Dirección y dinamización de actividades de entrenamiento en sala de entrenamiento polivalente. AFDA0210. Juan Octavio Domínguez Castilla
los hombres muestran una motivación orientada al logro.
Entre las mujeres que se acercan a la práctica deportiva en las instalaciones de fitness, los motivos prácticamente son la pérdida (o mantenimiento) de peso y la mejora de la imagen corporal. Otro aspecto importante en esta edad en las mujeres es la función social y relacional, cuya cuestión se tratará más adelante.
Adultos
Corresponde aproximadamente a los 30-55 años. El acotamiento según rango de edad en este apartado no es una distinción exacta, matemática, ni científica, ya que cada persona envejece a un ritmo y se pueden encontrar hombres de 45 años con peores condiciones físicas y psicológicas que otros de 65, ya que depende de diferentes experiencias vitales y del deporte que haya realizado cada individuo en el pasado.
Como características generales en esta etapa se pueden encontrar dos bloques diferenciados, en función de la madurez del adulto:
1 Los adultos maduros. Se adaptan bien a la vida social, cultural y deportiva. Son capaces de controlar su vida emocional, afrontan los problemas con serenidad, reconocen sus límites y sus capacidades y con ello tienen una percepción correcta de la realidad, lo que les hace actuar con una mayor eficacia y responsabilidad.
2 Los adultos menos maduros o “inmaduros”. En ocasiones, son incoherentes y contradictorios en su comportamiento y, al contrario que los adultos maduros, no controlan su vida emocional ni perciben la realidad tal y como es. Por último, les cuesta más adaptarse a la vida social.
De nuevo se encuentran diferencias de sexo entre los usuarios de las instalaciones de fitness. Así, según un estudio de Frederick y Ryan (1992), se demostró que los adultos varones en estas edades muestran un mayor interés por la práctica cuando se desarrolla de forma individual (en máquinas o peso libre) y hacia el trabajo de fuerza que frente al trabajo aeróbico (básicamente trabajado en sesiones de fitness grupales), al contrario que las mujeres, que prefieren un trabajo aeróbico y de tonificación en sesiones grupales.
Estos datos no son absolutos, es decir, ni todos los hombres quieren realizar trabajos individuales de fuerza ni las mujeres quieren hacer fitness aeróbico exclusivamente. Hoy día se observa en las salas de entrenamiento que esas estadísticas se van rompiendo y aparecen nuevas modalidades y necesidades en los clientes de este rango de edad que acuden a un centro. Estos deben expresar cuáles son sus gustos e inquietudes para que se les pueda orientar hacia un trabajo óptimo y adecuado.
Actividades
1. Señale quiénes realizan más actividades deportivas en su etapa de juventud.
2. Enumere los grandes cambios psicológicos y sociales que se producen en la adolescencia.
3. Responda y justifique por qué motivos se produce el abandono masivo del deporte por parte de las mujeres en el periodo de la juventud.
Adulto mayor (más de 55 años)
Es un tipo de usuario muy delicado por sus peculiares características e incluso en alguna bibliografía se le define como población especial por su necesidad de tratamiento adaptado y diferente. También es muy exigente a la vez que muy agradecido, comentario cada vez más extendido en los gimnasios y Salas de Entrenamientos Polivalentes.
Los adultos mayores que tuvieron una etapa anterior calificada como de “inmaduros” presentarán características psicosociales tales como la desconfianza (hacia el deporte y hacia los compañeros), la crítica continua a todo, el egoísmo y el trato agrio y distante con sus iguales.
Por el contrario, los mayores que han desarrollado una etapa adulta madura son capaces de adaptar y asimilar mejor todas las situaciones, tienen mejor humor, son exageradamente optimistas, generosos y agradecidos en el trato.
Es una etapa en la que predomina la pérdida de fuerza en los individuos y la delicadeza de su salud. También puede darse un progresivo descenso de la actividad mental. En esta fase se empieza a perder un poco de interés por las cosas de la vida. Se vive más de lo que fue el pasado que de lo que les va a deparar el futuro. Aparece cierta tristeza que debe ser combatida, y un buen medio para hacerlo es la práctica de actividades físicas orientadas al ocio y a la salud.
Aquí existen menos diferencias entre hombres y mujeres en cuanto a la motivación o cuestiones que los acercan a practicar deporte. El motivo principal de la práctica deportiva en esta población no es otro que la salud.
No solo la salud física es lo que buscan los hombres y mujeres mayores que acuden a un centro deportivo, sino también la salud psicológica y la social/relacional.
Se debe tener claro que todas las sesiones y, es más, todos los objetivos de la planificación del trabajo con estas edades deben satisfacer la consecución de esos tres pilares fundamentales en la salud de los mayores: el aspecto físico (mejoro las condiciones, me equilibro mejor, me oriento, mejoro articulaciones, tensión arterial, etc.), el aspecto psicológico (me siento más animado, me motivo a hacer cosas, me siento útil, me siento capaz conociendo mis limitaciones, me atrevo con algo más, etc.) y el aspecto social/relacional (me apetece salir, me uno a mis iguales, tengo y siento el contacto con ellos, escucho y me escuchan, etc.).
Actividades
4. Usted está ante el reto de realizar actividades para un colectivo de personas adultas. Indique qué tipo de ejercicios les recomendaría y por qué.
2.2. Bases de la personalidad
¿Qué es lo que hace único al ser humano? Lo que le diferencia de los demás. Pues eso es la personalidad, un rasgo que le diferencia de otros; algo suyo, único, personal e intransferible de la persona, de su forma de ser. Esta es una definición sencilla, adaptada y alejada de términos teóricos abstractos, pero de fácil entendimiento.
La personalidad no varía en una misma persona, lo que produce el fenómeno de la previsibilidad, y esto hace que se pueda predecir cómo va a reaccionar alguien ante un determinado hecho si se le conoce bien.
Cuando se define a una persona como individuo se hace referencia a dos aspectos: por un lado, que es algo indivisible, que todos sus aspectos están relacionados y no tiene sentido conocerlo si no se hace por completo; y, por otro lado, que es distinto a otros individuos, que es algo diferente.
Paradigmas sobre la formación de la personalidad hay muchos. Se resume aquí el del Doctor Rojas Bermúdez (2005), quien dice que al nacer, al llorar, al abrirse los pulmones (que es cuando se tiene la sensación de existir) se viene con una estructura genéticamente programada. Fuera del bebé existe otra estructura genéticamente programada (que puede ser la madre) que se ensambla con la del niño. De la relación entre ambos se desarrolla la base de la personalidad, lo que llama la huella mnémica.
El núcleo del yo se establece, según diversos autores, entre los cero y los dos años, y lo que se genera en ese periodo se queda hermético en el ser humano, llegando a conformarse como lo más estable de la personalidad. Es la marca de uno mismo, la manera de afrontar el mundo, de enfrentarse a los problemas y relacionarse con los demás. A partir de ahí, todo lo que se va adquiriendo son roles, que son variables y pueden ir cambiando con los años y las experiencias.
Esto sirve para introducir dos conceptos que, aunque muy diferentes en su concepción, son comúnmente confundidos en su uso, como son los términos de carácter y temperamento:
1 Carácter: la personalidad es algo relativamente estable, sin embargo, a largo plazo, sí se cambia parte de la misma. Dentro de esta hay algunos aspectos más superficiales y más sociales que serán