Debates de la cooperación latinoamericana. Silvana Insignares Cera
y Chile y se decidió negociar con Centroamérica y con la Comunidad Andina, a la vez que se aprobó mencionar lo que significaba la Ley Helms Burton (sobre el embargo y bloqueo económico de Cuba dictada por Estados Unidos) contra el multilateralismo.
Por su parte, en la Cumbre de Lima de 2008, tuvo como uno de sus resultados destacados crear una fundación ALC-UE como espacio permanente de diálogo birregional de deliberación y visibilidad de estrategias comunes; además, tres conceptos dominaron las conclusiones: 1) el mejor programa social es la inversión productiva, 2) la necesidad de brindar seguridad jurídica a la inversión con marcos legales estables y 3) flexibilidad para hacer realidad los esquivos acuerdos comerciales con Centroamérica y CAN (utilizando mecanismos de múltiples velocidades). Además, se evidenció el interés de la UE por desarrollar una relación especial con Brasil (Tremolada, 2009).
En la Cumbre de 2010, que repitió a Madrid como sede, si bien se pretendía que la innovación y la tecnología estuvieran en favor del desarrollo sostenible y de la inclusión social como una nueva etapa en la asociación birregional, en la Declaración se reitera el compromiso con valores e intereses comunes de la asociación estratégica birregional, el multilateralismo, la democracia, los derechos humanos, la cooperación al desarrollo, la integración, el apoyo a la cohesión social, la protección del medio ambiente, y la lucha contra el terrorismo y la delincuencia organizada. No obstante, además de la Declaración, se obtiene como producto adicional, un Plan de Acción 2010-2012, que define una agenda orientada al futuro de la cooperación birregional, en ámbitos prioritarios como el desarrollo del “espacio UE-ALC del conocimiento”, el fomento de la interconectividad, el desarrollo de redes sociales y económicas, y la intensificación de los diálogos temáticos y la cooperación sobre migraciones, drogas, educación y cohesión social. Este Plan, así como el acuerdo de creación de la Fundación Alcue anunciada en Lima podrían traducirse en útiles instrumentos de seguimiento y concreción (Del Arenal y Sanahuja, 2010).
En 2013, la Cumbre de Santiago, titulada “Alianza para el Desarrollo Sustentable: Promoción de Inversiones de Calidad Social y Ambiental“, venía a fomentar las inversiones de calidad social y medioambiental, con dos expectativas: primero, una participación en grupo por el lado latinoamericano, bajo el paraguas de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac)3 y, por el otro, la ampliación temática del Plan de Acción 2010-2012, con capítulos sobre igualdad de género y sobre inversiones. Las discusiones se centrarían en el comercio y la inversión, la seguridad jurídica, el desarrollo sostenible y la responsabilidad social de las empresas. Además, se esperaba una obvia Declaración sobre la escena internacional, el proceso de asociación birregional y la promoción de las inversiones económicas, sociales y medioambientales de calidad (Comisión Europea).
La Declaración de Santiago (Consejo de la Unión Europea, 2013) recoge el esfuerzo —aunque no de síntesis— de incluir las dos expectativas enunciadas en el párrafo anterior y que se trabajan en cuatro apartados. El primero, dedicado al nuevo diálogo Celac–UE, es considerado con optimismo como un espacio más eficaz, constructivo, simétrico, complementario y solidario. En segundo lugar, son abordados los valores compartidos y las posiciones en el ámbito internacional y multilateral, donde fundamentalmente se reafirman principios imperativos del derecho internacional y, además, el compromiso de adoptar políticas que promuevan el comercio y la inversión para contribuir al desarrollo sostenible, crecimiento económico y empleo, basados en la cooperación, la solidaridad y la responsabilidad ambiental diferenciada.
