El Zodiaco. Margarita Norambuena Valdivia
muerto. —Géminis era la única que de verdad no parecía afectada por la presencia de Alpha.
Yo asentí varias veces con la cabeza, sabía que no podía ser la única que lo encontrase fantástico.
— Por si no lo sabían, ahora éste es capitán, mayor, comandante o como se le llame, de la policía. Fue quien ordenó el desalojo del teatro anoche. —Libra apuró el fondo frío de su café con crema, solo entonces se enderezó y se dio vuelta para observarnos.
No estaba molesto, creo. De hecho, el rostro de Libra no reflejaba expresión alguna, pero su mirada era tan intensa que sentí que me congelaba. Tuve miedo de él y lo que pudiera llegar a hacer. De todos los que estaban sentados a la mesa, Libra era el único que, sin mostrar enfado en su rostro, asustaba más que ninguno.
— Libra, lo siento… —lloriqueé al ver su mirada. Sentí que había metido la pata y Libra me mataría por eso, así que sin darle tiempo a decir algo me lancé a sus brazos en un intento por dejar de sentirme culpable.
Libra me observó arqueando una ceja, pero terminó sonriendo de medio lado y me palmeó la espalda dejando que me quedara abrazada a él.
— ¡Vaya! Así que eres el jefe de la poli, ¿no? —Géminis parecía divertida por la situación, de hecho, parecía estar maquinando alguna maniobra.
— ¡Oh! ¡oh! Yo tengo una petición. —Sagitario alzó su mano en un rápido movimiento para pedir la palabra.
— ¿Qué? —Tauro se cruzó de brazos sin mucha paciencia.
— Si Alpha es policía, entonces él puede rescatar a Escorpio y Acuario. —respondió Sagitario.
— ¡¿Rescatar?! —¿Qué quería decir Sagitario con rescatar?
— Espera un segundo. —Leo extendió sus manos al frente bastante alterado— Primero que todo, y que quede claro para todos, Alpha no hará nada. Segundo, ¿qué es eso de rescatar?
— Sí, ¿dónde están Acuario y Escorpio? —me separé de Libra, pero sin quitarme de encima suyo, solo lo justo y necesario para poder observar mejor a Sagitario.
— Es lo que les decía, fueron secuestrados.
— ¡¿Cómo que secuestrados?! —gritaron Tauro y Leo a la vez.
— ¿Y por qué recién ahora nos lo dices? —Aries arrugó el entrecejo mientras se cruzaba de brazos.
— Oye, fue lo primero que les conté. —se defendió Sagitario.
— ¡Por supuesto que no! —gritamos a coro.
— Diablos, Sagitario, ¿ahora qué hacemos? —Leo deslizó la mano por su rostro, no sé si se lamentaba más por el hecho de que Acuario y Escorpio estuvieran secuestrados o porque Sagitario recién ahora nos informaba de la situación.
— ¿Quién los secuestró y por qué? —quiso saber Aries.
— Pues… ¿quién? El gremio de la Araña Escarlata, ¿por qué? Ni idea. Dijeron algo de una cuenta pendiente, su jefe o algo así. No lo sé, la chica peli azul y el cara de sapo no hablaban claro ni tampoco nada importante. —Sagitario se tomó un momento para pensar al respecto.
— El líder de los 3R es primo del líder de la Araña Escarlata. —informó Alpha. Por un momento me había olvidado de que estaba presente.
— Ah, cierto, estás aquí. —comentó de forma despectiva Leo.
— Bueno… supongo que eso explicaría el motivo del secuestro. —razonó Aries mientras se balanceaba en las patas traseras de su silla, no creo que pensara muy seriamente en algún rescate o similar.
— ¿Y ahora qué? ¿Iremos a rescatarlos? —Tauro hizo la pregunta con desgana y al mirarlo me di cuenta de que en realidad había dejado de prestar verdadera atención a la discusión y observaba con anhelo las últimas tostadas, seguramente estaba vigilando para que nadie se las quitara.
