El socialismo y la cuestión obrera. Fernando Martínez López
se dejaron llevar por el patrioterismo desencadenado especialmente durante la guerra con los norteamericanos. El 10 de octubre de 1897 realizaron un mitin en el Teatro Novedades para protestar contra el servicio militar y la redención a metálico. Al mitin asistió un número elevado de trabajadores y se llamó a los obreros a ingresar en el gran concierto social como único medio de terminar las guerras y asegurar la paz en el mundo. Tuvo como resultado un sensible aumento en las filas del socialismo almeriense, pues, según hace notar el corresponsal de El Socialista, «muchos compañeros, convencidos de que verdaderamente nuestro partido es el que defiende con celo los intereses y los derechos de los trabajadores, han ingresado en él».56
Tras la guerra hispano-norteamericana el enfoque regeneracionista y sobre todo el diagnóstico que Costa hacía de los males de España habían empezado a sacar al republicanismo español de las discusiones doctrinales estériles y le estimularon a debatir política concreta. Pero la evolución del republicanismo no fue uniforme, ni se dio al mismo tiempo en todo el país. En Almería, los principales dirigentes republicanos, hasta finales de 1901 y mediados de 1902, estuvieron dedicados más a sus tareas profesionales y a sus aficiones artístico-literarias que al relanzamiento de la actividad republicana. Otros, en cambio, siguieron la actividad política en las filas del socialismo. Entre estos últimos, los más destacados fueron Tomás Alonso, que ingresó en la Agrupación Socialista en 1899, y el joven germinalista Antonio Marín Durán, que pasó a la filas del socialismo en 1901. Ambos fueron presidentes de la Federación Local de Sociedades Obreras e indudablemente su vinculación al socialismo supuso un importante refuerzo para la Agrupación Socialista, al tiempo que significaba la entrada de intelectuales —obreros intelectuales en frase de los socialistas— por vez primera en el PSOE local. Los dos, en sus cartas al Comité Nacional del Partido, hacían referencia a su trayectoria por el republicanismo, a los desatinos de éste o al estrecho marco ideológico y político en que se movía.
El Socialista dio la bienvenida a Tomás Alonso de la siguiente manera: «nos alegramos de su venida a nuestro campo, tanto por contar con un compañero más, como porque siendo el Sr. Alonso un obrero intelectual, contribuirá bastante a la difusión de las doctrinas socialistas y a la organización del proletariado».57 Una vez en el PSOE, redactó el Reglamento de la Federación Local de Sociedades Obreras, fue su primer presidente, representó a la sociedad de albañiles 1º de mayo, y más tarde, cuando se constituyó la Junta Local de Reformas Sociales, fue elegido secretario por unanimidad de los patronos y obreros. Escribió muy diversos artículos sobre «cuestiones obreras», en El Radical.58 Constituyó una de figuras claves del movimiento societario de estos años pues no hubo mitin en el que no interviniera, medió entre patronos y obreros, con las autoridades en los momentos de huelgas, impulsó la creación del Centro Obrero, etc. Políticamente fue partidario de la alianza de socialistas con los republicanos, y así lo hizo valer en 1903 cuando la agrupación votó si se hacía o no una alianza electoral con los republicanos a escala nacional a petición de la Agrupación socialista madrileña. La negativa de la Agrupación de Almería y del PSOE en general a la colaboración con los republicanos le hizo apartarse de la primera fila del «combate partidario», aunque siguió considerándose socialista, intervino junto a Pablo Iglesias en el mitin que éste dio con motivo de su visita a Almería en 1904 y siguió participando en la Federación Local de Sociedades Obreras y en la Junta de Reformas Sociales.
