Nuevas propuestas lúdicas para el desarrollo curricular de educación física. Antonio Méndez Giménez
relevantes que se han venido estableciendo desde el propio marco de la actividad física.
CRITERIO | CATEGORÍAS | FUENTE |
Energeticofuncional | Juegos de intensidad mediaJuegos activos Juegos de poca intensidadJuegos muy activos | Blázquez (1986) |
Tipo de movimiento | Juegos de luchaJuegos de carrera Juegos de equilibrioJuegos de lanzamiento Juegos de saltoJuegos de coordinación Juegos sensorialesJuegos de marcha | Blázquez (1986) |
Dimensión social | Juegos de equipoJuegos de grupoJuegos individuales | Blázquez (1986) |
Efecto que producen | Juegos sensoriales (visuales, táctiles, auditivos...)Juegos motores (coordinación, saltos, equilibrio...)Juegos de desarrollo anatómicoJuegos de desarrollo orgánicoJuegos gestuales | Blázquez (1986) |
Estructura funcional | Juegos libres y espontáneosJuegos de organización simpleJuegos codificadosJuegos reglamentados | Blázquez (1986) |
Participación/comunicación | Juegos individuales o de superaciónJuegos de oposiciónJuegos cooperativosJuegos de cooperación/oposición | Navarro (1993) |
CRITERIO | CATEGORÍAS | FUENTE |
Objetivos a conseguir | Cognitivo (dominio espacial, lenguaje corporal,táctica)Psicomotor (coordinación, lateralidad, relajación...)Físico (velocidad, fuerza, resistencia, flexibilidad)Valores (seguridad, solidaridad, cooperación, paz) | Narganeset al.(1993) |
Material utilizado | PicasPelotasCuerdas ArosBancos suecos | Narganeset al.(1993) |
Procesamientode la información | Juegos perceptivosJuegos efectoresJuegos decisionalesJuegos mixtos | Lavega (1995) |
Predominio decualidades físicas ymotrices y tipo deactividad dominante | Juegos de fortalecimientoJuegos motores (de locomoción de carrera,de velocidad de reacción y de salto)Juegos de flexibilidadJuegos sensoriales (visuales, auditivos,táctiles, gustativos, olfativos, de orientación)Juegos de equilibrioJuegos de coordinación y rítmicosJuegos predeportivos | Méndez yMéndez (1996) |
Fig. 3. Clasificaciones de los juegos desde la propia actividad física.
Abordar las categorías y formas del juego no es empresa fácil teniendo en cuenta que algunas surgieron como concepciones antagónicas (lo que nos permite su delimitación) y, sin embargo, otras se solapan e imbrican (lo que difumi-na verdaderamente sus límites y dificulta su concreción). Desde un primer momento, los autores compararon dos modalidades del juego: el juego libre y el juego dirigido.
Para Blázquez (1986), el juego libre o espontáneo es el que se realiza fuera de la influencia del profesor. En esta categoría del juego el educador no interviene, es decir, concede plena autonomía al niño frente a las dificultades de la realidad concreta y le da carta blanca en la resolución de los posibles problemas que le surgen. Por tanto, el juego libre se caracteriza por su globalidad, por la ausencia de directrices, es asumido desde la propia individualidad y no requiere un agente externo.
Como contrapunto, el concepto de juego dirigido o didáctico expresa la aplicación que el profesor hace del juego en el campo educativo, que le resta naturali-dad y espontaneidad (Bayer, 1992). La figura 4 resume las ventajas y desventajas del juego libre y del uso del juego dirigido (Moreno Palos, 1985).
JUEGO ESPONTÁNEO | JUEGO DIRIGIDO | |
PELIGROS | Falta de variedad.Falta de perseverancia.Organización deficiente.Falta de dirección.Falta de compañerismo. Falta de medida. | Limitación de la libertady autonomía.Supresión de la espontaneidady de la pureza del juego. |
VENTAJAS | Conocimiento profundodel niño.Conocimiento de las estructurasy relaciones del grupo.Perfecto ajuste con la edade intereses.Rico vivero de juegos dirigidos. | Variedad.Corrección y eliminaciónde defectos.Ecuanimidad de los resultados.Efectos controlados yplanificados. |
Fig. 4. Ventajas y desventajas del juego libre y del juego dirigido.
