Entrenamiento mental. Terry Orlick

Entrenamiento mental - Terry Orlick


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Terry: Muchos deportistas que ganan una medalla de oro se esfuerzan en sus siguientes carreras debido a las muchas expectativas puestas en ellos y a las que ellos se imponen. Tú hiciste muy buenas carreras en la siguiente Copa del Mundo, ¿cómo fue tu centro de atención en aquellas carreras? Kerrin: Estaba cansada cuando comencé la primera prueba de la Copa del Mundo después de las Olimpiadas. No esperaba mucho de mí misma. Salí por la mañana y el calentamiento no salió como me esperaba. No esquié tan bien como esperaba. Había pasado demasiado tiempo pensando en el resultado. Me di cuenta en seguida y cambié el patrón de pensamiento admitiéndolo y haciendo que mi mente se centrara en lo que realmente necesitaba centrarse. Pasé al modo en que funciona bien. Pensé en salir a por todas, ser agresiva y aplicar todas mis ideas clave. Mientras esperaba en el punto de salida, sabía que tenía una oportunidad de ganar la carrera. Salí y puse el piloto automático sin pensar en otra cosa que en mis ideas clave. Mantuve la concentración en todo momento. Fui segunda por tres centésimas de segundo y eso es casi como ganar. Estaba contenta con el resultado tras todo lo que había pasado. Terry: Cuando se desliza en tu mente un pensamiento negativo, ¿qué es lo mejor para volver a centrarte? Kerrin: Cuando me doy cuenta de que estoy teniendo ideas que no quiero albergar y que no redundan positivamente en mí, o cuando comienzo a pensar sobre el resultado o el final, intento darme cuenta y rectificar pensando en cosas que funcionan bien conmigo. Terry: ¿Te ha llevado tiempo conseguir que tu mente y tus ideas trabajen para ti tal y como lo hacen? Kerrin: Me ha llevado mucho tiempo. Recuerdo carreras hace tiempo en que ni siquiera me daba cuenta de la razón por la que todo había salido mal hasta un año después. El año pasado en una carrera en Lake Louise todo había ido bien, y había ganado tres pruebas de entrenamiento. El día de la carrera, terminé quinta, y después me di cuenta de que mi enfoque había sido erróneo. Pensé en lo que no debía. Ahora he comenzado a darme cuenta de que estoy pensando mal antes incluso de la carrera. Esto me da la posibilidad de hacer una buena carrera antes de competir. Terry: ¿Así que cambias la forma de pensar o tu centro de atención antes de que empiece la carrera para tener más posibilidades de esquiar bien? Kerrin: Exacto. Si me despierto y me doy cuenta de que tengo la cabeza allí, en su lugar, dejo que los patrones de pensamiento sigan su curso natural y hago una buena carrera. Si no está allí o algo me distrae en la salida o durante el calentamiento por la mañana, entonces ya conozco cuáles son mis pensamientos para volver a centrarme. Sé cómo volver a la senda de los buenos resultados y al centro de atención correcto.

