Los elementos de investigación. Hugo Cerda Gutiérrez

Los elementos de investigación - Hugo Cerda Gutiérrez


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se extiende a todos los campos de la indagación, de la actividad humana y la vida humana en su conjunto, ya sea particular o asociada, debe ser guiada por dicho método.

      Auguste Comte es el artífice del Positivismo, una escuela y un método que con los años se convertiría en el fundamento epistemológico no sólo de algunas posturas que actualmente identificamos con el estudio de la ciencias naturales, sino una concepción investigativa dominante y determinante en el ámbito científico, y que hoy día se le moteja con el nombre de ciencia oficial o positiva. Pero con los años la postura positivista se diversificó y se amplió en la medida de las exigencias y el desarrollo del campo científico y tecnológico, y dio nacimiento a las corrientes neo-positivistas, entre las cuales se destacan el positivismo lógico, positivismo ideológico, el positivismo metodológico o conceptual, positivismo analítico, positivismo sociológico, positivismo realista, etc. El positivismo lógico se constituye en una de las corrientes predominantes de filosofía de la ciencia, la cual surgió durante el primer tercio del siglo XX, como resultado del trabajo realizado por un grupo de científicos y filósofos que constituyeron el célebre Círculo de Viena. Aunque oficialmente no perteneció a este grupo, al destacado filósofo alemán Karl Popper se le reconoce como un positivista lógico, pero con características muy propias. Popper afirma que la ciencia no avanza confirmando teorías solo observando, sino demostrando que contradicen la experiencia. Esto es, según él, a grandes rasgos, el falsacionismo. Popper critica severamente el inductivismo y lo desbanca de la filosofía de la ciencia moderna mediante la lógica y las tesis del falibilismo. Es más, demuestra que el justificacionismo científico es incorrecto debido a que los enunciados observables (empíricos) no pueden ser probados, sino que simplemente pueden ser aceptados o rechazados atendiendo a las teorías experimentales, instrumentos y criterios racionales comúnmente aceptados en el momento.

      El positivismo como concepción de la sociedad va a percibir el orden social y natural, sobre la base de los siguientes principios:

      ♦ La sociedad está regida por leyes naturales, independientes de la voluntad humana, invariables y que manifiestan una armonía natural en la vida social.

      ♦ Los fenómenos sociales se deben observar y explicar causalmente (con independencia de los juicios de valor ideológicos, de los prejuicios y preconceptos) lográndose así la neutralidad y objetividad que posee las ciencias de la naturaleza.

      ♦ El naturalismo positivista asegura la asimilación epistemológica de la sociedad a la naturaleza, la unidad metodológica de todos los campos científicos, la ciencia unificada.

      Algunos críticos de los investigadores que han adoptado los métodos cualitativos como regla principal de su trabajo, consideran que esta tendencia carece de un soporte filosófico único que fundamente teóricamente sus formas de trabajo, ya que el denominado método fenomenológico, cuya figura más destacada fue E. Husserl, no reúne todos los componentes que permitan caracterizar o reconocer sus posturas metodológicas. De ahí que se hayan utilizado los planteamientos de autores muy diferentes para darle soporte al paradigma cualitativo, todos los cuales tienen en común la oposición decidida que asumen frente al positivismo y al neopositivismo, entre los cuales se destacan Weber, Dilthey, Derrida, Schutz, Gadamer, Morin, Bachelard, Bourdieu y numerosos otros. Independientemente de las discrepancias que podamos tener o no frente al positivismo, no hay duda que la mayoría de los autores le reconocen a esta postura unidad y coherencia, de las cuales carecen las corrientes cualitativas, permitiéndole convertirse en el paradigma dominante de la ciencia moderna. Quienes trabajan en las ciencias sociales y humanas, han tenido serios problemas para elaborar una concepción única que reúna todas las variantes que posee un supuesto paradigma que se nutre de fuentes filosóficas y epistemológicas muy diferentes.

