La izquierda mexicana del siglo XX. Libro 3. Arturo Martínez Nateras
Una autocrítica: los noventa son los nuevos sesenta
CONFLICTOS, REVUELTAS, MEMORIAS DE LUZ
La cámara doble: Fotografía de izquierda en México
COMPENDIO DE “LA IZQUIERDA EN EL CINE MEXICANO DEL SIGLO XX”
La libertad que fragua la escucha
You say you want a revolution? El rock mexicano en situación
LA INFAMIA, LA ESTÉTICA, LA TIERRA, LA EMANCIPACIÓN
Retrato del Presidente Benito Juárez
ANEXO LA RUTA DE LA IZQUIERDA EN EL CENTRO HISTÓRICO DE LA CIUDAD DE MÉXICO
LA IZQUIERDA EN EL CENTRO HISTÓRICO DE LA CIUDAD DE MÉXICO
LUGARES Y ESPACIOS DE LA RUTA DE LA IZQUIERDA
PRESENTACIÓN
ARTURO MARTÍNEZ NATERAS
El libro 3. Artes y humanidades, aparece después del fragor de la sucesión presidencial de 2018, del cincuentenario del movimiento estudiantil de 1968. Conmemoramos el centenario del Partido Comunista Mexicano, de la Internacional Comunista y del asesinato de Emiliano Zapata.
En México principia un nuevo sexenio con decisiones tan polémicas y contradictorias como plenas de esperanza, de expectativas, ilusiones y decepciones. Todo está a discusión.
¿Logrará el nuevo gobierno encauzar una nueva revolución cultural mexicana, latinoamericana y universal? Ésta será la verdadera cuarta transformación. Los debates son intensos, diversos y apasionados; las resistencias y los escándalos, mayúsculos. ¿Revolución cultural? Las artes y las humanidades ocupan un lugar central en la polémica. México es un escenario de diálogo y nada nos es ajeno. De los creadores, de la inteligencia nacional, de los trabajadores de las artes también dependerá la transformación, la revolución del siglo XXI.
Existe un interés creciente por el marxismo, por su conocimiento, difusión y elaboración teórica. Proliferan las obras sobre el marxismo en México y en el mundo.
Nuestro país está en el umbral de una nueva transformación. Los resultados en las urnas son fruto del ejercicio libre de la soberanía popular. La sociedad optó por un cambio de régimen, contra los privilegios, la corrupción, la impunidad y la violencia, y por una nueva cultura de convivencia y de gobierno, de innovación en las relaciones entre ciudadanos con el Estado, entre los miembros de la sociedad entre sí y con instituciones transformadas.
Aspiramos a entregar nuestra contribución a la búsqueda de respuestas y alternativas a los grandes asuntos nacionales y a las inquietudes de nuestra era y de la nueva sociedad, del México justo que merecemos y anhelamos.
Es un placer ver, hojear, contemplar y sobre todo leer un libro como el que presentamos en estas líneas. La gráfica concentra diferentes momentos de la vida del siglo XX con las creaciones y actos de la izquierda mexicana. Hojearlo, simplemente hojearlo deleita los sentidos y satisface el alma. Logramos dar un pequeño gran salto, una integral de ensayos que pueden ser insumos para futuros desarrollos, para nuevas y superiores aportaciones.
ARTES Y REVOLUCIONES
Las revoluciones, si lo son, trasforman de raíz el conjunto de relaciones económicas, políticas y sociales, especialmente los pilares de la hegemonía. El siglo de las revoluciones: la mexicana, la rusa, la china, la cubana y con ellas la Guerra Civil española, las guerras mundiales, los procesos de liberación nacional en África, la insurgencia en América Latina, la Guerra de Vietnam en toda la península de Indochina, la revolución juvenil del 68, el triunfo y el ensayo de la Unidad Popular que llevó a Salvador Allende a la victoria, con el desenlace del golpe de Estado en complicidad con la CIA, la misma Guerra Fría y los avances de los comunistas en Europa, todos y más son acontecimientos que dieron luz a una verdadera revolución cultural con estilos, escuelas y modalidades en todas las artes y en sus diferentes expresiones; en la educación, en general en las humanidades. Los cambios fueron universales, internacionales, concatenados. La cultura y las artes, el conocimiento y las humanidades no tienen fronteras y mucho menos desde la perspectiva de la izquierda internacionalista.
Se puso de moda una discusión, entre estéril y ociosa sobre las relaciones de dependencia entre los muralistas mexicanos con los soviéticos y si fue la revolución soviética la que influyó en la mexicana o al revés. Podemos pensar que las influencias fueron mutuas, unas con mayor fuerza por la dimensión de los creadores y de los movimientos.
Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros, José Clemente Orozco, José Chávez Morado, Alfredo Zalce, Mario Orozco Rivera, Octavio Paz, Juan de la Cabada, José Revueltas, Mayakowski, Pablo Neruda, Miguel Hernández, Federico García Lorca, Rafael Alberti, Picasso, Dali, Efraín Huerta, José Emilio Pacheco para únicamente mencionar a algunos, son artistas universales.
La Revolución cubana trazó una línea mundial de lucha en el terreno de las ideas y de las artes; de la cultura. ¿Es posible imaginar el boom latinoamericano sin la Casa de las Américas, Gabriel García Márquez, Julio Cortazar, Carlos Fuentes, al mismo Vargas Llosa sin la Revolución cubana y el apoyo que les prestó hasta catapultarlos? Tampoco a la nueva trova sin Pablo, Silvio y sus relaciones con Alfredo Zitarroza, los Quilapayún, Alí Pimera, Eugenia León, Víctor Jara… Y a pesar de una ofensiva deliberada y de los extravíos propios, la cultura y las artes siguen hermanadas a los movimientos sociales y políticos de cada una de sus sociedades.
IZQUIERDA Y CULTURA
La izquierda mexicana del siglo XX es cultura. La cultura existe en la izquierda, es fundamentalmente de izquierda. La izquierda mexicana del siglo XX hizo de la cultura y de las artes su ser, su existir.
La huella mas honda y duradera de la izquierda del siglo XX se marcó en la cultura, en las artes, en la educación, en las ciencias y en las humanidades. Es una fusión mucho más que mimética. El mejor legado de la izquierda mexicana del siglo XX es cultural. La revolución cultural de la Revolución