El tercer apartado se refiere a los avances en el proceso de asociación estratégica birregional, incluyendo los esperados capítulos de género e inversión en el Plan de Acción 2013-2015 y estudiando la incorporación de otros, que cubrirían áreas de seguridad pública, seguridad alimentaria y nutrición. Hasta ahí lo novedoso, luego este largo apartado se refiere a la aplicación provisional de los acuerdos comerciales con Perú, Colombia y Centroamérica; la continuidad de negociaciones UE-Mercosur, para dotar de contenido comercial su acuerdo de asociación; se sigue apoyando la Estrategia de Seguridad Regional Centroamericana; se aprueba celebrar un Acuerdo Cultural entre la UE y Perú; así como la creación en Hamburgo de la Fundación Alcue4, y se espera que el próximo ciclo de cooperación 2014-2020 tenga en cuenta las prioridades de los Estados Celac dando preferencia a los proyectos que respondan a las tres dimensiones del desarrollo sostenible. Para concluir, dedica un apartado a la alianza para el desarrollo sostenible: Promoción de inversiones sociales y de calidad ambiental, entendiendo que el crecimiento económico debe proteger el medio ambiente, promover la equidad social y la inclusión. Y se deja un expreso reconocimiento de que esto requiere de la cooperación para aprovechar las complementariedades de ambas regiones.
La última Cumbre, de 2015, se llevó a cabo en Bruselas. Su rótulo fue: “Modelar nuestro futuro común: trabajar por unas sociedades prósperas, cohesivas y sostenibles para nuestros ciudadanos”. La Declaración se divide en cuatro partes: la primera, dedicada a los “Retos globales: modelar nuestro futuro común”; una segunda, a la Asociación Birregional: «Trabajar juntos por unas sociedades prósperas, cohesionadas y sostenibles para nuestros ciudadanos», seguida por “Un Plan de Acción Birregional Actualizado”, para finalizar con el “Futuro de la Asociación”.
De la primera parte, además de las reiteraciones de respeto a los principios y normas del ordenamiento internacional, se destaca la invitación a que todos los Estados ratifiquen y cumplan sus obligaciones de derecho penal internacional (Estatuto de Roma); también lo concerniente al respeto y protección de las minorías, en especial, de los pueblos indígenas. Hablan del Tratado sobre el Comercio de Armas, que es el primer instrumento multilateral jurídicamente vinculante relativo al comercio de armas, que incluye en su ámbito de aplicación las armas ligeras y de pequeño calibre. Con este instrumento jurídico de derecho internacional se espera:
[…] Dar una respuesta eficaz a las graves consecuencias del tráfico ilícito y no reglamentado de armas para muchas personas y numerosos Estados, en particular mediante la desviación de armas a agentes no estatales, usuarios no autorizados, a menudo vinculados a la delincuencia organizada transnacional y al tráfico de drogas. Asimismo esperamos que este Tratado contribuya a la prevención de los conflictos armados, la violencia armada y las violaciones del derecho internacional (Consejo Europeo, 2015).
A la vez se resalta lo referente a la reestructuración de la deuda soberana de los Estados y las dificultades producidas por el declive económico, como situaciones de falta de liquidez y cesación de pago, frente a lo cual es factible el uso de la acción colectiva y de la cláusula pari passu5. Por otro lado, se hace un llamado a la comunidad internacional para que consolide los acuerdos de la Ronda de Desarrollo de Doha con el fin de fortalecer el comercio internacional a instancias de la OMC. De esta primera parte no sobra destacar la mención que se hace de las migraciones entre las regiones, de los desafíos que impone, pero también de las oportunidades que auspicia.
En la segunda parte, es preciso destacar la mención y el apoyo que se da al proceso de paz en Colombia. Al respecto, se declara:
Animamos al Gobierno colombiano y a las FARC-EP a que se esfuercen al máximo para que estas negociaciones concluyan cuanto antes, y expresamos nuestra disposición a prestar asistencia para respaldar la aplicación de un acuerdo general de paz. La UE y sus Estados miembros trabajan para crear un fondo fiduciario en apoyo de la fase posterior al conflicto. Apoyamos firmemente los esfuerzos del Gobierno colombiano y de las FARC-EP, que intentan reconciliar al pueblo colombiano a fin de alcanzar una paz estable y duradera en Colombia y tener en cuenta los derechos de las víctimas del conflicto armado. Confiamos además en que las conversaciones oficiales entre el Gobierno de Colombia y el ELN den comienzo lo antes posible” (Consejo Europeo, 2015).
También se destaca el inicio del desbloqueo y fin del embargo a Cuba, con su consecuente modernización a futuro. Sobre el particular, se menciona el inicio de conversaciones entre la UE y Cuba a principios de 2014 sobre un acuerdo de diálogo político y cooperación. Además, de celebrar el establecimiento de relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos, reafirman:
(…) El rechazo de las medidas coercitivas de carácter unilateral, así como sobre la aplicación de las disposiciones extraterritoriales de la Ley Helms-Burton.