       APRENDIZAJE CONTINUO

Terry: Parte del plan de evaluación continua consiste en extraer aspectos positivos de toda actuación para mejorar la confianza o sentirte bien, además de aprender de la experiencia. ¿Me puedes comentar algo al respecto?
Kerrin: Me ha costado muchos años saber sacar algo bueno de toda carrera. Si termino última en una carrera, he aprendido a saber sacar algo bueno de ella. La mayoría de las veces me esfuerzo al 110 por ciento y eso es suficiente para mí. Si me esfuerzo al máximo y doy todo lo que puedo dar, tengo que estar satisfecha con el resultado porque no hay forma de dar más. La lección que extraje de las Olimpiadas y apliqué en otras Copas del Mundo fue estar relajada y concentrarme en lo que sé que me funciona. Hay ciertos pensamientos clave que me sirven los días de carrera, y casi todo consiste en relajarse e ir a por todas, depender de que mis instintos naturales tomen el control. Cuando eso sucede, me salen las mejores carreras.
Terry: He notado en los dos últimos años que estás más dispuesta a seguir tu propio camino, a hacer cosas que sabes que te ayudan, a pesar de que haya gente que no está de acuerdo. ¿Cómo ha sucedido?
Kerrin: Practico un deporte individual que se practica como uno de equipo, por lo que a veces es difícil hacer las cosas sola y seguir mi propio camino. Me he dado cuenta de que debo confiar en mí al cien por cien y creer en mí. Cuando necesito hacer algo un poco distinto a lo que necesitan el resto de las chicas, no me importa correr el riesgo para ganar.
Terry: Así que ahora que sabes lo que necesitas para rendir al máximo, puedes respetar esos patrones y sacar provecho de ellos.
Kerrin: Cierto. Aprendes de ti misma a lo largo de los años. Llevo ocho años en el circuito y he aprendido mucho. He aprendido leccio nes de muchas cosas diferentes. Ahora sé aplicar esas lecciones. En las Olimpiadas sabía que tenía que alejarme del equipo y estar sola, sin las distracciones de la localidad. Así lo hice y me salió bien.
Terry: Ahora que has ganado la medalla de oro, mucha gente quiere que le dediques tiempo. ¿Cómo te planteas respetar tus necesidades a pesar de que la gente quiera verte?
Kerrin: Al principio resultaba difícil porque era muy duro para mí decir no. No estaba acostumbrada a ser una campeona olímpica o a recibir tanta atención. Me he dado cuenta de que tengo que escuchar mi interior.Tengo que percibir mis sensaciones, y cuando estoy en baja forma y cansada, decir que no. Tengo que decir: «Lo siento, no puedo esta noche, o la semana que viene o la siguiente; necesito un par de semanas libres». Me he dado cuenta de que no hay nada malo en decir que no y cuidar primero de mí misma, porque mi vida competitiva no ha finalizado. Sé que todavía puedo ganar.
Terry: Es mejor escucharse a sí mismo y al propio cuerpo y hacer algo positivo al respecto antes de estar totalmente agotado.
Kerrin: Cierto. Creo que he aprendido a hacer eso como deportista. Hay que aprender a respetar el cuerpo. A menudo te apercibes una semana antes de que ocurra, de que te estás acercando al agotamiento y que necesitas una semana para recuperarte. Es importante saber escucharte y atender a tus percepciones. Si creo que necesito descansar, descanso a pesar de escuchar a los demás. Porque si no creo que sigo el programa adecuado, entonces no ganaré una carrera. Tengo que creer en lo que hago al cien por cien. El programa tiene que ser adecuado para mí.
Terry: Tu estás muy comprometida con el esquí de competición, pero también con tu familia. ¿Cómo intentas mantener un equilibrio?
Kerrin: Procedo de una gran familia de cinco hijos, y estuvimos muy unidos durante la infancia. Creo que con el apoyo que me dieron me resultó natural ponerlos en primer lugar. Aunque mi profesión es el esquí y eso es importante para mí, también creo importante mantener viva mi vida privada y aparte del deporte. Mucha gente estaba preocupada porque cuando me casara iba a dejar de estar centrada y ya no podría concentrarme en ganar. Sorprendentemente, el matrimonio ha hecho maravillas con mi vida deportiva. Me ha hecho relajarme, trabajar duro, aunque sé que no es el final del mundo si no gano una carrera.
Terry: ¿Cuáles son las lecciones más importantes que has aprendido de mí?
Kerrin: ¡Umm! La lección más importante probablemente sea aprender siempre algo de cuanto sucede y aplicarlo en la siguiente ocasión. Mantenerme relajada. He sacado muchas lecciones de todas las carreras. He aprendido mucho sobre mí misma y ahora puedo estar mucho más relajada. Mis prácticas imaginadas son muy claras. Sé exactamente cómo mantener el centro de atención y sé aplicar todo lo que sé. Sé cómo aplicarlo en todas las carreras.
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