El Imperialismo, fase superior del capitalismo. V. I. Lenin

El Imperialismo, fase superior del capitalismo - V. I. Lenin


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luchas sociales y políticas de los traba­jadores y los pueblos oprimidos de todos los países del mundo que las enfrentan, delimitando los campos en­tre los oportunistas y los revolucionarios, como lo seña­ló Lenin en su momento.

      Eugenio Gastiazoro

      El Imperialismo hoy

      El imperialismo, la burguesía financiera imperialista transita el camino de su ocaso. Dejando al desnudo el ver­dadero carácter, rapaz y parasitario del capital financiero. Ha subyugado y puesto bajo su dominio a todos los es­tados burgueses de los países desarrollados y sus vasallos. Intenta imponer al mundo las leyes dictadas por sus ban­cos y sus corporaciones transnacionales, a través de trata­dos o por la fuerza de sus ejércitos. Lo hace en un contexto de un desarrollo capitalista desigual, en lo económico, en lo social y en lo político militar. Por tal razón se enfrenta a países y burguesías que se oponen a sus planes de “nue­vo reparto del mundo”, que cuestionan su “excepcionali­dad” y que no creen que sea enviado de ningún “dios”, que no acatan y mucho menos forman parte de “su gobierno mundial” como pretende erigirse el Club Bildelberg, go­bierno mundial de neto corte fascista, como correspon­de al predominio del capital financiero. Esencialmente, lo que demuestra el imperio es la monumental incapaci­dad para resolver los problemas del desarrollo de las fuer­zas productivas, a la vez que pone al descubierto, que el sistema capitalista es un freno para el desarrollo y el bien­estar de la humanidad. El proletariado mundial comien­za a movilizarse, todavía sin coordinación, pero no cabe duda que esas movilizaciones parirán una conciencia su­perior, una organización capaz de enfrentar y revertir las muertes y miserias, en una salida de esperanzas y felici­dad para los trabajadores y los pueblos explotados y opri­midos. A vencer o morir por la Argentina.

      Carlos Ponce de León

      La lucha de clases en el seno del capitalismo tiene dos momentos sustanciales. Uno: la defensa de las aspiracio­nes y derechos del pueblo trabajador, frente a la voracidad explotadora del sistema. Otro: la posibilidad de construir una sociedad más libre y democrática, la sociedad socia­lista. Unir estos dos momentos en un espacio y tiempo histórico determinado resultan en una revolución. Una cumbre de este proceso se vivió en 1917. “El imperialismo es el preludio de la revolución social” dirá Lenin después de interpretar los cambios que se había producido. Tras la experiencia histórica de los pueblos y las mutaciones que sobrevinieron en el capitalismo (ya en su ocaso); resulta del todo oportuno recordar aquel estudio como aporte a la comprensión del mundo que nos toca transformar.

      Mario Mazzitelli

      El paso del capitalismo competitivo al capitalismo mo­nopólico, que caracteriza al imperialismo, obviamente también se hizo sentir nuestro país. En esta enjundio­sa obra de Lenin algunas de esas características apare­cen mencionadas.

      Lenin alude a la Argentina como, “otra forma” de un país “dependiente aunque políticamente independien­te”, algo parecido a una semicolonia atada por el capital financiero y nuestra burguesía a los intereses británicos. Un siglo después, ésa sigue siendo nuestra lastimosa rea­lidad aunque sean otros los encargados de sujetar la soga que rodea a nuestros cuellos.

      Hablando del rol de los ferrocarriles, en nuestro caso funcionales al diseño de nuestra economía agroexpor­tadora, Lenin introduce reflexiones sobre el rol opresorde “múltiples lazos capitalistas”. Éstos están profunda­mente arraigados en nuestra cultura, historia y economía constituyendo la base sobre la cual se asienta el extracti­vismo agroexportador. El mismo que está en la raíz del modelo socio-económico dominante instaurado por la “Generación del 80” y que hasta la fecha, salvo pocas y re­lativamente breves excepciones, se ha mantenido incólume.

      Roberto Perdía

      Hace 100 años, pocos habían abierto los ojos a la rea­lidad que transformaba el librecambio de mercancías del capitalismo por su evolución: la concentración del capital, la conformación de los monopolios y el nacimiento del capital financiero que abrazó con sus tentáculos a todos los países subdesarrollados del mundo. En el principio de esta nueva etapa, consecuencia del modo de produc­ción capitalista, nadie lo describió más cabalmente que Lenin en “El Imperialismo…”.

      Así como Marx y Engels sentaron las bases científicas de la lucha revolucionaria a mediados del siglo XIX, Lenin puso los puntos sobre las íes en el concepto de la lucha an­tiimperialista. Dejando en claro que no hay tal cosa si los pueblos se someten a los designios del poder monopólico de las multinacionales y a la trampa del sistema financiero imperialista, como hoy nos quieren hacer creer los voceros de la progresía mundial y sobre todo, nuestramericana. La única forma de liberar a la Humanidad de todas sus cade­nas, exige romper con esa estructura de dominación crea­da por la burguesía imperialista que tan cristalinamente describe Lenin. Lo demás es pura cháchara.

      Gustavo Robles

      1 Párrafos seleccionados debido a la extensión del articulo. Puede acceder a la versión completa enviando solicitud a la Comisión Centenario de la Revolución de Octubre. ([email protected])

      2 Párrafos seleccionados debido a la extensión del articulo. Puede acceder a la versión completa enviando solicitud a la Comisión Centenario de la Revolución de Octubre. ([email protected])

      3 Párrafos seleccionados debido a la extensión del articulo. Puede acceder a la versión completa enviando solicitud a la Comisión Centenario de la Revolución de Octubre. ([email protected])

       Osvaldo Bayer, escritor

       Héctor “Cacho” Bidonde, actor, integrante de Plataforma 2012

       Liliana Heker, poetisa

       Felipe Luís Noé, artista plástico

       Jaime Fuchs, economista marxista

       Alcira Argumedo, diputada nacional, Proyecto Sur

       Carlos del Frade, periodista, diputado provincial, Frente Social y Popular (Santa Fe)

       Julio C. Gambina, presidente de la Fundación de Investigaciones Sociales y Políticas (FISyP)

       Juan Grabois, Confederación de la Economía Popular y del Movimiento de Trabajadores Excluidos

       Nicolás Iñigo Carrera, historiador, director del PIMSA (Programa de Investigación sobre el Movimiento de la Sociedad Argentina).

       Claudio Katz, economista, profesor en Filosofía y Letras y Ciencias Sociales UBA, investigador del CONICET

       Néstor Kohan, prof. Titular Sociología UBA, coordi­nador cátedra Che Guevara

       Julio Macera, dirigente gremial, secretario adjunto de la CTA Capital

       Francisco “Pancho” Montiel, secretario general de la Federación de obreros portuarios, marítimos y navales (CTA A)

       Maximiliano Riesnik, docente UBA, catedra Che Guevara

       Alejandro Bodart, secretario general del Movimiento Socialista de los Trabajadores -Nueva Izquierda (MST NI)

       Jorge Cardelli, secretario de Emancipación Sur

       Carlos Echagüe, Director del Instituto de marxismo Leninismo maoísmo,

       Pedro Fuentes, dirección del MES y PSOL (Brasil)

       Eduardo C. Furno, dirección del Partido Revolucionario Marxista Leninista (PRML)

       Eugenio Gastiazoro, dirección del Partido Comunista Revolucionario (PCR)

       Carlos Ponce de León, dirección del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT)


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