Corazones rotos. Amy Chan
decía el mensaje de Mike.
No hizo falta buscar mucho en Instagram para descubrir que había conocido a otra persona.
Las mujeres abren sus corazones con una historia tras otra, pidiendo disculpas por sus lágrimas. Incluso en medio de su dolor, muchas se sienten culpables, como si sus emociones fueran una carga para el grupo.
Jenny estaba en una relación intermitente con un adicto. Ella sabía que, lógicamente, la relación no era saludable, pero no podía resistirse a volver con él cada vez que reaparecía. Esto duró ocho años.
El primer marido de Cindy abusó físicamente de ella. Su siguiente novio era emocionalmente abusivo y la vigilaba todo el tiempo, acusándola de ser infiel cuando no lo era. Ella seguía esperando que él cambiara, pero nunca sucedió. No fue hasta que amenazó con matarla que ella se dio cuenta de que él era, en realidad, tan peligroso como su exmarido, si no es que más.
Teresa deseaba tanto un marido y una familia que estaba dispuesta a conformarse con cualquiera que pareciera agradable y estable. Debido a que se ponía ansiosa cuando salía con los hombres que le gustaban, se conformó con un novio con el que no tenía química, con la esperanza de que la atracción creciera, pero nunca pasó.
Karolina tenía relaciones falsas. Ella le daba al chico que le gustaba la experiencia de comportarse como su novia sin que él se comprometiera a ser su novio. Ella seguía dando y dando con la esperanza de un compromiso que nunca llegó.
Todas estas relaciones eran poco saludables pero, aun así, cada una de las mujeres estaba devastada por su ruptura. ¿Por qué?
Independientemente de la situación, la edad o los antecedentes, todas tenían una cosa en común. En su mente, habían adoptado un modelo de relación lineal que progresaba de la siguiente manera: salir, mudarse juntos, casarse, tener hijos, estar juntos para siempre. Ese plan indicaba “éxito”, al menos a los ojos de la sociedad en general. Harían todo lo posible para mantener ese plan intacto, incluso si eso significaba soportar el abuso y sacrificar sus propias necesidades.
Después de otras exploraciones con cada una de las participantes de Renew, resultó evidente que la mayor fuente del dolor en torno a sus rupturas no era el ex y ni siquiera la relación: era la destrucción de su plan sagrado.
Yo no era diferente. Estudiaba a cualquier chico que me gustara para ver si podría convertirse en un potencial novio/esposo/padre. En el modo de conquista, nunca estuve por completo presente, porque siempre me encontraba ansiosa por dar el siguiente paso en la progresión de mi plan. Me “enamoraba” rápidamente, antes de conocer en verdad a alguien (más tarde aprendería que eso era obsesión o enamoramiento de revista, pero no amor). Colocaba al chico en cuestión en el plan que tenía en mente, sin ponerlo al tanto, por supuesto. La mitad de las veces, ni siquiera me gustaba el chico, sólo la idea de él. La fantasía en verdad puede confundirte.
Cada vez que mi “felices para siempre” se derrumbaba, me sentía devastada. ¿Estaba “rota” porque había perdido a mi Príncipe Azul? No, lo estaba porque mi identidad giraba en torno a la relación y al plan al que me aferraba con vehemencia.
Cuando estamos atadas a un plan no tenemos la flexibilidad para adaptarnos y nos podemos romper. Uno de los primeros pasos para recuperarse de una ruptura es aceptar que el plan que tienes para tu vida puede cambiar y cambiará, y que debes estar dispuesta a adaptarte.
Para ayudar a las participantes de Renew a comprender esta noción, las mujeres deben seguir un programa que comienza desde las 8:30 de la mañana y se extiende hasta las 11:00 de la noche, como si fuera un campo de entrenamiento. Este programa intensivo está diseñado para ir más allá de los límites de la comodidad y crear la sacudida emocional necesaria para implantar nuevas ideas. Después de todo, estamos lidiando con décadas de patrones destructivos. Muchas de las mujeres que vienen a Renew, como yo, lo han intentado todo. Renew Breakup Bootcamp es su último recurso.
