.
Entre los obstáculos que se puede encontrar una empresa al decidir optar por un proceso de internacionalización, destacan, entre otros:
1 Los problemas financieros. Se han de incluir en estos aspectos la posible falta de créditos financieros adaptados a la exportación de productos, así como la diversidad y la constante variación de los tipos de cambio existente entre países.
2 Los imperativos políticos. Engloban las normativas y demandas de los diferentes gobiernos de distintos países, entre los que destaca la legislación en torno a la creación de industria o las competencias de los departamentos de I+D, que pueden en muchos casos actuar de forma contraria a las estrategias de internacionalización de la empresa.
3 Los imperativos administrativos. Entre los que se incluyen las aduanas y los impuestos arancelarios existentes en la comercialización de productos de distintos países.
4 Las restricciones de los propios gobiernos en cuanto a la inversión directa de impuestos. Los gobiernos de diferentes países pueden realizar controles a las diferentes empresas y establecer limitaciones para poder repatriar los beneficios obtenidos. Este problema se incrementa si también imponen fabricar los productos en el mercado de origen o establecen obligaciones al respecto de la contratación de trabajadores, ya sea en cuanto a emplear mano de obra del país, o limitando el número de trabajadores extranjeros contratados en el mismo.
5 Los problemas comerciales y logísticos. En la actualidad sigue existiendo un gran desconocimiento del mercado exterior y de la búsqueda de oportunidades comerciales en países extranjeros, que provoca que muchas empresas no opten por este proceso al no poseer contactos ni orientación para actuar en mercados distintos del original. Asimismo, los costes de transporte son otro de los aspectos a tener en cuenta, ya que los mismos pueden aumentar de forma directamente proporcional a la distancia entre el país nacional y el país mercado extranjero.
6 La diversidad cultural. Es un elemento clave entre las dificultades que se pueden encontrar al comercializar productos entre diferentes países, en ocasiones basado principalmente en el idioma., Un entorno cultural diferente dificulta en gran medida la obtención de ayuda financiera, la adaptación de productos exportables, el diseño de los productos, la competencia con aquellos países más industrializados, la búsqueda de mercados exteriores, etc. a lo que puede sumarse la falta de experiencia en otros países.
La diversidad cultural ayuda a las personas a adaptarse a la variación del entorno y es de vital importancia para la mercadotecnia internacional, con el fin de poder adaptar los productos a los gustos de los consumidores.
Actividades
3. Elabore un programa de internacionalización de una empresa, anotando las tres actividades que considere más importantes para lograr el éxito de la misma en un mercado extranjero.
4. Indique al menos 5 empresas españolas que pueda encontrar a través de noticias de periódicos y revistas, que hayan optado por llevar a cabo un proceso de internacionalización, y justifique cuál cree que ha sido uno de sus principales motivos del éxito.
3. Etapas del proceso de internacionalización
Tal y como se ha venido comentando, existen multitud de razones para la internacionalización de una empresa, aunque este proceso conlleva unos riesgos y se necesita de un conocimiento de mercado para poder tomar decisiones con cierta seguridad. Por este motivo, las empresas optan por llevar a cabo este proceso de internacionalización en diferentes etapas o formas, como son:
1 La exportación ocasional o pasiva.
2 La exportación experimental o activa.
3 La exportación regular o consolidación.
4 El establecimiento de subsidiaras comerciales.
5 El establecimiento de subsidiarias de producción en el exterior.
Los estudios de mercado y de producto son fundamentales para establecer las diferentes etapas del proceso de internacionalización de un producto en los mercados exteriores.
A continuación, se va a describir cada una de ellas con más detalle para comprender mejor cada etapa y la justificación que representan para operar en el mercado exterior.
3.1. Exportación ocasional o pasiva
En esta etapa la empresa actúa exportando sus productos a los mercados extranjeros en función de pedidos ocasionales y esporádicos que empresas exteriores le demandan, no implicando esta actuación ningún compromiso a largo plazo con este mercado. Para ello, en la mayoría de los casos la empresa utiliza intermediarios extranjeros (agentes, trading companies, consorcios locales de exportación...) que le faciliten esta labor de comercio con el exterior.
3.2. Exportación experimental o activa
Hay casos en que las empresas optan por este tipo de exportación realizando un tipo de exportación experimental como prueba en el proceso de estudio de la decisión de optar por la vía de la internacionalización y vender a mercados extranjeros de forma habitual, sin depender de pedidos ocasionales provenientes de estos mercados. Mediante este tipo de explotación del negocio, la empresa explora el mercado para valorar si es factible o no la internacionalización que está en estudio.
3.3. Exportación regular o consolidación
Esta etapa se inicia cuando la empresa nacional ha logrado obtener contactos y clientes en el mercado exterior y procede a comercializar los productos de forma habitual.
Cuando una empresa está inmersa en este tipo de exportación, necesita implantar un departamento de exportación que sea responsable de las relaciones entre países para llevar a cabo la comercialización de productos y servicios en mercados extranjeros. En empresas que comercializan productos y servicios en diferentes países, una de las opciones por las que optan estas empresas es nombrar distribuidores exclusivos o agentes que se encarguen de estas labores de comercio en los diferentes países, aunque hay otras que deciden establecer oficinas de contacto e información en los diferentes países con este fin, aparte de estudiar los productos competidores, el nuevo mercado y las diferentes oportunidades de clientes y productos más demandados para su comercialización.
La exportación regular o consolidación precisa una menor inversión y presenta menos riesgos que otros tipos de exportación, pero necesita depender de intermediarios que aseguren las ventas en los mercados extranjeros.
3.4. Establecimiento de subsidiarias comerciales
Es una de las etapas finales en un proceso de internalización, que generalmente solo las empresas grandes y consolidadas pueden alcanzar, ya que para ello necesitan una gran exigencia humana y financiera que no poseen otras de menor volumen. Para ello, estas empresas optan por realizar un estudio detallado de precios, productos, marcas y distribución, estudios de mercado y marketing... que acercan al cliente para las posibles tomas de decisiones pero que necesitan una organización estable y coordinada para poder reflejar los resultados analizados del mercado en estudio.
3.5. Establecimiento de subsidiarias de producción en el exterior
Esta es considerada la etapa final de un proceso de internalización. En esta etapa, las empresas optan por crear nuevas plantas de producción, añadir plantas