La música que agrada a Dios. Daniel Oscar Plenc
Los victoriosos estaban “[...] en pie sobre el mar de vidrio, con las arpas de Dios. Y cantan el cántico de Moisés siervo de Dios, y el cántico del Cordero, diciendo: ‘Grandes y maravillosas son tus obras, Señor Dios Todopoderoso; justos y verdaderos son tus caminos, Rey de los santos’” (15:2, 3). Los victoriosos sobre los enemigos tienen “arpas de Dios” (5:8; 14:2). El “cántico de Moisés” es el cántico de liberación de los egipcios que se entonó después de que cruzaran el mar Rojo (Éxo. 15:1-21); el “cántico del Cordero” celebra la liberación de “Babilonia la grande” (Apoc. 17:5).58
Thomas Allen Seel señala algunas cualidades de esta música del Apocalipsis: (a) Hay un crescendo en la participación de los coros celestiales; (b) se observa una asombrosa unidad; (c) la adoración es genuinamente congregacional, y (d) la música es triunfante.59 Algo similar escribió Lilianne Doukhan: “Otro modelo bíblico de música para la adoración nos viene del libro de Apocalipsis”. Las características destacadas por la autora son las siguientes: (a) música enfocada en Dios, (b) organizada y espontánea, (c) posee diversidad y unidad, (d) tiene carácter positivo.60
Conclusión
Esta mirada rápida a la música en la Biblia permite entender ciertas cosas con claridad: (a) La música es un tema bíblico con abundante cantidad de referencias, e importante en la vida del pueblo de Dios. (b) La música puede servir para el bien, a fin de expresar sentimientos devotos y positivos, o para el mal. (c) Los grandes hechos de Dios, como la Creación, la redención y la restauración final, son acompañados por música. (d) La buena música, en las Escrituras, es una actividad espiritual e intelectual, social y participativa, profundamente emotiva, edificante, centrada en Dios y en Cristo.
Alfred Küen hace una buena síntesis de las revelaciones bíblicas acerca de la música: “(1) La música es, al menos, tan antigua como la humanidad. (2) Desde el principio, el canto se acompañó con diversos instrumentos. (3) El canto y la música instrumental han jugado un gran papel en la vida de Israel. Constituían la principal actividad artística de ese pueblo. (4) Todas las ceremonias, todos los aspectos de la vida cotidiana, estaban enmarcados por el canto y la música, que expresaban adoración y gratitud, alegría y dolor, amor y odio. (5) Todos los aspectos de la música actual […] se encuentran ya en la Biblia, y están asociados al culto. (6) El carácter de la música instrumental hebrea era generalmente gozoso, pero no ruidoso. La orquesta estaba compuesta por una mayoría de instrumentos de cuerdas. Las trompetas solo eran tocadas por los sacerdotes y servían, principalmente, como llamadas sonoras [...]. (7) Frecuentemente, los cantos eran de tipo canto-respuesta, o de tipo antifonal. (8) Toda la Biblia era cantada. (9) Aparte de las músicas consagradas a Dios, la Biblia menciona, también, músicas maléficas, destinadas a arrastrar hacia la idolatría y la inmoralidad. (10) El canto cristiano ha conservado las principales características del canto sinagogal hebreo. Los cantos de los primeros cristianos eran variados, esencialmente orientados hacia la alabanza”.61
Sin procurar todavía elaborar una teología bíblica de la adoración, se ha observado el panorama de la música en las Escrituras; panorama que demanda una descripción más detallada de los instrumentos de la Biblia.
10 Doukhan dedica la segunda parte de su libro In Tune With God a la música en la Biblia y en los escritos de Elena de White, se extrae de estas fuentes principios y lecciones para la música de la iglesia actual (pp. 80-142).
11 Küen, La música en la Biblia y en la iglesia, p. 13. Frank Garlock refiere a un cómputo de “más de 500 referencias específicas a la música en la Biblia”. “El lenguaje de la música”, seminario transmitido por la BBN (Bible Broadcasting Network).
12 Küen, ibíd., p. 14.
13 Nichol, ed., t. 1, p. 255.
14 Todo el cántico de Moisés se registra en Éxodo 15:1 al 18.
15 Hustad, ¡Regocijaos!: la música cristiana en la adoración, p. 147.
16 Cantará o responderá (heb. anah). “Cuando el antiguo Israel ‘en los tiempos de su juventud’ cruzó el Mar Rojo, cantó el himno de victoria de Moisés (Éxo. 15); así también Israel cantaría por su liberación. ‘Responderá’ encierra el pensamiento de que Israel reconocía con agradecimiento las pruebas del amor de Dios, y procuraba ahora cumplir con la voluntad divina” (Nichol, ed., t. 4, p. 918).
17 La versión Reina Valera Revisada (RVR) traduce como “instrumentos de música” (1 Sam. 18:6) la expresión hebrea shalishim, de traducción no segura. La Biblia de Jerusalén la vierte como “triángulo” porque el hebreo shalosh significa “tres” y shelishi, “tercero” (Nichol, ed., t. 3, p. 34).
18 Ibíd., t. 1, pp. 679, 680.
19 Ibíd., t. 1, pp.871, 943.
20 Nichol, ed., t. 2, pp. 201.
21 Küen, La música en la Biblia y en la iglesia, p. 19.
22 Nichol ed., t. 3, p. 198.
23 Ibíd., p. 249.
24 Ibíd., p. 338.
25 “En la lista de los que volvieron con Esdras, figuran de nuevo las mismas seis categorías de personas que, según el relato anterior (cap. 2, p. 70), habían acompañado a Zorobabel. El orden en que aparecen es casi el mismo” (ibíd., p. 367). El séptimo año de Artajerjes I fue 458-457 a. C.
26 “La enumeración de los diferentes grupos humanos es igual a la de Esd. 2:70” (ibíd., p. 436).
27 “Uzi era el jefe de los cantores del templo” (ibíd., p. 441).
28 Ibíd., t. 3, p. 558.
29 Hustad, ¡Regocijaos!: la música cristiana en la adoración, p. 152; Gerald A. Klingbeil, “La teología de la música sacra”, La música en la iglesia, vehículo de adoración y loor, ed. Departamento de Música de la División Sudamericana, p. 19.
30 Doukhan, p. 101.
31 Véanse, como ejemplo, los siguientes pasajes: Sal. 7:17; 9:2, 11; 13:6; 18:49; 21:13; 27:6; 28:7; 30:4, 12; 32:7, 11; 33:2, 3; 35:27; 40:3; 42:8; 45:1; 47:5-7; 57:7-9; 59:16, 17; 61:8; 65:13; 66:2, 4; 68:4, 32; 69:30; 71:22, 23; 75:9; 77:6; 79:13; 81:1-3; 84:1, 2; 89:1, 12; 90:14; 92:1-3; 95:1, 2; 96:1, 2; 98:1, 4-6; 100:1; 101:1; 104:33; 105:2; 106:12; 108:1-3;