Debido a que la verdadera sanación requiere un enfoque por completo holístico, que abarque la mente, el cuerpo y el espíritu, en Renew una psicóloga aborda a profundidad la regulación emocional, las creencias cambiantes, la autocompasión y las herramientas de la terapia cognitiva conductual. Una experta en ansiedad enseña conocidas y comprobadas prácticas diseñadas para calmar el sistema nervioso, y una coach de citas explica la adicción al amor y cómo romper el ciclo. Una maestra de programación neurolingüística e hipnotista conduce a las mujeres hacia un viaje meditativo para acceder a su niña interior. A nivel somático, una mediadora utiliza técnicas africanas sagradas y seculares para ayudar a las mujeres a procesar la ira y la ansiedad a través y fuera del cuerpo. Una doctora especializada en medicina holística les imparte una serie de ejercicios de respiración para ayudarlas a liberar el trauma almacenado y los bloqueos energéticos en el cuerpo. Una educadora sexual enseña ejercicios de movimiento para activar su energía sensual y reconectarse con su cuerpo. El punto culminante del fin de semana llega el domingo, cuando una dominatrix profesional enseña la psicología de la dinámica del poder. También se ofrecen sesiones privadas con sanadoras de energía, coaches de vida y médiums intuitivas. La experiencia del campo de entrenamiento está diseñada de manera meticulosa para guiar a las asistentes a través del proceso de aceptación, olvido, perdón y gratitud: todos los elementos importantes del cierre.
Es posible que no puedas asistir a un retiro físico, pero considera este libro como la biblia del campo de entrenamiento. Se han extraído todos los métodos comprobados, las mejores prácticas y herramientas para ayudarte a experimentarlo desde la comodidad de tu hogar.
Y una nota para todas las lectoras: aun cuando este libro está escrito como si se dirigiera sólo a una audiencia femenina, la información se aplica a cualquier persona que haya sufrido alguna vez un dolor y quiera derrumbar patrones inútiles, sin importar la identidad de género u orientación sexual.
Cuando una puerta se cierra, otra se abre; pero solemos mirar durante tanto tiempo y con tanto pesar la puerta cerrada que no vemos las que se abren para nosotros.
Alexander Graham Bell
Antes de comenzar el proceso, necesitamos lamentar y llorar el pasado de manera adecuada. Para lograrlo, es útil comprender en qué etapa de duelo te encuentras.
ETAPAS DE SEPARACIÓN
El duelo por la pérdida de una relación puede parecerse mucho al luto por alguien que ha fallecido.
El duelo tiene seis etapas, sin importar cuál sea la fuente de ese dolor. Recuerda, la línea de tiempo para superar el duelo no siempre es lineal. Habrá días en los que sientas que ya superaste el dolor y estás lista para abrazar tu nueva vida, sólo para encontrarte catatónica y afectada por algún factor desencadenante al día siguiente. Esto puede parecer un revés, pero es una parte natural del proceso. Aquí están las seis etapas del duelo o, en este contexto, de la separación.
Conmoción: ésta tiene lugar tanto a nivel físico como psicológico. Físicamente, una oleada de adrenalina recorre el cuerpo, lo que puede hacer que te sientas nerviosa, mareada y fuera de ti.1 Psicológicamente, puedes sentirte perdida, aterrorizada, abrumada e inundada de emociones intensas. Ésta es la protección natural que tu cuerpo activa contra el dolor. Tu cuerpo no se ha adaptado todavía a una nueva realidad sin tu pareja. Una vez que comienzas a procesar lo que sucedió, llegas a la siguiente etapa: la negación.
Negación: en esencia, se trata de un rechazo hacia la realidad. Cuanto antes aceptes la realidad —que la relación terminó—, comenzarás el proceso de sanación más pronto.
Depresión: el primer paso para la sanación es la depresión. Te sientes triste, apática y torpe. Todo te recuerda a tu ex y los momentos que compartieron. En esta etapa, tu inclinación natural puede ser aislarte, pero ahora es importante que aceptes el apoyo de tus seres queridos.
Ira: la vida te parece injusta y abusiva. Te preguntas por qué te está pasando esto y tal vez incluso te moleste que tu ex no parezca estar pasando por tanto dolor. La ira indica que la energía se está moviendo, lo que puede motivarte