Manual profesional del masaje. Jesús Vázquez Gallego
acumulaciones adiposas por esta acción mecánica que se produce sobre el adipocito. Las técnicas capaces de provocar este efecto serán siempre vigorosas y agresivas.
Paralelamente, al aumentar la circulación local y surgir la hiperemia, la reabsorción de adipocitos se ve incrementada. Otro efecto (más hipotético) podría ser aquel en el que el aumento del gasto calórico se provoca con maniobras de masaje y con movilizaciones del aparato locomotor, que contribuyen a movilizar el nivel de tejido graso, con lo que las reservas grasas tienden a disminuir. Si bien para este supuesto será necesario un plan de ejercicios vigorosos y cotidianos, complementados con una dieta equilibrada y exenta de grasas. No obstante, en el momento actual sabemos que la manera efectiva y eficaz de reducir el tejido adiposo (“bajar las grasas”) es el ejercicio físico aeróbico (bicicleta, footing, escaleras, caminar, nadar, etc.) acompañado de una dieta adecuada baja en calorías.
EFECTOS SOBRE EL APARATO DIGESTIVO
El más destacado de los efectos sobre este aparato es de tipo mecánico, en especial sobre las asas intestinales del intestino grueso. Según la dirección de las maniobras del masaje y la intensidad con que se aplique, puede ser relajante y analgésico (antiespasmódico) si se ejecuta de forma suave y en la misma dirección de las asas intestinales. También puede ser estimulante o excitante de la musculatura lisa si se aplica de manera intensa al estimular el peristaltismo intestinal favoreciendo la progresión del contenido del colon hacia el recto y su posterior expulsión. Por ello se encuentra indicado en casos de estreñimiento.
Secundariamente tiene un efecto reflejo, que en general, es de tipo estimulante.
Otros efectos y aplicaciones se ofrecen en el capítulo “El masaje abdominal”.
EFECTOS SOBRE ESTRUCTURAS NERVIOSAS PERIFÉRICAS
Los efectos del masaje sobre los tejidos nerviosos son sumamente importantes y complejos según se apliquen técnicas suaves y lentas (sedantes) o violentas y rápidas (excitantes y estimulantes).
• Actúa disminuyendo la sensibilidad de las terminaciones nerviosas sensitivas, es decir, disminuyendo la percepción del dolor (analgésico), con sensación de sedación.
• Aumenta la excitabilidad de los nervios motores, de forma que incrementa el tono y facilita la contracción muscular. Este efecto se potencia si las maniobras son bruscas, rápidas y enérgicas (vibraciones, percusiones, fricción profunda).
• Contribuye por la hiperemia que provoca a mejorar la nutrición de los nervios periféricos.
• La disminución de la sensibilidad y la estimulación de la contracción muscular favorecen secundariamente la relajación refleja e indirectamente la relajación psíquica al disminuir el dolor y la tensión.
• Disminuye la estesia táctil al desbloquear parcialmente las terminaciones sensitivas dérmicas.
EFECTOS REFLEJOS
Los efectos reflejos dependen de diversos factores como el tipo de maniobras, intensidad, ritmo, profundidad, superficie de contacto y características de las estructuras “contactadas”, dirección y estado de los tejidos. No obstante, en mayor o menor cuantía todos los masajes tienen unos efectos directos (mecánicos) y suscitan unos efectos reflejos.
La búsqueda de efectos reflejos se basa en las excitaciones nerviosas que las maniobras provocan y su transmisión al sistema nervioso central, de manera que inhiben los influjos nociceptivos a la vez que favorecen la secreción de neuromediadores (endorfinas y encefalinas).
Para más detalles remitimos al capítulo “Masajes reflejos”.
EFECTOS CENTRALES
Existen numerosas teorías sobre los posibles efectos y beneficios que el masaje puede ejercer sobre el sistema nervioso central, de las cuales destacamos estas cinco:
• Activa los controles de inhibición espinal.
• Activa las estructuras nerviosas inhibitorias del dolor a nivel del tronco del encéfalo.
• Altera la transmisión de impulsos nerviosos periféricos del dolor.
• Estimula a nivel central la liberación de endorfinas.
• Efectos máximos con la sumación de varias teorías.
Pero el efecto final y primordial es la sensación de alivio del dolor que puede llegar incluso a la supresión de éste, con sensación de bienestar físico y psíquico.
EFECTOS PSICOLÓGICOS
Aquí se suman las acciones generales de analgesia, relajación y disminución de la ansiedad que genera el masaje a las del resto de condiciones idóneas para su aplicación: temperatura adecuada, charla agradable y ambiente relajado y, si es posible, una música suave y relajante. De esta forma se crea un ambiente propicio para que el efecto psicológico influya en la eficacia del masaje. Los pacientes se manifiestan más afectivos y positivos.
A este respecto el terapeuta debería consultar algunos tratados de métodos de relajación. Si se obtiene una relajación adecuada del paciente, consiguiendo evadirlo de sus problemas cotidianos y trasladarlo temporalmente al mundo maravilloso del subconsciente, se obtendrán unos resultados sorprendentes con unas técnicas adecuadamente realizadas. (Véanse trabajos de Schultz, Lindemann, Caicedo y obras de hatha yoga.)
En el deporte, como veremos más adelante, el masaje es efectivo para mejorar el estado psicológico de los atletas. El masaje lento y sostenido les va a reducir la ansiedad. El masaje rápido y vigoroso va a rescatar al atleta de un estado de apatía. De esta forma el masajista también podrá influir favorablemente sobre el atleta al situarlo en condiciones de mayor motivación, y en condiciones óptimas de bienestar para competir.
Los efectos sobre la relajación psíquica son positivos durante y después del masaje (Field-Morrow et al.), y contribuyen a una mejor relajación muscular.
Si bien los efectos tónicos y sedantes psíquicos están reconocidos no sólo en las personas enfermas, sino también en las sanas, hemos de alertar a incautos, crédulos y también a ciertos “masajistas” que hablan o creen en los “poderes mágicos del masaje”.
EFECTOS BIOQUÍMICOS
El efecto vascular (vasodilatador) se debe fundamentalmente a la liberación de histamina a nivel local.
El masaje profundo y agresivo (posiblemente por microtraumatismo) eleva las concentraciones séricas de mioglobulina, transaminasa oxalacética glutámica, creatín-cinasa y lactato-deshidrogenasa.
Después de un masaje de 20 minutos se ha demostrado un aumento de las encefalinas y endorfinas en sangre. También se ha comprobado su efecto anticoagulante (reduce el riesgo de trombosis venosa) por liberación de sustancias que disminuyen la hiperviscosidad de la sangre aumentando la velocidad de los hematíes y contrarrestando la estasis vascular. Al mejorar las circulaciones facilita el intercambio de líquidos tisulares con lo que mejora la nutrición y metabolismo de los tejidos masajeados.
EFECTOS SOBRE EL DOLOR
Al mejorar las circulaciones, se facilita el intercambio de líquidos tisulares con la consiguiente mejora de la nutrición y del metabolismo de los tejidos masajeados.
Los procesos fisiológicos y las respuestas bioquímicas, así como los cambios anatómicos, influyen de manera importante en la supresión o disminución del espasmo muscular y el dolor. A ellos se suma y complementa el efecto psicológico.
Según Kaada y Torstiembo: “El papel del masaje en la producción de la sensación de bienestar e incluso de euforia podría estar explicado por el aumento del nivel plasmático de endorfinas tras el masaje”.
Últimas investigaciones confirman que los queratinocitos de la piel a través de una compleja