Antonio Marín Durán, hijo del republicano federal Antonio Marín García, ingresó en la Agrupación socialista dos años y medio después que Tomás Alonso. Era un joven estudiante en Madrid cuando se vinculó a las ideas de la Agrupación Republicano-Socialista Germinal que encabezaba Nicolás Salmerón García, hijo del que fuera presidente del Poder Ejecutivo de la I República. La actividad desplegada por los socialistas almerienses entre 1899 y 1901 hicieron mella en el espíritu inquieto y revolucionario de aquel joven que hizo su primera intervención en un acto público en el mitin en pro de la revisión de los procesos de Montjuic, en julio de 1899, representando a los jóvenes germinalistas almerienses. Desde entonces no dejó de frecuentar la barbería de la Almedina, participar en sus debates y admirar a los dirigentes socialistas como Antonio Hernández Clemente, con cuya hija terminó casándose. Ingresó en el PSOE en mayo de 1901, a los 22 años. Se vinculó a la sociedad de panaderos La Igualitaria, una de las más combativas en estos años, a la que representó en la Federación Local de Sociedades Obreras y en la Junta Local de Reformas Sociales. Fue presidente de la Federación en 1902 en los momentos de mayor movimiento huelguístico. Combatió con sus escritos desde El Socialista a los republicanos y a los pocos anarquistas que había en la ciudad. Desempeñó un papel destacado en la reorganización de la Agrupación Socialista desde octubre de 1902 y fue el corresponsal de El Socialista en 1902, 1903 y 1904. Colaboró en la formación de la sociedad de obreros del campo La Aurora y participó en la campaña de propaganda socialista por los pueblos del Bajo Andarax y las barriadas de Almería en 1904 y 1905. A partir de esas fechas se le pierde el rastro y lo volveremos a encontrar de nuevo al principio de la II República representando a la Agrupación Socialista en el comité electoral republicano-socialista para las elecciones del 31 de mayo de 1931.59
8. EL IMPULSO SOCIETARIO Y LA SEGUNDA VISITA DE PABLO IGLESIAS (1899-1900)
El fortalecimiento de la Agrupación Socialista y la afiliación de Tomás Alonso y otros republicanos tras guerra hispano-norteamericana fue sin duda determinante para que el societarismo almeriense recibiera un nuevo y significativo impulso hasta esos momentos desconocido en la historia del movimiento obrero provincial.
Al calor de la nueva situación, la Agrupación inició una campaña propagandística en la que participaron Tomás Alonso, Francisco Godoy, Manuel Garrido y Juan Medina entre otros. Estuvo destinada a difundir las ideas socialistas e instar a los obreros a organizarse en sociedades de resistencia. La campaña dio resultado. En febrero de 1899 la sociedad La Unión Terrestre de trabajadores portuarios incrementó su número de socios, la sociedad de barrileros terminó de reorganizarse, se iniciaron los trabajos para impulsar a los carpinteros en sociedad de resistencia y se constituyó La Constancia, sociedad de resistencia del gremio de Esparteros (rastrilleros, hileros y penseros). En marzo se reorganizaron los panaderos; en el mes de abril lo hicieron los alpargateros con el nombre de La Luz y se constituía definitivamente la sociedad de panaderos bajo el nombre de La Igualitaria: «Si como es de esperar —escribía Tomas Alonso—, secundan la iniciativa los demás gremios, pronto podremos decir que el obrero de Almería nace a la vida social y política rompiendo la pesada costra de la burguesía que le subyugaba, a impulso del fuego vivificador de la idea socialista, mecido por el aura suave del espíritu de solidaridad y reverdecido por el copioso sudor de su frente».60
La Agrupación Socialista y las sociedades obreras celebraron con un mitin en el Teatro Apolo el 1º de mayo con una asistencia muy numerosa y continuó el impulso de creación de sociedades en los meses siguientes61. De este modo, a principios de mayo se constituían definitivamente los albañiles en sociedad de resistencia bajo el título Primero de mayo, eligiendo presidente a Tomás Alonso, los esparteros lanzaban la huelga por aumentos salariales, Matrícula Unida, sociedad de obreros del puerto, celebraba su primer aniversario como sociedad con cerca de 800 asociados y las directivas de las siete sociedades obreras organizadas acordaron por unanimidad poner en marcha la Federación Local de Sociedades Obreras, nombrando provisionalmente a Tomás Alonso como presidente, Mariano Pérez como secretario —era presidente de la Agrupación— y José Gómez de Matrícula Unida como vocal.62. La Federación quedó definitivamente constituida en junio de 1899 con unos 3.036 obreros federados63.
Mientras que la Federación se dotaba de un Centro Obrero propio, la barbería de la Almedina sirvió de sede para varias sociedades, incluida la Agrupación Socialista, y de lugar de encuentro abierto para los dirigentes societarios. Allí se leía la prensa, se preparaban reuniones, veladas, mítines, se hablaba de los problemas de los obreros y de la «emancipación» social. Lugar más distendido que el local propio de las sociedades, acudían a ella los dirigentes republicanos más radicales, y, en su modestia, cubrió de una manera embrionaria el espacio de lo que más tarde ocuparon los casinos obreros y las casas del pueblo. El cariño y respeto despertado