— No lo creo, supongo que podrían regresar por su cuenta. —Aries se sujetó el mentón mientras continuaba balanceándose en la silla, me dio la impresión de que se había limitado a pensar en voz alta.
— Auch… eso no sonó bien. —Libra frunció los labios, a pesar de sus palabras no se veía interesado en rebatir la decisión de Aries, yo lo observé y me colgué de su cuello.
— Oh, no, ¿qué vamos a hacer, Libra? Seguro que Acuario y Escorpio están sufriendo justo ahora y nuestra líder no quiere ir a ayudarlos. —dramaticé, Libra me observó esbozando una breve sonrisa, entonces se llevó una mano a la frente.
— No lo sé, querida, ¿qué deberíamos hacer con una líder así? Seguro que si nos llegase a pasar algo nos dejaría morir. —me siguió el juego.
— Oh, mundo cruel, tenemos un oscuro destino por delante… —le contesté echando mi cabeza hacia atrás y cerrando un momento mis ojos, entonces observé a Aries, quien, inmutable ante nuestras palabras y gestos, se había limitado a observarnos alzando una ceja.
— Vale, si no vuelven para la noche, iremos a buscarlos. —concedió.
— ¡Sí! Justicia. —celebré.
— Pero que líder más benevolente tenemos. —Libra sonrió. Supongo que tampoco esperaba algo mejor por parte de Aries. De todos modos, incluso yo estaba segura de que Acuario y Escorpio volverían antes de darnos cuenta.
— No creo que los vayan a matar, ¿verdad? —Géminis captó la atención de todos.
— ¿Por qué harían algo así? —cuestionó Alpha.
— Oh, ya sabes, si estaban en la bodega entonces significa que encontraron los cuerpos y si el líder de la Araña era el primo del líder de los 3R entonces está en su derecho de tomar venganza. —Alpha abrió los ojos con sorpresa, creo que no comprendía del todo aquella conclusión. Nosotros, quienes sabíamos a la perfección a qué se refería Géminis, posamos nuestras miradas en Aries. Fue unánime, todos teníamos miradas sombrías y preocupadas a la espera de la respuesta de nuestra líder.
— ¿Aries? —el tono de Libra no daba lugar a bromas.
— Bueno, pensándolo bien, tal vez sea algo más serio. —aceptó Aries, entonces miró un instante en dirección a Alpha. —Tú, hazte útil, ¿conoces al gremio de la Araña? —Alpha la observó alzando las cejas, molesto por la forma en que Aries se había dirigido a él.
— ¿Disculpa? —Alpha sonó ofendido.
— ¿Lo conoces o no? Es una pregunta sencilla, Alpha. —Aries arrastró de mala gana el nombre a través de su garganta.
— Nunca he trabajado con ellos, pero sí, los conozco.
— ¿Y? —Géminis se inclinó hacia Alpha interesada.
— ¿Y qué? —preguntó Alpha.
— ¿Son capaces de matar a Acuario y Escorpio o no? —Aries levantó la mirada sin paciencia.
— No sé por qué querrían matar a Escorpio y Acuario. —Alpha sonaba sincero. Al oírlo, Leo resopló desviando la cabeza y mascullando algo que sonó como: «Idiota». Alpha lo fulminó con la mirada.
— Pues porque matamos a su primo, ¡duh! —se burló divertida Aries.
— Ah, bueno, en ese caso… ¡¿Mataron a su primo?! —saltó de pronto Alpha al percatarse de lo que Aries había dicho. —¡¿Por qué hicieron eso?!
— Porque dispararon a Virgo. Y nadie se mete con el Zodiaco. Punto. —un asentimiento grupal y unánime respaldó a Aries.
— Exacto, si te metes con uno te metes con todos. —aseguró Leo. Alpha nos observó incrédulo y terminó masajeándose las sienes.
— No puedo creerlo… había oído rumores del Zodiaco, pero nunca creí que fueran ciertos.