Gilles Deleuze y la ciencia. Esther Díaz
donde la vida del individuo cede lugar a una vida impersonal, y sin embargo singular, de la que se desprende un puro acontecimiento. La agonía lo libera de los accidentes de la vida interior y exterior, es decir, de la subjetividad y de la objetividad. Es un homo tantum al que todo el mundo compadece (únicamente en el instante agónico) y alcanza una especie de beatitud. En ese efímero instante es una haecceidad (hecceité), no una individuación sino una singularización de la propia existencia.
Qué es, entonces, esta existencia singularizada, esta haecceidad que se expresa extensivamente cada vez bajo las complexiones de lo indefinido (estas virtualidades que pueblan en variación absoluta el campo trascendental), sino la experiencia misma de la duración. De manera similar lo expone Bergson en su obra que, como más tarde Deleuze, hace devenir la vida determinada en una vida indefinida. Bergson escribe en El pensamiento y lo moviente que la duración es la vida continuada en una memoria que prolonga el pasado en el presente. Sea que el presente contenga distintamente la imagen del pasado que se agranda sin cesar, sea que más bien testifique (por su continuo cambio de cualidad) la carga cada vez más pesada que uno arrastra detrás de sí, a medida que la vejez aumenta. Y agrega que sin esta supervivencia del pasado en el presente no habría duración sino solamente instantaneidad.[50]
Si leemos bien, la duración no sería algo distinto que la reconfiguración radical de las condiciones reales de la propia experiencia. Esa experiencia que hasta ahora hemos considerado para el proyecto de un empirismo trascendental. Se trata de reconfigurar la experiencia desplazando sus cuadros determinantes por progresos dinámicos, la forma estática de determinación de sus parámetros por disipación de virtualidades (que aquí y allá se actualizan en la potencia de relación de los cuerpos). Finalmente, la duración extendiéndose en las expresiones materiales de un espacio abierto de conexiones y digresiones que manifiesta el movimiento que es la vida misma. Lo real para Bergson es el cambio, más allá de los cuerpos que expresan su actualidad. Esos cuerpos y esas formas distintas ponen en evidencia la serie material de las cosas. La experiencia efectiva que tenemos inmediatamente (de eso que llamamos lo real) coincide en todo momento con la experiencia misma del movimiento del devenir.
La experiencia, entendiendo la ampliación de su concepto propuesto por el pensamiento de Deleuze, es el enclave privilegiado donde se producen series de alteraciones expresando su siempre variante y larvaria fisonomía. El tiempo de una duración y la materia donde esta temporalidad se extiende no podrían ser sino formantes esenciales de este tipo de empirismo que ha de responder con el devenir de la experiencia. De este modo, el campo trascendental que configura este peculiar empirismo exige a los problemas de génesis de la subjetividad y la objetividad que se hallen dispuestos más en términos de tiempo que de espacio, más en términos de diferencia que de identidad. Es una repetición que siempre difiere de sí misma. Un empirismo radical o trascendental obedece a esa extraña razón de los progresos de una multiplicidad cualitativa que, en el entendimiento de Bergson, siempre habrá de estar en constante variación de sí. Ahí está la potencia de una nueva metafísica, que ya no se identifica con el poder generalizador de sus proposiciones y postulados tomando por norma la experiencia general de lo posible. La metafísica habrá de devenir la experiencia misma, una potencia extrema de recorrer las fluctuaciones de lo real. Seguirá las articulaciones que subyacen en la evidencia sensible de sus líneas de hechos o simples estados de cosas. Eso es lo que Bergson denomina una experiencia integral o lo que Deleuze piensa para un empirismo trascendental. Es una crítica radical que se concibe en sentido empírico. Una potencia de exteriorización de diferenciales que pueblan de modo variante los datos inmediatos bajo la expresión radical de una serie de alteraciones, que dan razón tanto a lo virtual como a lo actual de la realidad de su fisonomía.
Конец ознакомительного фрагмента.
Текст предоставлен ООО «ЛитРес».
Прочитайте эту книгу целиком, купив полную легальную версию на ЛитРес.
Безопасно оплатить книгу можно банковской картой Visa, MasterCard, Maestro, со счета мобильного телефона, с платежного терминала, в салоне МТС или Связной, через PayPal, WebMoney, Яндекс.Деньги, QIWI Кошелек, бонусными картами или другим удобным Вам способом.