      A los sectores que se oponen a las posturas del positivismo se acostumbra relacionarlos con la Fenomenología, una concepción o escuela filosófica, que en sus inicios se le vinculó a las corrientes hermenéuticas y lingüísticas, y particularmente a la identidad sujeto-objeto, típicas de las Ciencias Sociales. En todo este enjambre de obras y autores no existe unidad de criterios ni consensos, de ahí la dificultad para caracterizar los enfoques de la investigación social, que reúne alrededor un mosaico de tendencias muy dispersas: fenómenológicas, cualitativas, humanistas, hermenéuticas, críticas, interpretativas, holísticas, etc. Muchas de las caracterizaciones que se vinculan con algunas posturas filosóficas propias de la investigación social, la mayoría de las veces no provienen específicamente de la Fenomenología, sino de enfoques metodológicos y técnicos muy dispares que derivan de orientaciones propias de la Antropología, la Sociología y aún de la Educación. Por eso se considera un error asociar exclusivamente algunas tendencias de la investigación social con una sola escuela filosófica.

      La palabra fenomenología viene del griego y significa apariencia, estudio y tratado. Su idea central es la intencionalidad de la conciencia y su orientación hacia el objeto, donde parte del principio de que no hay objeto sin sujeto. Algunos de los principios básicos y más significativos del método fenomenológico en el contexto investigativo son los siguientes:

      ♦ La realidad social es única.

      ♦ La metodología ve al individuo y su mundo interconectado (uno no existe sin el otro).

      ♦ El investigador particularmente comprende el comportamiento humano.

      ♦ Se estudia no sólo lo que la gente hace, sino también lo que piensa y experimenta.

      La Fenomenología comenzó a tener un significado especial en la obra de Eugene Husserl, postura filosófica que se refiere en general al estudio de los diferentes modos en que las cosas aparecen o se manifiestan en la conciencia. Ella describe las estructuras de la experiencia tal como se presentan en la conciencia, sin recurrir a teorías, deducciones o suposiciones procedentes de otras disciplinas, y particularmente de las ciencias naturales. La idea central de la fenomenología es la intencionalidad de la conciencia (su orientación al objeto) y como teoría del conocimiento se basa en la tesis de que únicamente las sensaciones son el medio inmediato del conocer. Para esta escuela la realidad no tiene existencia en sí misma, no es una realidad subsistente, independiente de nuestro modo de percibirla, sino que se presenta sólo como algo que se da en el espacio y en el tiempo, a lo que se denomina fenómeno. Es un objeto de estudio perceptible a los sentidos del observador, sin embargo un mismo fenómeno no puede tener tantas percepciones como observadores lo perciban. Como método la Fenomenología busca entender en forma inmediata el mundo del hombre mediante una visión basada en la intuición de la cosa misma, es decir, el conocimiento que se adquiere válidamente a través de la intuición que conduce a los datos inmediatos y originales. Principalmente busca entender el mundo vital del hombre a través de una interpretación holística o total de las situaciones cotidianas.

      En la actualidad se han desarrollado tendencias fenomenológicas en Teología, Sociología, Psicología, Psiquiatría, Crítica literaria, Lingüística y otras ciencias sociales. Husserl, al igual que Dilthey, en su obra Fenomenología distingue entre Ciencias de la Naturaleza y Ciencias del Espíritu (humanas), rechazando que ellas sigan el mismo método de las primeras, ya que en las ciencias de la naturaleza prima la causalidad y en las segundas está presente la motivación o intencionalidad. Esa es la razón por la que sus ideas estaban centradas en la construcción de una ciencia eidética (estudio de las esencias, objeto de la investigación fenomenología) que sirviera de base a las ciencias humanas.

      El método fenomenológico está basado en la filosofía de Husserl y en el método de comprensión de Max Weber. El debate planteado a nivel epistemológico gira en torno a la pregunta ¿cómo se puede lograr el conocimiento? Este método no parte del diseño de una teoría, sino del mundo conocido ¿Cuáles son sus características principales que lo relacionan con los métodos de investigación vinculados con las Ciencias Sociales? Para Max Van Manen (2003), el sentido y las áreas de


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