En segundo lugar, se suele oponer ejercicio a juego y se ubica entre ambas a las formas jugadas. En general, los autores se refieren a los ejercicios como actividades fisicodeportivas totalmente estructuradas o cerradas organizadas y propuestas por el profesor para la mejora del componente de ejecución o el gesto técnico, de forma pura, simple y básica (Díaz, Sáenz-López y Tierra, 1995).
Para Navarro (1993) las formas o actividades jugadas constituyen un tipo de juegos con una estructura simple y de escasa duración. La forma jugada no posee exclusivamente una intención de juego sino que mantiene una dependencia directa con el aprendizaje. Así, la forma jugada supone la adaptación y acondicionamiento de una tarea acorde con una determinada etapa de aprendizaje. Díaz, Sáenz-López y Tierra (1995) también apuntan que los ejercicios pueden ser fácilmente transformables en formas jugadas introduciendo algún elemento lúdico o competitivo. Por otra parte, Devís se refiere a ellas dentro del ámbito deportivo como actividades orientadas a la enseñanza de la técnica y con un potencial táctico nulo (Devís y Peiró, 1992).
Parlebás (1988) distingue tres categorías: los cuasijuegos deportivos, los juegos deportivos tradicionales y los juegos deportivos institucionales. Define los cuasijuegos deportivos como aquellas actividades ludomotrices modificadas a gusto del participante, o actividades libres cuyas modalidades de ejecución dependen de la buena voluntad de los participantes. Los cuasijuegos no se inscriben en una red de sanciones, como los juegos codificados, y no encuentran su desenlace en un resultado final formal concretado por la victoria o la derrota. Es así como na-cieron numerosos deportes tales como el surf, el vuelo libre o el esquí acrobático, por lo que constituyen un vivero inagotable de juegos institucionalizados en un futuro.
En opinión de Parlebás (1988), los juegos tradicionales o juegos deportivos no institucionalizados responden a una tradición surgida en un pasado lejano y pueden disponer incluso de un sistema de reglas muy elaborado, aunque no han disfrutado del reconocimiento institucional.
Moreno constata distintas denominaciones en los juegos y deportes de esta categoría: juegos y deportes populares, juegos y deportes autóctonos y juegos y deportes folclóricos. En definitiva, se trata de actividades lúdicas de carácter local y ancestral que provienen de la presión de generaciones anteriores y que poseen un marcado carácter cultural desde un punto de vista antropológico (Moreno, Mata y Gómez, 1993).
Sin embargo, Navarro (1993) considera necesario matizar esta serie de voca-blos y diferenciar los términos tradicional, popular y autóctono. Señala que tradicional significa arraigado en la cultura, popular que es practicado por la masa de la población, es decir, que forma parte de la llamada cultura popular; y autóctono, que es originario de un país. Según esto, un juego podría ser autóctono pero no tradicional, por haber desaparecido o haber perdido su forma original debi-do a la evolución cultural. También podríamos encontrar un juego popular que no fuese autóctono; y, por último, podría existir un juego tradicional que no fuese popular, por ser practicado por una minoría y haber sido fruto de una difu-sión cultural. En consecuencia, escoge como término más apropiado el de juegos tradicionales, ya que desde una perspectiva antropológica, ese arraigo en la sociedad sería lo más significativo. En función de la edad de la población que practica estas manifestaciones lúdicas naturales encontraremos juegos tradicionales infantiles y juegos tradicionales de adultos. Algunos ejemplos de juegos tradicionales infantiles son el marro, el cortahilos, la caza del balón y el balón contacto (Devís y Peiró, 1992).
JUEGOS DEPORTIVOSDEPORTE
Nos hemos encontrado con dos corrientes respecto al binomio juego deportivo – deporte; una que los considera sinónimos y otra que engloba al primero dentro del segundo.
1. Para Parlebás (1988) ambos términos son análogos y apunta que les caracteriza la presencia de federaciones reconocidas, de instancias dirigentes, de reglamentos legítimos, de competiciones consagradas, de calendarios, de recom-pensas y sanciones específicas. Ese reconocimiento oficial comporta una serie de consecuencias socioeconómicas