El socialismo y la cuestión obrera. Fernando Martínez López

El socialismo y la cuestión obrera - Fernando Martínez López


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      Especial interés puso la Agrupación Socialista en impulsar la celebración del 1º de mayo de 1893. En esta ocasión con notable éxito. Una Comisión Obrera, integrada por representantes de las sociedades de resistencia existentes, el Centro Obrero y la Agrupación Socialista acordaron llamar al paro general, publicar unos 3.000 manifiestos, una manifestación pública y celebrar un meeting.40 El Manifiesto, primero que hemos localizado de la celebración de un 1º de mayo, dice así:

      A LOS OBREROS

      EL 1º DE MAYO DE 1893

      Acercase el día en que el proletariado Universal, que se da cuenta de su malestar y quiere ponerle remedio, cumpla por cuarta vez el acuerdo del CONGRESO INTERNACIONAL DE PARÍS, reclamando a los poderes públicos la legislación protectora del trabajo, aprobada por el mismo y particularmente LA JORNADA DE OCHO HORAS.

      Grandiosos, imponentes, solemnes han sido los actos que las clases obreras han realizado los años anteriores; en el de 1893 no debe de serlo menos.

      La unidad de ideas, de sentimientos y aspiraciones, que en estos actos demuestran las clases trabajadoras, equivale a un triple golpe contra las instituciones burguesas o capitalistas.

      Y como a fuerza de golpes constantes y de un continuo asedio del baluarte burgués, es como los explotados han de modificar las malísimas condiciones en que viven y redimirse totalmente; de ahí que todos los obreros, que todos los que sufren las terribles consecuencias de esta sociedad semibárbara, deban mostrarse parte en el próximo 1º de mayo.

      Consagremos pues por entero ese día a nuestros intereses y hagamos que todos nuestros compañeros se penetren bien del valor de las reivindicaciones obreras.

      Por su interés, nuestros explotadores nos obligan a dejar el trabajo en días que nosotros no quisiéramos, por mantener costumbres e ideas convenientes a sus privilegios, nos ponen en el caso de hacer fiesta una porción de días; pues por nuestra voluntad y por que es altamente beneficioso a nuestra obra redentora, dejemos de trabajar el 1º de mayo para nuestros enemigos y trabajemos para nosotros. En vez de ir a la Fábrica o Taller vayamos ese día a la acción política, a la propaganda, a despertar y fortalecer entre los nuestros el espíritu de clase.

      Trabajadores: Dispongámonos a reclamar por cuarta vez a la clase dominante las leyes que estimamos convenientes a nuestros intereses, y al hacerlo démosle a entender, que si entra en sus cálculos mostrarse sorda a nuestros actos, no adelantará nada, porque la fuerza que adquiere el proletariado, por la agitación continua y por la muy viva que produce el movimiento del 1º de Mayo, le servirá para conquistar en su día revolucionariamente, no ya una simple mejora, sino su emancipación económica.

      ¡VIVA LA JORNADA LEGAL DE OCHO HORAS!

      ¡VIVA LA UNIÓN DE TODOS LOS DESPOSEIDOS!

      ¡VIVA LA SOLIDARIDAD INTERNACIONAL!

      Almería, 27 de abril de 1893

      La Comisión Obrera

      La Comisión Obrera trabajó para que la huelga fuera general aquel 1º de mayo. El gobernador civil les prohibió la manifestación y concentró fuerzas en la capital, pese a ello la huelga fue secundada por los barrileros, canteros, albañiles, pintores, oficiales de barbero, talabarteros, oficios varios y los panaderos. Además, los obreros estuvieron «paseando» las principales calles de la ciudad en grandes grupos.41 Era la forma que adoptarán en adelante cuando el gobernador de turno les prohíba las manifestaciones del 1º de mayo. La huelga no fue general, pero era la primera vez que el movimiento del 1º de mayo había sido secundado mayoritariamente por parte de los obreros de Almería. La jornada se remató con un mitin en el Centro Obrero en el que, según La Crónica Meridional, «los socialistas defendieron los derechos que consideraban suyos, con verdadera fe».42

