Ganar con la cabeza. Joaquin Dosil
de un partido (victoria o derrota) y su actuación personal.
– Aprende de sus errores y acepta la crítica.
– Es positivo, pero realista, y mantiene siempre una actitud positiva, tanto consigo mismo como con el partido. Nunca se rinde y nunca pierde la esperanza.
– Mantiene los sentimientos bajo control.
– Juega sólo con la mente y con los pies, no lo hace con las emociones: cólera, miedo, etc.
Un jugador mentalmente fuerte nunca golpea el balón con ira, no responde al juego sucio con juego sucio, no se deja cegar por la gloria y nunca baja los brazos en medio de un partido.
– Siempre conserva la calma y el equilibrio emocional, sobre todo en momentos de tensión.
– La presión no le asusta. Es para él una buena ocasión de mostrar sus habilidades. La presión es para él un reto.
– Mantiene la concentración en el partido. Nada le distrae. A lo largo del partido su atención no se desvía nunca de lo que ocurre en el terreno de juego.
– Siempre se muestra activo e irradiando energía.
– Tiene un alto grado de autoconfianza.
– Cree ciegamente en su potencial.
– Nunca busca excusas y siempre asume plena responsabilidad por su juego.
– En todos los partidos explota al máximo de forma consistente sus habilidades.
El jugador mentalmente fuerte también tiene las siguientes características:
– Tiene su mente puesta en el partido, y “no la deja en casa” o en el vestuario.
– Su trabajo mental es constante a lo largo del partido, hasta el pitido final.
– Sabe perfectamente que un partido de fútbol no empieza sólo cuando el árbitro hace sonar el silbato.
– Es consciente de que el siguiente partido ya empieza inmediatamente después del pitido final del que está disputando.
La preparación del siguiente partido empieza en cuanto se acaba el que se está jugando (en realidad empieza pasadas un par de horas).
Resumen
– El primer peldaño que tienes que subir para llegar a ser mejor jugador es entender que hay factores mentales que influyen en tus habilidades.
– La fuerza mental puede entrenarse y desarrollarse.
– La forma de manifestar la fuerza mental es la constancia de tu habilidad.
– Tu meta es que tu habilidad dé lo máximo de sí en cada partido y en cada entrenamiento.
Rincón del entrenador
Todo lo que hemos escrito acerca de este juego también te afecta a ti. Como entrenador tienes una gran influencia sobre los jugadores y es de vital importancia ser consciente de la influencia que los factores mentales tienen sobre su rendimiento.
Tu mensaje a los jugadores debe dejarles claro que tienen que trabajar para desarrollar su fuerza mental. Y, al mismo tiempo, tú como técnico también tienes que trabajar tu propia fuerza mental. Pregúntate a ti mismo si has llegado al tope de tu potencial como técnico. Si la respuesta es negativa, este libro te enseñará el camino que te llevará a alcanzar tu máximo potencial como técnico, en cada sesión de entrenamiento y en cada partido.
Los mejores equipos de fútbol del mundo trabajan con psicólogos del deporte. Brasil, Francia o Alemania son algunos de los equipos que se sabe que trabajan con psicólogos. Si es algo bueno para esos equipos, ten por seguro que también es bueno para los demás equipos, así como para los entrenadores y para los jugadores.
Como ocurre al acceder a cualquier puesto nuevo (en tu caso el de ser un lector activo), empezamos por hacer una evaluación inicial que tiene como finalidad establecer en qué condición te encuentras para ganar con la cabeza.
Puede considerarse que la habilidad de un jugador en el campo consta de cuatro elementos:
– El talento del jugador.
– La preparación y las cualidades físicas del jugador.
– La preparación mental y las habilidades mentales del jugador.
– La habilidad del jugador.
La habilidad en el campo = Talento + destreza + habilidad física + habilidad mental.
Al hablar de talento nos referimos al potencial innato con el que ya nace cada jugador.
Destreza es aquello que el jugador ha aprendido por medio del entrenamiento, viendo repeticiones en vídeo y por la experiencia acumulada durante su carrera.
Por habilidad física se entiende todas las características corporales (altura, fuerza, etc.) y el estado de forma del jugador.
Habilidad mental es el grado de preparación que se tiene para jugar y el control que se ejerce sobre los componentes mentales (concentración, creer en tu capacidad, autoconfianza, dominio del estrés, control emocional, etc.).
Anota el porcentaje en que tú creas que cada uno de estos elementos (talento, destreza, habilidad física y mental) contribuye al éxito de un jugador en el terreno de juego (si estás implicado de alguna manera en el fútbol –si eres entrenador, árbitro, jugador, etc.– piénsalo para ti mismo; si no, piénsalo para jugadores que conozcas).
Talento ………………….. %
Destreza ………………… %
Habilidad Física ………… %
Habilidad Mental ……….. %
En esta evaluación ¡no hay respuestas correctas! El único fallo, en nuestra opinión, en la valoración de estos elementos, es la creencia de algunos jugadores de que el elemento más importante es el talento. ¡Aquellos jugadores que consideran que el talento es lo más importante para triunfar, creemos que se equivocan!
Si fuese así, y el talento fuese el elemento más importante para el éxito de un jugador, no debería haber diferencia alguna en el rendimiento de un jugador de un partido a otro, o entre las sesiones de entrenamiento y los partidos, ¡porque el talento es algo innato y no varía de un partido a otro!
Sin embargo, en la realidad, sabemos que tal situación no se da.
En contra de la opinión de que es el talento el elemento que más contribuye al éxito, un gran número de deportistas de todo el mundo y de distintas disciplinas deportivas aseguran que el 90% de su éxito se debe a su capacidad mental.
Según ellos, en el deporte profesional de alto nivel no hay grandes diferencias entre los atletas en los otros elementos. Todos tienen talento, destreza profesional y están bien entrenados físicamente. La única diferencia entre estos jugadores viene dada por su grado de preparación mental y de fuerza mental.
La fuerza mental que hace que un jugador haga gala de sus mejores habilidades con consistencia, incluso en el partido más importante, es lo que marca la diferencia en el éxito de los jugadores.
Pero incluso