo quirúrgico.
– Ejecución adecuada de técnica de punción.
– Nunca re-capsular agujas.
– Eliminación correcta en caja específica de material corto-punzante (safebox: no llenar más de su capacidad, no mojar ni aplastar).
– La eliminación del material es de responsabilidad exclusiva del operador.
Accidentes en pabellón
Dentro del pabellón es el lugar donde ocurren más accidentes en el personal de salud en el ambiente hospitalario. A modo de ejemplo en el año 2012 del total de eventos reportados en el Hospital Clínico de la Universidad Católica (120) un 35% fue en el área de pabellones quirúrgicos. Entre los más importantes están:
• Punción con aguja no hueca: 42,9% de los accidentes en pabellón en el Hospital Clínico de la Universidad Católica, por ejemplo, sutura; como la aguja no es hueca, el riesgo de transmisión de enfermedades es menor.
• Punción con aguja hueca: 19% de los accidentes en pabellón en la UC, por ejemplo, trocar vía venosa.
• Salpicadura en mucosas: 23,8% de los accidentes en pabellón en la UC, especialmente en ojos, por lo que las antiparras son muy importantes.
• Cortes: 14,3% de los accidentes en pabellón en la UC, por ejemplo, por bisturí.
Limpieza, desinfección y esterilización
Estos tres elementos son claves para la prevención de infecciones.
Limpieza o descontaminación
Es la remoción mecánica de fluidos corporales o restos orgánicos de los objetos antes de su desinfección o esterilización, dejándolos seguros para su manipulación. Una limpieza adecuada por arrastre y enjuague disminuye la carga de esporas patógenas de las superficies, equipos y dispositivos médicos.
Desinfección
Proceso físico o químico que permite reducir el número de microorganismos patógenos sobre superficies y objetos inanimados, pero no asegura la destrucción de esporas. El tipo y nivel de desinfección depende del diseño, naturaleza y uso que se le dará al instrumental.
Dependiendo de su actividad microbicida, los desinfectantes se clasifican en:
• Desinfección de alto nivel: elimina todos los microorganismos incluyendo los virus resistentes y Mycobacterium tuberculosis, no actúa contra esporas. Las soluciones utilizadas actúan por contacto, pueden fijar la materia orgánica y requieren de un enjuague abundante con agua estéril o filtrada para eliminar todo residuo químico tóxico. La limpieza previa del equipo es una condición indispensable para garantizar el proceso. Se utiliza cuando constituye la única alternativa para reducir el riesgo de contaminación microbiana, pero no proporciona el mismo grado de seguridad que la esterilización.
• Desinfección de nivel intermedio: elimina formas vegetativas de bacterias, hongos y virus, pero no necesariamente todos los virus de tamaño pequeño no lipídico. No actúa contra esporas, incluso después de tiempos de exposición prolongados.
• Desinfección de bajo nivel: elimina bacterias patógenas vegetativas (excepto las micobacterias), algunos hongos y solo virus envueltos.
Esterilización
Proceso por el cual se destruyen todos los microorganismos patógenos y no patógenos, incluidas las esporas. Este proceso debe aportar el máximo nivel de garantía de que un producto está libre de microorganismos viables, es así que la FDA exige que los métodos de esterilización deban documentar que la probabilidad de encontrar un artículo no estéril en un conjunto de artículos sometidos al mismo proceso, es de una en un millón.
La esterilización y desinfección de los instrumentos clínicos son una pieza clave de los programas de prevención y control de infecciones. Estos no deben considerarse como “métodos de exposición a un agente microbicida”, sino que como un proceso donde cada una de sus etapas es importante y va a influir en los resultados: prelavado + lavado + secado + inspección + esterilización + traslado + almacenamiento.
Es importante destacar que tanto la esterilización como la desinfección se realizan después de un procedimiento invasivo y deben cumplir previamente con una adecuada limpieza y descontaminación que asegure la reducción sustancial de la “biocarga” (número relativo de microorganismos reales o estimados que se pueden encontrar en un objeto determinado) y de los residuos orgánicos, que pueden interferir con el proceso de esterilización y desinfección, y constituir un riesgo tanto para el personal que lo manipula como para los pacientes.
Métodos de esterilización:
La esterilización confiable depende del contacto de todas las partes del artículo a esterilizar con el agente esterilizante.
Los métodos de esterilización pueden clasificarse en:
• Altas o bajas temperaturas.
• Físicos o químicos.
Como método físico se encuentra el calor húmedo a presión (autoclave) y seco (horno Pasteur). Entre los químicos gaseosos está el óxido de etileno y formaldehído. Otra tecnología reciente es el plasma usado a partir de precursores de peróxido de hidrógeno y de ácido ascético (Tabla 1-2).
Monitorización del ciclo de esterilización:
Para garantizar que los objetos e instrumentos están estériles cuando se utilizan, es importante monitorizar el proceso:
• Monitorización administrativa: cada etapa del proceso debe estar protocolizada y ser supervisada.
• Indicadores mecánicos: son elementos incorporados al esterilizador como termómetros, manómetros de presión, sensores de carga, válvulas y sistemas de registro. Estos monitores físicos son de gran utilidad, pero no son suficientes como indicadores de esterilización. Deben ser calibrados periódicamente.
• Indicadores químicos: son productos comerciales consistentes en sustancias químicas que cambian de color si se cumple un elemento clave del proceso de esterilización, como por ejemplo la temperatura necesaria. Los indicadores químicos son diferentes de acuerdo al proceso utilizado (calor seco, húmedo o gas). Los indicadores químicos no confirman la esterilidad de un objeto, solo indican que un artículo ha sido expuesto a un proceso.
Tabla 1-2
Características y efectos de diferentes métodos de esterilización.
• Indicadores biológicos: son el mejor método para determinar la eficiencia de un proceso de esterilización. Están diseñados para confirmar la presencia o ausencia de microorganismos viables después de la esterilización. Consisten en esporas de