Yoga y medicina. Timothy McCall
por el médico
No digo que nunca se deban usar terapias reduccionistas. Son herramientas valiosas en circunstancias adecuadas y pueden usarse, de forma selectiva, como parte de una visión holística global. Tan sólo hay que entender que tienden a tener un riesgo más alto de efectos secundarios que otras medidas más holísticas –sin estar estas últimas libres de todo riesgo en ningún caso. Del mismo modo, si tienes una disposición favorable hacia la medicina alternativa, no dejes que esto te permita ignorar los riesgos de las herramientas reduccionistas que se han etiquetado como alternativas.
En la tabla 4.1 de la página 66 se comparan las estrategias reduccionistas más comunes que se dan en la medicina convencional con la visión holística del yoga.
HOLISMO EN ACCIÓN: DOLORES
En el capítulo 1, narré la historia de Dolores, que utilizó el yoga, la medicina tradicional china, incluidos los remedios herbales y la acupuntura, y su fe cristiana para enfrentarse a una infección del VIH. Diferentes aspectos de su régimen fortalecieron su cuerpo, hicieron descender sus niveles de estrés, cubrieron sus necesidades emocionales y espirituales y le ayudaron a atenuar el ataque del virus en su sistema inmune.
Cuando nos conocimos, Dolores llevaba más de un año sin medicación convencional y se sentía bien. En aquella época, los médicos controlaban el nivel de células T –una medida de la función inmune–, así como la cantidad de VIH en la sangre. Finalmente, descubrieron que su nivel de células T comenzó a caer de normal a insuficiente –aunque sin ser peligroso todavía– y que simultáneamente su nivel de VIH empezó a subir. Siguiendo los consejos de su médico, retomó la medicación, con algunos de los nuevos fármacos desarrollados en los últimos años.
Dolores había dejado de tomar la medicación en un principio porque había sufrido uno de los efectos secundarios comunes de los potentes fármacos usados para luchar contra el VIH, un problema de distribución de grasas. Comenzó a notar que estaba perdiendo un poco de grasa en el rostro, las rodillas y los codos. Estaba convencida de que era debido a la medicación. Los médicos le aseguraban que tenía buen aspecto.“No, no lo tengo”, les decía ella.“Puedo notar los cambios en mi cuerpo”. Abandonó los medicamentos con el permiso de su médico durante un año y medio y su problema de mala distribución de grasas dejó de avanzar. Actualmente, toma tres medicamentos diferentes. Hasta ahora, los tolera correctamente; los nuevos fármacos parecen tener menos efectos secundarios que los anteriores. Su nivel de células T se ha recuperado y la cantidad de VIH en la sangre está de nuevo por debajo de los niveles detectables.
Además de volver a la medicación, sin embargo, Dolores ha seguido explorando otras vías hacia la salud y la curación. El yoga ha tenido un impacto fundamental en su forma de comer. Aunque muchos occidentales probablemente no consideran la dieta parte del yoga, los yoghis lo ven como parte esencial. Su intenso conocimiento de uno mismo les permite identificar el impacto de la comida que consumen en el estado de la mente del mismo modo que la calidad del ejercicio. “Cuando comienzas a abrir todos los canales internos”, dice Dolores, “empiezas a darte cuenta de la relación que hay entre aquello que comes y cómo te sientes”. Al crecer, Dolores nunca pensó en una dieta saludable. Ahora, dice no ser “vegetariana ni una fanática de la salud, pero tengo cuidado con lo que como”. Siempre que puede, elige alimentos orgánicos.
Además de cuidar de sí misma, Dolores se esfuerza por cuidar a otros. El servicio, que los yoghis llaman karma yoga, es una parte importante del camino espiritual de Dolores.Trabajando con su iglesia, ha colaborado en la creación de un proyecto de alfabetización para adultos en la comunidad. Ella afirma que “hay que ser capaz de compartir y devolver”. Recientemente, Dolores ha comenzado a acudir a clases nocturnas, como parte de su deseo de dejar su trabajo en el mundo de la empresa para convertirse en profesora. Este cambio refleja el proceso que los yoghis llaman encontrar el dharma, el propósito vital o profesional (en el sentido más amplio). Muchas personas descubren que cuando empiezan a calmar su mente tienen un mayor acceso a su intuición, a su sabiduría interior. “Se abrió mi creatividad, se abrió mi conciencia, lo que me empujó a hacer lo que debería estar haciendo aquí. Quiero enseñar, compartir y seguir ayudando donde pueda.”
Herramienta del yoga: BHAKTI YOGA. El bhakti, o devoción, se considera uno de los principales caminos del yoga. Numerosos estudios han descubierto que la gente creyente es más sana. Dolores afirma que la combinación de meditación y oración ha sido clave para su curación. Incluso si la oración está basada en la fe cristiana, este tipo de práctica devota se combina perfectamente con el bhakti yoga. Su fe religiosa se ha convertido también en una fuente principal de comunidad en su vida, lo que los yoghis llaman sangha. “He encontrado una iglesia que me encanta”, cuenta Dolores, “y soy miembro desde hace casi dos años. Es una antigua iglesia pequeñita con un gran sacerdote. Siento como si hubiera encontrado mi casa, espiritualmente”.
UN ENFOQUE DESDE EL YOGA AL CUIDADO DE LA SALUD
Si piensas en ello, la forma de Dolores de enfrentarse a la salud se basa en el yoga. Como los maestros tántricos de la antigüedad, ha adoptado toda herramienta que pudiera ayudarla. Al contrario que aquellos a quienes les disgustan los excesos de la medicina moderna y la rechazan por completo, ella sabe que se han realizado grandes avances en el conocimiento del funcionamiento del cuerpo –y, en su caso concreto, en cómo puede controlarse el virus del SIDA. Incluso durante el año y medio en el que Dolores no tomaba la medicación contra el VIH, acudía a revisiones médicas y, cuando fue apropiado, aceptó retomar la terapia de fármacos. Pero Dolores no se ha limitado a la medicina convencional. Encontró ayuda en la acupuntura, en las hierbas chinas, en la psicoterapia y en una serie de herramientas de yoga, incluidos la asana, la meditación y el servicio, y en la oración.Tomó medidas al mismo tiempo para mejorar el estado de su cuerpo, su mente, sus emociones y su espíritu.También utilizó su capacidad para identificar en su cuerpo un efecto secundario grave de la medicación antes de que el daño fuera grave.Tanto esa capacidad como la confianza para reafirmarse cuando su médico en un primer momento desestimó su queja son fruto de su práctica del yoga.
Dolores abordó su problema de salud desde una visión holística,