      Los pioneros de aquel movimiento societario y de la Agrupación Socialista solían ser trabajadores de los oficios clásicos, sometidos al vaivén de las conflictivas coyunturas económicas y por tanto poco estabilizados laboralmente, lo que explica que los encontremos en distintos oficios a lo largo de su vida. Solían compaginar su trabajo con la actividad societaria a la que le dedicaban especialmente los domingos, que eran los días destinados a las reuniones de las sociedades y de la Agrupación. Con un nivel cultural bajo pero deseosos de educación y cultura, acudían a las escuelas nocturnas y a alguno de ellos lo localizamos entre los alumnos de la Escuela de Artes y Oficios, creada en Almería en 1886 por Carlos Navarro Rodrigo.43

      Entre los impulsores del movimiento societario de la capital y primer presidente del socialismo almeriense se encuentra Francisco Godoy Calvo. Nació en Fondón el 17 de marzo de 1863.44 Hijo de padres «pobres y honrados» como él mismo decía, quedó huérfano de padre a la edad de siete años45 e inició su andadura en el trabajo en la capital como aprendiz en la rueda de unos hileros apellidados «Los Carpios» por un real de jornal. A los ocho años empezó como albañil en las obras de las casas para obreros del Reducto, en las que trabajaba incluso las mañanas de los domingos. Las primeras letras las aprendió en la escuela nocturna. La dureza del trabajo —transporte de cubetas con mezcla— fue la causa de que no continuara como albañil y emprendiera entonces el oficio de barrilero. «Cuanta crueldad y cuanta infamia —escribía años más tarde Godoy al recordar los años de aprendiz en la barrilería—, (…) arreados por el oficial, vigilados por la mirada del maestro, sin ningún descanso, fatigados y jadeantes hasta que algunos caíamos desfallecidos, roído el estómago por el hambre y amortiguado el sufrimiento por el cansancio».

      Pasó a ser oficial de la barrilería y se ganó el prestigio de ser uno de los mejores oficiales barrileros de Almería. Reclamó aumentos de salario y consiguió que el gremio mejorara su situación. Desde entonces «me consideraron los patronos —escribía— como uno de los mejores y los oficiales como uno de los mejores compañeros, guardándoseme por unos y otros consideraciones que llegaron a parecerme impropias de mi edad y de mi desarrollo físico e intelectual». Llamado por José López Guillén, presidente de la Cámara de Comercio y uno de los principales comerciantes y consignatarios de buques, trabajó para él gran parte de su vida al tiempo que dedicaba parte de su tiempo libre a la sociedad de barrileros y a la lectura. Su taller fue una cantera de militantes socialistas. Sus charlas con Rafael Salinas en los años que estuvo en Almería le situaron en las ideas del socialismo. El maestro barrilero Godoy sería a partir de estos años uno de los más firmes bastiones de las ideas socialistas en Almería. Rafael Salinas transmitió esa opinión a la dirección del Partido Socialista y el mismo Pablo Iglesias lo confirma en sus cartas a Francisco Godoy cuando le dice: «Le he tenido a usted y le tengo —y no es adulación, porque yo no sé adular— por el hombre de más capacidad que hay en esa Agrupación, por uno de los más formales […] Desde que le traté formé de usted un excelente juicio, que después no he variado».46

      Los ochenta y noventa fueron los años en que Godoy dedicó más tiempo a la sociedad de barrileros y sobre todo a la puesta en marcha de la Agrupación Socialista. Ocupó la presidencia del Comité sólo el primer año de vida de la Agrupación, pero siguió siendo uno de los referentes del socialismo almeriense hasta su muerte. Con el prestigio que adquirió como maestro barrilero y como hombre de ideas firmes logró acercar al partido a profesores republicanos como Tomás Alonso, que se convirtió en uno de los hombres claves de Partido Socialista. Su capacidad económica le permitió participar en la mayoría de las colectas de solidaridad con huelguistas que se planteaban desde El Socialista, al que estaba suscrito, y cuando la Agrupación decidió llevar a cabo campañas de propaganda para irradiar el socialismo en los pueblos cercanos a Almería siempre contó con el modesto apoyo económico de Godoy.47

      6. TRAS UNOS INICIOS DIFÍCILES, LA AGRUPACIÓN SE CONSOLIDA DURANTE EL FIN DE SIGLO

      Los primeros años de la Agrupación tuvieron sus dificultades. Tras la actividad inicial del primer año, la Agrupación pasó a ser presidida por Mariano Pérez Tejada48 pero cayó en una fuerte inestabilidad, algo que fue común a muchas agrupaciones en los inicios del Partido Socialista. Pablo Iglesias en una carta dirigida a Francisco Godoy en octubre de 1893, un año después de haberse constituido


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